Rec TV: ya no basta con la nostalgia

Hasta 2014 más de 120 mil horas de registros audiovisuales de Canal 13 se almacenaban en dos subterráneos. Era un patrimonio acumulado desde la década del 60 como una mercancía de invaluable valor histórico, pero sin una vía expedita de exposición y renta. Rec TV se sumergió en esos generosos archivos con registros desde Julio Martínez en el Mundial de 1962.

Los primeros años de la señal disponible desde el 1 de abril de 2014, provocaron la reacción lógica de los públicos directamente apelados, entre boomers y generación X, para quienes sentencias como “¿dispara usted o disparo yo?” o “¿qué dice el público?”, pronunciadas estentóreamente por Don Francisco en Sábados Gigantes, son códigos inmediatos para hacer clic rumbo a una época en que no había más que cuatro canales de televisión, como sucedió hasta fines de los 80.

“Era casi un deber compartirlo con la ciudadanía”, asume el periodista Mario Boada, productor ejecutivo de Rec TV. “Esta memoria no es la memoria del canal, sino que es la memoria colectiva, con las cosas buenas, las malas, los triunfos y las derrotas”.

Boada, que se integró como estudiante en práctica a Canal 13 en diciembre de 1978, y posteriormente miembro de la recordada serie Mundo liderada por el fallecido Hernán Olguín, explica que esos primeros años de Rec TV operaron como “un déjà vu” para quienes habían crecido con esa televisión.

“Esa etapa fue relativamente fácil”, confirma, “en el sentido de que no hubo que convencer a nadie. Sencillamente se dieron cuenta de que había una oferta y una posibilidad”.

La pandemia alteró esa velocidad crucero de la parrilla de Rec TV, y su alcance limitado a un par de generaciones arrulladas en recuerdos comprobados. “Se produjo un trasvasije generacional”, explica Boada, proceso confirmado por estudios analizados en la estación.

A través de redes sociales, detectaron el interés de material específico por parte de un público más joven. “Nos pedían contenidos de cuando ellos no habían nacido”, cuenta. “Llegaban mensajes de nietos diciéndonos que vieron el programa Baila domingo y el abuelo salía”.

“Vino una tercera etapa post fenómeno transgeneracional”, continúa el periodista, “donde ahí ya con la ayuda del departamento de estudios pudimos captar qué era lo que estaba pasando”.

Entre las conclusiones, la estación debía cambiar su eslogan para reflejar la ampliación etaria. “Dejamos de ser ‘Rec: la televisión de nuestras vidas’, que le hacía mucho clic a los mayores de 50, a ‘Rec: el ayer y hoy juntos’”.

Mario Boada engarza esta nueva fase de la estación que apela a boomers, gen X, millennials y centennials -en un orden de abuelos, padres e hijos-, al encanto en los más jóvenes por antiguos formatos y tecnologías. “Un canal que se entendía antiguo, retro, tenía algo de cool para los jóvenes, como el efecto del vinilo”.

Además de los archivos, se debía generar contenido propio “que diera cuenta de que estábamos escuchando a las nuevas generaciones”.

Revisando cintas, Mario Boada ha encontrado material que tras un programa cualquiera, contienen de sopetón, por ejemplo, entrevistas y notas políticas del gobierno de Eduardo Frei Montalva en la década del 60, “cuando Andrés Zaldívar tenía 28 años y era ministro”.

Antiguamente era habitual que los canales de televisión reciclaran las cintas, tal como un adolescente de los 80 regrababa cassettes y VHS. Por ese mecanismo, muchos registros se borraron para siempre.

“Obviamente hay periodos (perdidos) con los archivos de todos los canales”, confirma Boada.

“En el caso de TVN”, apunta, “creo que fue complicado”.

“Pero hablando de lo que podemos hablar, que es nuestro canal, siempre ha habido un riesgo de que se pierda material porque una cinta se sacó y no volvió al archivo, un porcentaje mínimo”.

A partir del cambio de milenio, Canal 13 creó un centro de remasterización por el cual pasan los archivos, “si no se verían franjas a los costados de la pantalla”.

La curatoría de Rec TV ha ido evolucionando. Hay portaaviones como los programas de Don Francisco en sus años de gloria, mientras un espacio como Más Música, clásico de los videoclips conducido por Andrea Tessa en los 80 y 90, se apuntala por otros factores.

