Solo había visitado Puerto Plata en una ocasión, hace treinta y cinco años, el año en que mi esposa Silvia nació. Viajé en autobús desde Santo Domingo, subiendo y bajando montañas de exuberante verdor, leyendo una novela de Terenci Moix, “No me digas que fue un sueño”, un recorrido que demoró cuatro horas.
25 nov 2023 07:31 PM