Lágrimas, canciones y banderas: fervor masivo marca el adiós a Zalo Reyes

Zalo Reyes siempre estuvo habituado a las masas. Sus apariciones en TV y su debut en 1983 en el Festival de Viña del Mar son ejemplos de encuentros telúricos con el respetable.

Su adiós no podía ser de otra forma. Su velorio en el Gimnasio Municipal de Conchalí -iniciado ayer cerca de las 14.00 horas- ha congregado a miles de personas. La carroza fúnebre salió hace un par de horas del lugar y pasó por la tradicional Pérgola de las Flores, donde fue masivamente homenajeado.

En el lugar, había por ejemplo parlantes amplificando sus canciones a gran escala, como Una lágrima en la garganta, el himno romántico que sonó una veintena de veces, vociferado a todo pulmón por muchos presentes. También había banderas chilenas y otras de Colo Colo, equipo del que había confesado ser hincha. Por supuesto, no faltaron las fotos del Gorrión de Conchalí, las que se vendían a mil pesos.

“¡Zalo, amigo, el pueblo está contigo!”, era el grito que se oía desde el público.

Por lo demás, la gente llegó desde distintas partes de Santiago, con público declarando procedencia desde Estación Central, Puente Alto o Peñalolén, entre otras comunas.

“Él es del pueblo, es el alma del pueblo. Si hubiera estado en otros país, habría sido más grande todavía. Todos los días lo escucho”, dice Bernardo Pino, quien llegó al sitio desde Estación Central. Por su lado, Patricia García, de Conchalí, agrega: “Es de mi comuna, una persona grande, un cantante que nos deja una tremenda pena y nos acordamos de él siempre. Es un triunfador, empeñoso, popular, de nuestro pueblo”

Las pergoleras escribieron con pétalos en el suelo: “Adiós Zalo Reyes. Pérgola Santa María. Ídolo por siempre”. Carabineros estimó en 300 personas los presentes en el lugar.

Se estima que el cuerpo del cantante -que falleció el domingo a los 69 años, como consecuencia de un cáncer al páncreas- será cremado hoy en el Cementerio Católico.