Si algo sabe la industria cinematográfica, es aprovechar las posibilidades de una película exitosa para extender su alcance. Por ello son comunes los remakes, las precuelas, las secuelas, y en el último tiempo las series temáticas y spin offs, que abordan algún personaje en particular; como Better Call Saul, para Breaking Bad. Ahora el turno le llegó a un clásico: Dirty Dancing, de 1987.
Desde 2020, que se ha informado sobre una posible secuela de la película. No sería la primera vez que se vuelve a aprovechar la estela de la película original; en 2004 se estrenó la precuela Dirty Dancing: Havana Nights’, con el actor mexicano Diego Luna en el protagónico. También una serie para televisión, estrenada en 2017, 2017 con Abigail Breslin y Colt Prattes en los roles principales.
Pero en esta ocasión, sería nada menos que una continuación de la historia original; la de la chica de buena situación, Frances “Baby” Houseman (Jennifer Gray), quien se enamora de Johnny Castle (Patrick Swayze) un instructor de baile. La producción estará a cargo de Lionsgate y ya hay algunos detalles al respecto.
“‘Dirty Dancing’ es más que una película: es una piedra de toque cultural que continúa siendo un rito de iniciación”, dice Erin Westerman, presidenta de producción de Lionsgate en declaraciones recogidas por medios estadounidenses. “A medida que nos acercamos al próximo capítulo, sabíamos que teníamos que honrar la profundidad, la relevancia y el calor del original”.
Director, trama y actores
La dirección de la película se le entregó a Jonathan Levine, director de 45 años, que en su filmografía cuenta con títulos orientados a la comedia, como Warm Bodies (2013), The Night Before (2015), Long Shot (2019), y la miniserie Nine Perfect Strangers, donde pudo dirigir a Nicole Kidman. En esta ocasión además tendrá un rol como productor y coautor del guión junto a la actriz Elizabeth Chomko.
“Aunque la Dirty Dancing original siempre ha sido una de mis películas favoritas, nunca imaginé que dirigiría la secuela”, decía Levine en un comunicado. “Al coescribirlo, me enamoré de los personajes (nuevos y antiguos), el mundo de Catskills New York de los 90 y la música, que abarcará desde canciones de la película original hasta hip-hop de los 90. No puedo esperar a colaborar con Jennifer para llevar esta hermosa historia de verano, romance y baile a una generación de nuevos fanáticos. Y a los de toda la vida, les prometo que no arruinaremos su infancia. Abordaremos la tarea con sofisticación, ambición y, sobre todo, amor”.
La mención a la actriz Jennifer Grey, la protagonista original, no es casual. Se espera que ella retome su papel de Baby a 35 años de haberla interpretado. Además, tendrá un rol como productora. “Hemos tenido la suerte de tener a Jennifer como nuestra guía y estamos encantados de tener a Jonathan a su lado en el timón, porque todo lo que hace tiene textura y es romántico, siempre nos pone la piel de gallina”, detalla Erin Westerman.
Respecto al otro protagonista, el actor Patrick Swayze la dificultad principal radica en que este falleció en 2009, tras sufrir un agresivo cáncer. Los medios especializados señalan que la producción ha sondeado a la familia de Swayze para ver como incorporarlo de alguna manera en la secuela. Hasta ahora no hay más detalles respecto a la fórmula elegida, ni de otros nombres a incorporar en el elenco.
Respecto a la trama, no hay detalles al respecto. Tampoco se conoce alguna sinopsis o marco temporal; se estima que si la original transcurría en 1963, la secuela debería ambientarse treinta años después, es decir, a comienzos de los 90′; de hecho se especula con que el filme incluirá hop hop y música de la época, además de composiciones originales. Los medios especulan con una posible fecha de estreno en 2024.