Sección: Paula

Una de las cosas más lindas de la cocina, es que si se hace en casa el fin de semana puede ser un momento para pasarlo bien, relajarse y trabajar en equipo. Esta receta de la chef Bárbara Dides (@delicias_dides) busca eso, porque es un proceso casi que de escultura. La clave para la forma es utilizar un bowl hondo de queque previamente aceitado, y que el arroz de sushi –se vende bajo ese nombre en los supermercados– quede lo suficientemente pegajoso para que no se mueva. El relleno puede ser de todo tipo de vegetales y proteínas, pero como venir en el sushi occidental, aquí brillan el salmón, el sésamo y el kanikama, mientras que la palta, lo corona. Para decorar, se pueden poner piezas de rolls encima, o sino, cubrir toda la superficie con palta y espolvorearla con sésamo y salsa teriyaki.

El lychee, fruto exótico de China, es un buen afrodisíaco por su alto contenido en vitamina c, potasio y su rico olor. De hecho, en India lo llaman "el fruto del amor". Hay que hacer la prueba, y para eso, desde Vietnam Discovery (@vietnamdiscovery) nos comparten este cocktail que va con pisco, limón y jarabe de goma para la consistencia. Hay que hacerlo al estilo frappé, para lo que hay que meter sin miedo el hielo picado en la juguera y mezclarlo con los demás ingredientes. Se sirve en copas de martini para que se mantenga frío, y no puede faltar el lychee para decorar.

Para los fanáticos del pisco, aquí va otra idea bien diferente al clásico sour: un pisco punch con naranja, piña, menta y jengibre, para acompañar cualquier aperitivo. Desde Vietnam Discovery (@vietnamdiscovery) nos comparten la receta que hacen en una copa de gin, donde al revés de lo normal, el pisco se echa al final. Lo bueno es que la receta da para una copa grande, pero si se quisiera hacer en jarro, hay que procurar multiplicar los ingredientes de una copa balón (500-650 cc), por la cantidad de cc que éste haga. Entonces por ejemplo, si el jarro es de litro o un poco más, los ingredientes van multiplicados por dos.

No, no es un suspiro limeño, es uno del cielo, que lleva manjar, crema y frutos tropicales. Con menos ingredientes que los postres tradicionales de manjar, éste logra una consistencia firme y que al batir duplica su tamaño, pero ojo, es importante hacerlo de manera envolvente y a velocidad media por poco tiempo, porque sino, queda líquido. La chef Bárbara Dides (@delicias_dides) cuenta que deja que las berries y el mango hacen el trabajo afrodisíaco, y que el postre se sirve en copas largas porque no es uno hostigante, sino que todo lo contrario: te deja con ganas de más.

Según datos de Enseña Chile, un 30% de los estudiantes perdió el vínculo o conexión con su colegio el año pasado. Una cifra preocupante que, en el peor de los escenarios, puede traducirse en un aumento de los casos de deserción escolar. Aquí, se revisan algunas claves para re-encantar a los estudiantes de cara al comienzo del año escolar.

El año pasado las aplicaciones de delivery se convirtieron en nuestra ayudante de cocina, solucionando la falta de tiempo y las ganas de evadir comiendo algo rico ¿Deberíamos preocuparnos?

Este es un trago para valientes, porque es bien picante. El ají es un afrodisíaco entretenido, y para los fanáticos del clásico Margarita, desde Vietnam Discovery (@vietnamdiscovery) comparten esta idea para prender las citas de febrero. Ojo, que la clave para que este tipo de tragos no se vuelvan muy difíciles de tomar, es medir con mucho cuidado la cantidad de ají que se le pone, de acuerdo a la resistencia de cada uno, y también, nunca olvidar acompañar el trago con un aperitivo o plato que traiga leche, quesos o crema. Es un secreto milenario, los lácteos amainan el picante y hacen mucho más fácil disfrutar de su sabor.

Esta receta es rica e intuitiva. Lo que se necesita saber, es el tipo y la cantidad de ingredientes que lleva, el resto es muy fácil y rápido. Bárbara Dides (@delicias_dides) recomienda que para hacer los rollitos, siempre es bueno mirar bien el tamaño de los círculos de salmón antes y picar el resto en base a eso. Si el carpaccio no viene en círculos, siempre se puede hacer a la antigua, poniendo una tacita mediana encima y cortando los bordes. Es importante que sean circulares para que los ingredientes no se caigan y sea más fácil comerlo. Finalmente, se puede acompañar de salsa teriyaki, que es una reducción a fuego lento de soja y azúcar.