Tras 50 días de manifestaciones, 230 monumentos nacionales registran daños

Monumentos intervenidos, rayados e incluso derribados son algunos de los daños que el patrimonio cultural ha sufrido en los 50 días que han pasado desde el estallido social. La situación, que se ha extendido a lo largo de todo el país, está siendo evaluada por el Ministerio de las Culturas y la Secretaría Técnica del Consejo de Monumentos con el objetivo de confeccionar un catastro de los daños y hacer un levantamiento detallado de cada uno de los casos.

Según la información entregada por ambas instituciones, son cerca de 230 los monumentos nacionales que han sido afectados desde el comienzo de las manifestaciones el pasado 18 de octubre. De ese total alrededor de 155 corresponden a estatuas, placas y bustos. El registro contempla además 66 monumentos históricos dañados y 11 zonas típicas.

"Lamentamos el daño generado a los monumentos nacionales porque son parte de nuestro patrimonio cultural. Son un bien que nos pertenece a todos como testimonio histórico, parte de nuestra memoria e identidad y por lo tanto su cuidado y puesta en valor es una responsabilidad que tenemos con las generaciones que vienen", señala la ministra de Cultura, Consuelo Valdés.

Si bien los principales daños que registran los monumentos son rayados con pinturas y spray, hay varios de ellos que también fueron derribados de sus bases. Entre ellos las figuras de Pedro de Valdivia en Concepción o Diego de Almagro en la Región Metropolitana. Los monumentos que acusan mayor deterioro y destrucción son aquellos que fueron incendiados, entre ellos la Iglesia de la Veracruz en Barrio Lastarria, la Escuela Presidente José Manuel Balmaceda en Curicó y el edificio de El Mercurio de Valparaíso.

"Las regiones Metropolitana, Magallanes y Tarapacá concentran las afectaciones en monumentos públicos y las de Coquimbo, Metropolitana, Antofagasta, Atacama, Maule y Magallanes concentran las afectaciones en monumentos históricos", explica Valdés sobre los sectores donde se ha detectado mayor daño a monumentos.

Durante los próximos días los equipos de patrimonio del Ministerio de las Culturas, la Secretaría Técnica del CMN, el Ministerio de Vivienda, MOP y SUBDERE, comenzarán a trabajar en un levantamiento georeferenciado de los daños patrimoniales. Esto incluirá monumentos nacionales, públicos, históricos e inmuebles de zonas típicas, así como también zonas de conservación histórica y bienes protegidos por el plan regulador. El objetivo es generar una plataforma que reúna información detallada con respecto al tipo y porcentaje de daños, materiales y registro fotográfico.

"El propósito es levantar de manera sistemática información que nos permita completar el diagnóstico para estimar de manera más precisa los costos y el volumen de la etapa de recuperación patrimonial que tenemos por delante", señala Consuelo Valdés.

En lo inmediato, se están entregando recomendaciones para la limpieza y prevención de futuros daños. En el caso de los monumentos públicos son los municipios los que tienen la responsabilidad de mantenerlos, mientras que en los monumentos históricos es labor de los administradores, ya sean públicos o privados. Sin embargo, el Consejo Nacional de Monumentos "tiene a su cargo la tuición de los monumentos y vela por las intervenciones que en estos se realizan", explican desde el ministerio.

En el contexto actual y debido a la alta cantidad de monumentos dañados, distintas instituciones trabajan en conjunto con el objetivo de levantar un catastro detallado y entregar las herramientas para limpiezas y futuras restauraciones.

"Se ha tomado contacto con algunos administradores para apoyarlos en materias como seguridad y obras preventivas para proteger monumentos, especialmente ante eventuales incendios", señala Valdés. En cuanto a las recomendaciones técnicas son el Consejo de Monumentos Nacionales y el Centro Nacional de Conservación y Restauración quienes han entregado los lineamientos para abordar limpiezas y cualquier tipo de intervención que deba realizarse a los monumentos públicos con el objetivo de devolverlos a su estado original o si es necesario retirarlos si presentan peligro de caída.