Poco más de un año debió pasar antes de que Mike Patton se sintiera bien para volver al escenario. Fue en septiembre de 2021, cuando el cantante anunció que no estaba en condiciones de comprometerse a una agenda de shows junto a Faith No More y Mr.Bungle, dos de sus proyectos más emblemáticos que volvían a la carretera tras la pausa forzada de la pandemia.
“Tengo problemas que fueron exacerbados por la pandemia que me están desafiando en este momento”, publicó Patton en su cuenta de Twitter, en aquella ocasión. “No siento que pueda dar lo que debería en este momento, y no voy a dar menos del 100 por ciento”.
El regreso de Mike Patton a los escenarios ocurrirá en Chile. Se sabe que el músico tiene un vínculo especial con el país, desde aquella inesperada ocasión en que Faith No More se presentó en el Festival de Viña del Mar, en 1991. Esta vez, Patton llegará al país en los próximos días para presentarse junto a Mr.Bungle en tres fechas: jueves 8 y sábado 11 de diciembre en el Teatro Coliseo (solo quedan entradas para el primero), además de su participación en el Knotfest, junto a Slipknot, Judas Priest y Pantera, el próximo 11 de diciembre, en el Estadio Monumental.
Para llegar a este punto, Patton debió pasar un largo período de recuperación. En una extensa entrevista con Rolling Stone, detalló como fue el momento en que decidió no salir de gira. “Justo cuando Faith No More estaba a punto de volver a la carretera. Fue entonces cuando me perdí, y era feo y no genial. Unos días antes de lo que se suponía que íbamos a salir a la carretera. Les dije a los muchachos: ‘Oigan, no creo que pueda hacerlo’”.
El músico detalló como su salud mental se fue a pique con la pandemia. “Básicamente me diagnosticaron agorafobia; como, yo tenía miedo de la gente. Me asustaba estar rodeado de gente. Y tal vez eso fue porque pasé dos años básicamente en interiores durante Covid. No sé. Tal vez reforzó sentimientos que ya tenía. Pero simplemente saberlo, hablarlo, realmente ayudó”.
En esa charla, detalló que ya estaba en tratamiento y estimaba que a fin de año volvería a los escenarios tras dos años. “Tengo algunos profesionales ayudándome, y ahora me siento mejor y estoy más cerca de volver a sumergirme. Hacia el final del año, estaré haciendo mis primeros shows en, como, dos años, que es el tiempo más largo. desde que comencé a hacer esto, que he estado fuera del juego”.
En ese momento se le preguntó en qué estaban las cosas con Faith No More. “No sé. Podemos reprogramar cosas; puede que no Lo dejaré así. Es un poco confuso y complicado. Así que si lo hacemos, lo hacemos. Si no lo hacemos, también está bien”, detalló.
Más aún, en una entrevista con The Guardian en octubre, reconoció además que durante la pandemia se lanzó a la bebida. “Debido a que estaba tan aislado, salir era algo difícil de hacer -señaló-. Y eso es algo horrible. Y la idea de hacer más shows de Faith No More fue estresante. Me afectó mentalmente. No sé por qué, pero lo de beber simplemente… sucedió”. Aunque agregó que ya había dejado de beber.
Una situación a la que se le sumó, además, la muerte en abril de Gabe Serbian, integrante de Dead Cross, otro de los proyectos de Mike Patton, cuyo segundo álbum se editó esta temporada. “Todavía no puedo creer que se haya ido -señaló Patton-. No sé cómo reaccionaron realmente los otros muchachos, aparte del hecho de que cuando sucede algo así, no es fácil. Y no hay una emoción clara que surja. Significa que estás triste. Estás desanimado”.
Pero las cosas parecen ir mejorando. Así al menos lo aseguró a fines de octubre el baterista Dave Lombardo, quien comparte con Patton en las filas de Dead Cross y Mr.Bungle. “Lo está haciendo bien. Se siente mejor por el sonido de sus respuestas y correos electrónicos. Es optimista y mira hacia el futuro”.
En la mentada charla con The Guardian, Patton señaló estar emocionado por volver a los shows en vivo “pero también tengo miedo”, ¿de que? “Tengo miedo de mí mismo. La banda es sólida como una roca y quiero asegurarme de traerla. Hay algunos problemas en marcha”. Cuando se le contrapreguntó por esos problemas, solo optó por el silencio. “No sé si quiero decírtelo”.