Manual de inspiración: así nacieron las canciones de Oh Wonder
El dúo pop inglés se presentará en Lollapalooza este sábado 17 de marzo con una carrera que ya dejó de ser solo un fenómeno de Internet.
Oh Wonder es un dúo inglés lleno de rituales accidentales. El primero: lanzar una canción por mes. Josephine Vander Gucht y Anthony West eran compositores fantasmas que querían escribir canciones pop para otros. Por eso, pensaron que era necesario dejar algún registro de lo que podían hacer. Una especie de portafolio. Y como no existía un apuro u otra intención de por medio, terminó así. Primer día del mes, una canción nueva en su página de Soundcloud.
Con intención o no, el pop enérgico y sus dulces voces al unísono fueron recurso suficiente para captar la atención de la gente de inmediato, haciendo estallar las visitas de su sitio web. Los tracks se subieron mes a mes desde septiembre de 2014 a septiembre de 2015, misma fecha en que lanzaron su primer álbum homónimo, con un éxito en los ránkings oficiales del Reino Unido que ellos jamás se esperaron.
Miles de personas les escribían para contarles sus historias y cómo su método de subir un track mensual funcionaba como un calendario musical que los conectaba con sus recuerdos. Fue el momento en que se convencieron de que debían hacer una carrera como músicos. Y donde comenzó otra de las costumbres: obtener inspiración de las historias de extraños. Por ejemplo, la historia de una mujer que les comentó que su música había acompañado día a día a su hijo fallecido de cáncer, quién rogaba por llegar a fin de mes para escuchar el próximo tema. Esto comenzó a formar en su cabeza la temática del próximo disco.
Según contaban en una entrevista con BBC, el punto de inflexión se dio cuando, un día en el metro de Londres, Josephine se sentó al lado de un tipo ensangrentado y sin dientes. Ella misma había tenido un accidente parecido, el mismo que la tuvo en el anonimato todo el principio de su carrera (literalmente no tenía dientes, por lo que no podía dar entrevistas ni hacer sesiones de fotos), lo que la conmovió profundamente. Sintió el impulso de ir a darle unas palabras de aliento. "Solo quería decirte que estarás bien". Al ver la escena, otra persona en el vagón agregó "yo también me rompí la nariz una vez", creando una conversación de apoyo y anécdotas que dejó a la cantante en un trance. El haber hablado con extraños la inspiró de golpe. Tomó su celular e hizo una nota de voz: "I'm getting high on humans!" (¡Me estoy drogando en humanos!). Y ese es el título de uno de los singles de su segundo álbum de estudio Ultralife (2017).
Bajo el concepto de entender al ser humano, conectar con la gente arriba y abajo del escenario y ser bondadoso con el otro, Ultralife salió a la luz como el disco que convirtió a Oh Wonder en algo mucho más grande que solo un fenómeno de internet. Mezclas de synthpop, electropop, R&B y el particular estilo vocal siempre al unísono, le dan vida al proyecto de Josephine Vander Gucht y Anthony West que debutará en el país este sábado en Lollapalooza Chile, ahora sí , por fin, con todos los dientes en su lugar.
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