En un viejo sketch de los Monty Python, los soldados ingleses enfrentaban a los nazis con su mejor arma secreta: los chistes. El humor británico resultaba ser infalible y todos los uniformados alemanes, desde general a cabo, caían literalmente muertos de risa. En vista de este avance sorpresivo, el alto mando germano decidía crear su propio súper chiste destructor. Conociendo la tradición y el prestigio de ambos países en los asuntos humorísticos y atendiendo también a los clichés, no es difícil adivinar quién ganaba la guerra.

Cuando se trata de operaciones encubiertas, misiones furtivas y servicios especiales, los británicos también podrían refugiarse en su fama y dar por descontado el triunfo en el campo de batalla. Esto se supondría al ver una película como El Arma del Engaño (2021), donde lo que cuenta es el ingenio táctico frente al poderío bélico, pero también la ayuda del azar. La trama de esta película recién estrenada en Netflix transcurre en 1943 y se basa en un hecho real, la llamada Operación Mincemeat (Operación Carne Picada), una estrategia elaborada por el MI5 británico para despistar a los alemanes.

Todo consiste en hacerlos creer que los aliados desembarcarán en Grecia en vez de Sicilia, que es la opción más lógica. Para esto hay que engañar a unos cuántos oficiales nazis, embaucar a agentes alemanes, contar con el apoyo casual e indirecto de un país neutral y, antes que nada, hacer pasar un cadáver sacado de la morgue por un piloto británico caído en el mar Mediterráneo.

Hay que tener bastante pericia en el relato y oficio de artesano para conseguir que este tipo de premisas accidentadas atrapen al espectador. De lo contrario, se corre el riesgo de naufragar en el tedio y el sinsentido. En este caso, el realizador inglés John Madden (Shakespeare Apasionado) demuestra que es un hábil ejecutor del subgénero del espionaje y cuenta con dos cartas bajo la manga: los actores Colin Firth en el rol del capitán Ewen Montagu y Matthew Macfadyen como el teniente Charles Cholmondeley. Son los encargados de ejecutar el plan bajo el ojo desconfiado del almirante John Godfrey (Jason Isaacs) y el carisma de ambos nos convence de que los agentes secretos pueden ser también esposos frustrados, ratones de bibliotecas, cincuentones enamoradizos y tipos divertidos a pesar de sí mismos.

EL ARMA DEL ENGAÑO (2022) Kelly Macdonald como Jean Leslie y Matthew Macfadyen como Charles Cholmondeley. Foto: Giles Keyte/See-Saw Films, Courtesy of Netflix

El Arma del Engaño es sólo una de las recientes películas sobre la Segunda Guerra Mundial que Netflix ha estrenado directamente. Demuestra que hay interés en el tema y que siempre conviene ver la contienda desde otro lugar de la cancha: además de la cinta inglesa, están la danesa Una Sombra en mi Ojo (2021) y la holandesa La Batalla Olvidada (2020), ambas sobre acontecimientos en sus respectivos países durante el conflicto.

Sin embargo, la película de Madden las supera y tal vez se deba al implícito humor de algunas situaciones, siempre de carácter involuntario, propio de la naturaleza descabellada de la misión y de sus taciturnos héroes detrás del escritorio.