Una serie de saqueos a comercios en distintos puntos del país incrementa la tensión política en Argentina, que atraviesa una crisis económica agudizada tras unas sorpresivas primarias presidenciales que golpearon al Gobierno y a la principal oposición, empoderando a un candidato ultraliberal.
Los robos, que tuvieron lugar el martes en los suburbios de Buenos Aires y en algunas provincias, dispararon acusaciones cruzadas entre el Gobierno de centroizquierda y los dos principales candidatos opositores de derecha, dos meses antes de unas elecciones presidenciales que se prevén reñidas.
Los saqueos “no son espontáneos, no es una casualidad. Acá había una vocación de generar alguna suerte de conflicto y nosotros tratamos de impedirlo”, dijo el miércoles el ministro de seguridad nacional, Aníbal Fernández.
La vocera presidencial había acusado previamente al postulante libertario Javier Milei de impulsar los ataques para “desestabilizar” al país, que atraviesa una delicada situación financiera por la falta de divisas, la alta inflación y una dura devaluación.
Tensión al rojo vivo en Argentina
En medio del desconcierto generado por el resultado de las PASO de hace 10 días, que dejaron con amplias chances de ganar la presidencia al ultraliberal Milei, el Gobierno devaluó casi un 20% el peso, lo que aceleró una inflación anual que ya era del 115% y acentuó las dificultades de una población empobrecida.
“Los intentos de saqueos son el resultado del país roto que nos están dejando. Nada justifica estos ataques a la propiedad privada ni la inacción del Gobierno. Necesitamos orden y ya”, señaló la candidata opositora Patricia Bullrich.
Hasta el momento hay más de un centenar de detenidos en los distintos distritos en los que se produjeron los saqueos, según medios locales, en una situación de tal incertidumbre que incluso un dirigente de grupos de desocupados se atribuyó públicamente la autoría intelectual de los ataques.
“Es trágico volver a ver luego de 20 años las mismas imágenes de saqueos que veíamos en el 2001 (durante la mayor crisis del país). Pobreza y saqueos son dos caras de la misma moneda. La Argentina no resiste más este modelo empobrecedor”, afirmó Milei en un mensaje en la red social X, antes conocida como Twitter.
Milei aclaró horas después en otro mensaje que, sin embargo, “no avala la violencia”.
Argentina elegirá presidente el 22 de octubre en unos comicios generales en los que Milei, Bullrich y el ministro de Economía, Sergio Massa, aparecen como favoritos con cerca de un tercio de los votos cada uno.
La elección podría definirse en un balotaje en noviembre, según los expertos.