“Es un fenómeno porque si a alguien le gusta Soda Stereo o Charly García, descubren viendo Rec a estos tótems cuando recién cruzaron la cordillera”.

Boada cuenta que han experimentado con programas absolutamente identificables con el ritmo cansino de la televisión de hace cuatro décadas, como Almorzando en el 13.

“Cómo darlo si la gente se va a quedar dormida”, comenta y ríe el periodista sobre aquel clásico de la conversación y la contingencia al aire entre 1974 y 1999, uno de los espacios regalones del fallecido director Eliodoro Rodríguez, el ejecutivo que llevó a la cúspide a la estación hasta su muerte en 1998. Un programa que -como indica su nombre- originalmente implicaba un almuerzo completo para los invitados.

“Empezamos a darlo y nos llegan mensajes. De nuevo el fenómeno del nieto porque el abuelo vio tal capítulo”.

No todos los archivos provocan el interés del público. Mario Boada explica que los primeros estelares en blanco y negro enganchan menos. “Hay una brecha que es un poquito demasiado larga”, explica. “Esos programas funcionan pero no tienen lo que produce, por ejemplo, el fenómeno de Una vez más (con Raúl Matas), o Julio Jung en Mediomundo”.

El momento en que Canal 13 pasó del blanco y negro al color con César Antonio Santis chasqueando los dedos en el estelar Esta Noche Fiesta para ingresar a la nueva era en 1978, fue un hit de Rec TV. “La pieza de video que la reventó en redes sociales”, resume Mario Boada.

“Nos dimos cuenta que no basta la nostalgia, el recuerdo puro, sino que hay que abrir hebras editoriales para que las nuevas generaciones valoren y se identifiquen, no solo porque el abuelo les hizo un comentario y les explicó”. Así nacieron las cápsulas #MomentoREC.

La misión consiste en superar el encanto kitsch, la mera nostalgia y el recuerdo que seduce por su valor emotivo. Programas como Pasatiempos, con la conducción de Juan La Rivera, instalan al histórico animador de 82 años, en un espacio donde, por ejemplo, se repasa la crisis de los misiles de 1962, el asesinato de John Kennedy y el festival de Piedra Roja -el Woodstock chileno-, interactuando en línea con una millenial “con códigos Instagram, fotógrafa y actriz”.

“Fue un buen experimento”, precisa Mario Boada, “que estuvo bien para efectos de comprobar que el ayer y el hoy pueden estar juntos”.

El área informativa ha sido explotada mediante la recordada serie Mundo de Hernán Olguín que arrancó en 1983, con históricos episodios donde se mostraban las últimas novedades tecnológicas como el primer computador Macintosh, la irrupción del disco compacto, y la fabricación de automóviles de alta gama de marcas como Rolls Royce y Morgan, este último hecho a mano, por lo cual demoraba años en ser entregado a sus acaudalados dueños.

“Dimos todas las temporadas hasta el 89″, cuenta Mario Boada, resaltando el éxito de la reposición. El feedback positivo fue tal que la serie quedará disponible en línea.

Con la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado, Rec TV ha tomado cautela porque “todavía está abierto el trauma del 73″, dice Boada.

“No es que haya evasión del tema”, precisa. “En algunas capsulitas explicamos lo que fue la ENU (Escuela Nacional Unificada) para que la gente entienda, el paro de los camioneros (en 1972), y ponemos todo lo que se dijo”.

Según el ejecutivo la intención es “hacerlo lo más equilibrado posible”.

-¿Hay una mirada editorial impuesta por Canal 13 en este aspecto, o Rec TV tiene algún grado de autonomía?

Tenemos un comité editorial semanal donde está el equipo de las nuevas señales. Hay un intercambio bien interesante. De repente 13C dice ‘tengo esta entrevista que de repente es mejor para Rec’. (...) Hay un cruce editorial y de decisiones. El archivo ya todos lo vieron (...) Quizás el bombardeo de La Moneda para un cabro de 15 puede parecer un juego, porque no tiene la vinculación emocional de lo que significó que se bombardeara La Moneda. Obviamente tenemos un librito como todos los medios, donde hay una guía editorial.

El ejecutivo de Rec TV descarta nuevos programas por la fecha, pero adelanta la emisión de reportajes “tal como salieron” en distintos periodos conmemorativos, “testimonios históricos donde hay entrevistados que fueron protagonistas de primera línea en los dos lados, en el gobierno y en la oposición”.