Claudio Bertoni: “La información no es conocimiento. Puedes estar ahíto de información y ser un perfecto imbécil”

CLAUDIO BERTONI
22 DE ABRIL DEL 2020 EL POETA CLAUDIO BERTONI EN SU CASA EN CONCON. FOTO: DEDVI MISSENE

El destacado escritor, pensador y fotógrafo nacional habla con Culto a propósito de su último libro, Miércale. En una dimensión más reflexiva, como viene siendo su escritura en los últimos años, aborda temas que apuntan a Dios, lo digital, la muerte y los asuntos que lo preocupan.


Por estos días, la forma de comunicación que más le acomoda al autor y pensador Claudio Bertoni Lemus (76) es el texto breve. Elige responder vía mail antes que por el teléfono y muy antes que el cara a cara presencial. Esto último claro, debido a la pandemia, por lo que ha mantenido las medidas de autocuidado en su residencia en Concón.

“Vivo la pandemia hoy día como la vivo desde el primer día. Tengo las tres vacunas, no ando en micro, no voy al supermercado, al banco, ni a locales techados. No dejo entrar a nadie a mi cabaña, no visito a nadie y salgo a caminar una hora religiosamente todos los días todo enmascarado”, cuenta a Culto.

Decíamos que la escritura breve, de flashazos, de instantáneas, como los haikús, es la forma en que está desarrollando no solo esta conversación, sino su trabajo escritural. Por estos días, a las librerías nacionales acaba de llegar Miércale, vía ediciones Overol. Un compendio de poemas, anotaciones, microensayos, en una vertiente más bien reflexiva y lejos de su tono más arrabalero de antaño. Acá aborda temas como la muerte, el paso del tiempo, asuntos domésticos, el sexo, dios, las enfermedades, su interés por la literatura japonesa, algunas frases como aforismos algo irónicos (“Si la gravedad creciera nos tragaría”). El libro recoge lo que Bertoni anota a mano en su cuaderno.

“El año 1963 obtuve una beca AFS y desde entonces llevo un cuaderno del que sale todo lo que he publicado hasta el día de hoy. Miércale es una selección de textos de los cuadernos 2020 / 2021. Dejé afuera (sobre todo) el diario explícitamente referido a fármacos dolor y enfermedad”, explica.

¿Y por qué dejó fuera esa parte referida a fármacos, dolor y enfermedades?

Dejé afuera la parte referida a fármacos, dolor y enfermedades porque habría abultado demasiado el libro y además porque pertenecen yo creo a otro libro.

Claudio-Bertoni,-poeta-(43142337)

¿Por qué el título de Miércale?

El título Miércale pertenecía originalmente a otro libro. Mis editores sugirieron el cambio de nombre y yo dije que sí. Además, le viene al poema que lo lleva por título.

Escribe corto, tanto sus respuestas como los poemas y escritos que se encuentran en Miércale. ¿Esa escritura condensada es influencia de la literatura japonesa?

No creo que la escritura condensada sea influencia de la literatura japonesa. Quizá lo sea. Pero es sobre todo porque mi cabeza ha comenzado a funcionar así. Me lanza trozos, relámpagos apretados enteritos, me tengo que detener, sacar la libretita y anotar estos manotazos para mi precisos.

Como lo ha hecho en toda su obra, la que incluye El cansador intrabajable, De vez en cuando, Rápido antes de llorar o Adiós, Miércale también se anota en el terreno de lo confesional.

En el libro, apunta: “Hoy no puedo levantarme/soy una baldosa Polpaico en cama” o “Elegí no barrer lavar ni ordenar”. Para Bertoni tiene un sentido a modo de un registro: “Mi obra entera es confesional. De que soy una baldosa Polpaico en cama es fácil darse cuenta no me puedo levantar porque me siento muy mal. Eso de elegir no barrer lavar ni ordenar es otra cosa es un saludo a mis hermanos cínicos insalubres griegos y a poetas de haikú como Issa Basho y otros con sus innumerables poemas a pulgas piojos y toda suerte de bichos”.

¿Cree que la escritura tiene un cierto efecto terapéutico?

Yo escribo por necesidad. No habría durado 76 años sin escribir (creo). En mi caso es terapéutica quizá.

En Cero, y en los libros que ha publicado en los últimos años se le nota una dimensión más reflexiva respecto a lo que hacía anteriormente. ¿Cómo fue que esa posición comenzó a tomar más relevancia en su escritura?

En un poema de Parra habla de un gato que está echado ahí que no le importa nada que una laucha le muerda la cola le da igual y Parra se pregunta ¿de qué se trata?, ¿misticismo?, ¿iluminación?, ¿nirvana? quizá, se responde; pero sobre todo: TIEMPOTRANSCURRIDO / pienso igual: de ahí viene la creciente reflexión., o como dice el Eclesiastés: “El que añade ciencia añade dolor”. Y en mi caso añadió ciencia (el tiempo), y por ende dolor.

