Nicky Jam: me verás volve

Para los fans antiguos lo ocurrido con Nicky Jam (35) es como Metallica cortándose el pelo a mediados de los 90. Algo se quebró, un punto resultó traicionado para tornar su música luego de una década sin álbum, en un híbrido que sólo se concentra en cautivar jovencitas, incluso familias, según ha dicho el propio artista. Atrás quedan sus primeros tiempos como un rimador más duro y callejero, protagonista de una biografía digna de guión. El estadounidense de origen centroamericano formó un dúo legendario con Daddy Yankee, Los Cangris, conquistó el estrellato, descendió en picada envuelto en drogas y alcohol, para renacer musicalmente hasta convertirse en una estrella de categoría mundial del reggaetón. 

En su paso por el último festival de Viña Nicky Jam intentó demostrar lo mismo que Fénix pretende plasmar, que en este proceso de relanzamiento  se ha convertido en un cantante capaz de dominar la paleta romántica y bailable con soltura. En el escenario de la quinta Vergara se advirtió y aquí se confirma: Nicky es ambicioso y engancha pero no tiene la garganta que pretende. En 26 temas con un total de hora y media de música, figura el súper éxito El Perdón junto a Enrique Iglesias.