Desde el retroceso de la RM a la fase de Medio impacto sanitario del Seguimos Cuidándonos Paso a Paso, la situación de los conciertos en vivo, volvió a quedar en entredicho. Tras una etapa de apertura sin restricciones, el retroceso determinó que los aforos debían adaptarse a lo establecido en la resolución exenta 494, el que establece -en la mentada fase- la capacidad máxima de un espectáculo sería de sólo 10 mil personas. Mientras que en el caso de recintos cerrados con asientos fijos, el aforo total no podría superar el 75% del aforo habitual.
Si bien, en un primer momento, el subsecretario de Salud Pública, Cristóbal Cuadrado había señalado que la medida no iba a afectar a shows que ya contaran con la respectiva autorización sanitaria, finalmente la seremi de Salud metropolitana envió un correo electrónico a las compañías de espectáculos para advertirles que todos los recitales debían cumplir los nuevos aforos fijados para la fase, independiente si ya estaban aprobados o si ya tenían vendido todos los boletos.
Ello impactó directamente a los dos shows agendados por el ex One Direction, Louis Tomlinson, el pasado 15 y 16 de mayo en Movistar Arena. Con las entradas casi agotadas para ambas fechas, y para cumplir con la disposición legal, el sábado 14 se anunció un tercer show de emergencia con el fin de reducir el número de asistentes. Para ello, se ofreció al público una mejora en las ubicaciones que ya habían adquirido.
Los casos de Karol G y Super Smash
Los shows de la colombiana Karol G, agendados para el 25 y 26 de mayo en el Movistar Arena, ya vendieron 14.500 localidades cada uno, segun cifran sus organizadores, la productora Bizarro Live Entertainment. Ello de inmediato les generó la dificultad de reacomodar su audiencia o verse ante la posibilidad de cancelar, debido a que superaban el aforo permitido.
Sin embargo, en este caso se sumó un desafío no menor: no había posibilidad alguna de generar otro show que permitiera “reacomodar” a los espectadores que ya tienen su entrada comprada. “No se puede porque hay un tema de logística que no da, la carga que trae Karol no da para hacer otra fecha, no se puede. Además tiene muchas fechas”, explica Daniel Merino, gerente de entretenimiento de Bizarro.
Por ello, la productora acordó una solución. El domingo se anunció una campaña de reembolso voluntario, válido para un máximo de 5.000 personas por concierto. A quienes accedan Bizarro devolverá el 100% del valor de la entrada, incluyendo el cargo por servicio, solo al titular de la compra. El plazo para el proceso (que se realiza en el sitio www.puntoticket.com/devoluciones) se extiende hasta las 15.00 horas del 24 de mayo.
Un caso similar ocurrió con el festival Super Smash, el festival de música urbana que reunió a varios exponentes estelares del género (Pailita, Harry Nach, Drefquila, Cris MJ, Pablo Chill-E, entre otros) en el Movistar Arena, el pasado 22 de mayo. Para cumplir con el aforo permitido se inició una campaña en que se ofreció reembolso del 100% del valor de la entrada -incluyendo el cargo por servicio-, además de un 50% de descuento para la segunda edición del Festival -que se realizaría en dos días, en fecha por anunciar-, y un sorteo de 30 entradas para shows de artistas urbanos de la productora en el Estadio Nacional. Desde la productora Bizarro, detallaron que cerca de 3.500 personas fueron las que solicitaron el reembolso.
Desde la productora cuentan que la situación de los aforos ha generado incertidumbre. “En general los artistas están súper complicados de que Chile aún mantenga problemas con los eventos, porque a ellos les complica a la hora de armar los tours. Básicamente porque hay incertidumbre constante de si los shows se van a poder hacer o no, eso hace que estén dudando de venir”, explica Daniel Merino.
Desde los gremios de espectáculos, acusan poca claridad y falta de diálogo. “El sector no puede trabajar con esta incertidumbre, en este diálogo de sordos, sin recibirnos ni siquiera por ley de lobby para dialogar, con cancelaciones sin respetar la palabra empeñada y porque tampoco resistimos multas, y al Sernac culpándonos cuando las cancelaciones son en contra de nuestra voluntad -señala Jorge Ramírez, gerente general de la Asociación Gremial de Empresas productoras de Entretenimiento y Cultura (Agepec)- La autoridad nos señala con el dedo porque no ofrecemos lo comprometido y frente a todos esto, al final, somos el sector que más medidas establecidas tiene: trazabilidad, base de datos completas, control de ingreso, etc”.
Pese a que Ramírez se reunió con el subsecretario Cuadrado antes del cambio de mando, se ha tratado de gestar un encuentro, aunque se le ofreció la chance de conversar con el jefe de epidemiología, doctor Christian García. Pero de las productoras insisten en que no se ha logrado coordinar una instancia.
“Hemos pedido muchas reuniones, ellos no atienden a personas ni a nadie, solamente se remiten a cumplir lo que está en la resolución exenta -detalla Daniel Merino-. Yo he pedido personalmente reuniones y no se ha podido, he tenido que recurrir a otras instancias del gobierno para poder conversar sobre el tema y hacer una bajada al ministerio y la seremi de Salud”.
Pese a todo, Merino es optimista. “Yo confío que la autoridad va a tomar medidas para que los eventos se puedan desarrollar de forma segura y normal o simplemente digan que no se pueden hacer. Lo que es inviable es cambiar las reglas del juego un par de días antes de los shows. Esto involucra mucha gente, hay gente que compra pasajes de avión, hotelería, más la gente de producción”.