Habla mucho de literatura japonesa, ¿qué es lo que le gusta de esos libros que le llaman tanto la atención?

La poesía de mi muy favorito poeta de haikú Issa habla de una vida sencilla basada en el respeto y el genuino amor por las cosas vivas de este frágil planeta. Igual me pasa con Shiki, Basho y tanto y tanta poeta japonesa como mi muy también favorita y contemporánea Nishiguchi Sachiko.

Además de escritor, hace trabajos fotográficos, ¿Ha seguido haciéndolo?, ¿hay algún proyecto pronto?

Sí, pero poco. Sobre todo pensando en los miles de negativos de imágenes diapositivas y etcétera amontonados por ahí.

Claudio Bertoni Dedvi Missene
El fotógrafo y poeta en su casa de Concón.

De Dios y lo virtual

También hay reflexiones sobre Dios (“Dios no puede hacerme esto”, dice en uno de los versos). ¿Cuál es su relación con Dios en estos días donde la pandemia está más controlada y con las vacunas?

Mi relación con Dios no tiene nada que ver con la pandemia. Viene de antes, décadas antes, de mi colegio, el liceo alemán. Salía intrigado de clases de religión. Actualmente ocupa todo el espacio junto al dolor y odio a la muerte. Dios no puede existir. No es que no crea en Dios, sé que Dios no existe (el papá de Jesús). Por otra parte, siento “que no me buscarías si ya no me hubieras encontrado” (Pascal, creo).

No es japonés, pero sí coreano. El filósofo Byung-Chul Han en su último libro señala que hoy la irrupción de lo digital ha generado una nueva forma de organización política, que él denomina infocracia, y que a costa de fake news y bots ha empezado a socavar las bases de la democracia. ¿Está de acuerdo?

He leído un par de cosas del filósofo coreano y le compro casi todo, aunque no sé si la irrupción de lo digital debilita o no la democracia (habría que hilar más fino). Lo que sí opino es que la información no es conocimiento. Puedes estar ahíto de información y ser un perfecto imbécil.

Dice que la información no es conocimiento, Byung-Chul Han habla de la “sociedad de la información”. ¿Qué piensa de la irrupción del mundo digital en esta era?

Lo que yo pienso de la irrupción del mundo digital en esta era excede con creces mi paciencia energía y conocimiento del tema.

Dice en una parte: “¿Qué es lo que la muerte significa para mí?”, ¿piensa seguido en la muerte?

Nada me intriga, indigna ni interesa más que la muerte.

También señala: “Los enfermos sabemos que existe un paraíso que se llama salud”. ¿La enfermedad es una de sus obsesiones del último tiempo?

Te contesto y me cito Miércale página 92 abajo: “No acepto la vida como es. Tan simple como eso: No acepto envejecer la enfermedad el dolor la muerte”.

¿Qué se encuentra leyendo por estos días?

Leo y releo al mismo tiempo varios libros en mi velador: El Monóculo Melancólico (Guido Ceronetti) / Silencio pitagórico (Susan Howe) / Índice, expurgatorio de los libros escritos (Juan Cristóbal Romero) / La muerte voluntaria en Japón (Maurice Pinguet) / Desnudos justificados por el guión (Mario Verdugo) / Hijo de ladrón ( Manuel Rojas) / Transversal (Pedro Montealegre) / Books of haikus (Jack Kerouac) / Pensamientos verticales (Morton Feldman) / 70 haikus y senryus de mujer (Suzuki Masajo, Kamegaya Chie, Nishiguchi Sachiko) / Tres poetas del exceso, la hermenéutica imposible en Eckhart, Silesius y Celan (Amador Vega) / Diez (posibles) razones para la tristeza del pensamiento (George Steiner) / Revelaciones, conversaciones con fotógrafos chilenos (Daniel Rozas) / Poemas del río Wang (Wang Wei) / Poesía Completa (Leopoldo María Panero) / Antropología de la muerte (Louis-Vincent Thomas) / La poesía no es un proyecto (Dorothea Lasky) / Jesús y Yahvé, los nombres divinos (Harold Bloom) / Cómo vivir juntos (Roland Barthes) / Una taza de té (Kobayashi Issa) / Elogio de la ancianidad -epístolas morales a Lucilio- (Séneca) y muchos más.

Eso sí, aunque tiene miradas sobre diversos temas, la política contingente no ocupa mucho espacio en la reflexión actual de Bertoni. Hacia el final, las consultas apuntan a eso, pero sus respuestas se hacen aún más breves y enigmáticas. ¿Cómo ve el futuro del país con el trabajo de la Convención Constituyente? “No lo veo”. ¿Qué le han parecido los primeros meses del Presidente Boric? “Callado el loro”. ¿Es optimista o pesimista sobre lo que viene para Chile? “Optimista”.

Miércale

Sigue leyendo en Culto

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.