Joanne Loewenster conoció a su madre biológica a sus 80 años en una residencia de adultos mayores situada en Port St. Lucie (sureste de Florida) donde reside la mujer que hoy tiene 100 años.
Todo comenzó cuando Joanne tenía 16 años y supo que era adoptada. En ese entonces le dijeron que su madre biológica había muerto dos días después de que ella naciera. No conforme con esta historia buscó sus orígenes, contó la anciana al canal WPTV de West Palm Beach.
Años más tarde, su nuera vio la desesperación de Joanne por encontrar a su madre de quien solo sabía su nombre de nacimiento: Lillian Feinsilver.
Esa información fue suficiente pues dieron con el paradero de un hijo de Lillian, Samson Ciminieri. La nuera de Joanne le preguntó a Samson si es que conocía a Lillian Feinsilver y él le dijo "si, es mi madre".
Rápidamente acordaron un encuentro donde no solo donde Joanne pudo conocer a su madre, sino que también supo que tenía un medio hermano: Samson.
A veces Lillian contaba historias de que tenía una hija que había "perdido". "Ella tuvo un bebé en el hospital. Ella decía que había muerto", cuenta su cuidadora, pero nunca mencionó que la dio en adopción.
Lillian tiene 100 años y se encuentra actualmente en una residencia de ancianos. Fue ahí donde recibió a Joanne quien apenas ver sus ojos supo que era su madre. Ahroa las dos saben que están vivas y que pueden recuperar el tiempo perdido.
"Nunca es tarde para colorear con tu madre", dijo Joanne al medio estadounidense.
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