No recuerda con precisión el detalle, pero a Noodles (el alias del estadounidense Kevin John Wasserman), aún no se le borra el momento en que junto a su banda The Offspring, tocó por primera vez en Chile. “Creo que el primer lugar donde tocamos en Sudamérica fue Santiago, no estoy seguro exactamente cuando, pero sé que fue en el invierno de allí y fue hermoso. Y la multitud estaba enloquecida de energía”, recuerda el guitarrista desde el otro lado pantalla, vía Zoom.

En rigor, el primer show de los californianos en el país ocurrió el 7 de agosto de 1997, en el entonces Teatro Monumental, hoy Caupolicán. Por esos días llegaban como uno de los puntales de una escena de bandas de punk rock más cercana al pop, en que también descollaban nombres como Pennywise, NOFX y unos jóvenes Blink 182. Volvieron en 2013, 2016 y en 2020 marcaron un hito al realizar el último show que se pudo montar en el país antes de que la pandemia obligara al encierro forzoso. “Probablemente ese fue el último concierto de ese tamaño que hubo en el hemisferio occidental antes de que todo se cerrara. Fue una locura”, apunta Noodles (61).

Noodles y Dexter Holland Crédito: Daveed Benito

En estos días, The Offspring se alista para el reencuentro con el público chileno en el marco del festival Lollapalooza, donde se presentarán el sábado 16 de marzo. Un show en el que repasarán lo mejor de su discografía y sus éxitos como Self esteem y Pretty fly (for a white guy), además de algunas sorpresas. “Hemos estado trabajando en algunas cosas nuevas, algunas cosas divertidas, algunas versiones. También un montón de nuestros viejos éxitos, y espero que algunos cortes menos conocidos de nuestros álbums”.

Con su experiencia de años, Noodles (cuyo apodo deriva del slang noodling, que se refiere a las improvisaciones con el instrumento) aquilata lo mejor y lo peor de presentarse en un evento de ese calado, donde deben compartir cartel junto a otros artistas. “Lo mejor es que en los festivales hay una energía especial, sin duda. También me gusta ver a grupos diferentes, bandas a las que normalmente no iría a ver por mi cuenta, pero como están allí, las veo y me sorprendo gratamente con muchas cosas que normalmente no pensaría que me gustarían. Probablemente lo peor es que a veces hay mucho ruido entre bastidores. Si estás en la misma habitación y todo el mundo intenta hacer música, es muy difícil escuchar tus propios pensamientos. Pero ahí es cuando los auriculares resultan útiles; conecto la guitarra al teléfono, me pongo los auriculares y todo va bien”.

¿Y es realmente distinto el público latino respecto del de Europa o el de EE.UU.?

Muy apasionado. El público latino es muy apasionado, muy enérgico, la pasión que tienen es como una locura. Pero ¿sabes? en Italia y España también son así. Ellos son muy diferentes de Alemania o Austria y Francia está quizás un poco en el medio, pero Sudamérica y Chile especialmente, tienen algo propio, sin duda.

The Offspring

The Offspring lleva una larga carrera, en que coexistieron con otras bandas ¿se siente parte de una escena junto a nombres como Bad Religion, Rancid, NOFX?

A Bad Religion siempre nos han parecido los mayores, aunque tenemos edades muy cercanas ellos fueron los primeros. Después están NOFX, Rancid, Pennywise, esas bandas con las que definitivamente crecimos y Blink 182 eran como los más jóvenes, ¿no? eran los jóvenes punks, pero todavía parte de la misma era, supongo.

Blink 182 precisamente estarán en Lollapalooza con su formación original, que incluye el regreso de Tom DeLonge tras ser sustituido por Matt Skiba ¿cómo lo ve?

Me alegro mucho por ellos. Me encantaba cuando Matt (Skiba) estaba en la banda. También tocamos con él un par de veces y me alegro de que Matt haya vuelto a hacer Alkaline Trio con nuestro amigo Adam Willard a la batería. Y ahora Blink ha vuelto con Tom, Mark y Travis, así que creo que es genial. Estoy emocionado de ver a los tres juntos de nuevo.

¿Qué ha estado escuchando últimamente en su móvil?

Personalmente, he estado escuchando el último disco de Pixies, Doggerel, que salió en 2022 así que ya tiene casi dos años, pero es genial. Es uno de los mejores discos de los Pixies, así que me encanta. También hay una banda de California llamada Plague Vendor que me gusta mucho, me encanta. Y hay un tipo, Nate No Face, que he estado escuchando mucho.

¿Y ha escuchado alguna de las nuevas estrellas como a Billie Eilish o a Dua Lipa?

Sí, me encanta Billie Eilish, de verdad. Ha sacado un EP llamado Guitar songs, y creo que esas dos canciones acústicas son increíblemente conmovedoras. Pero me gusta, creo que ella es muy honesta. No he escuchado mucho a Dua Lipa, la he visto en la televisión y cosas así. Creo que estuvo en Saturday Night Live y es genial, pero muchas de las cosas pop no me atrapan. No me molestan, pero no me atrae.

Un álbum que cambió su vida

Fue una ruptura, o al menos una distancia, la que inspiró Self Esteem, uno de los sencillos noventeros que se volvió uno de los ineludibles de Offspring en sus sets de directo. “Teníamos una amiga que recibía llamadas de un ex novio suyo, y ella no le decía que no. Nosotros relatamos lo duro que es cuando estás enamorado de alguien, pero te están utilizando. Toma un tiempo para que te pongas al día. Y si tienes baja autoestima, soportas más mierda de la que deberías. Sí, todos podríamos relacionarnos con eso, pero esa es realmente la historia”, cuenta Noodles.

Lanzada hace 30 años, esa canción fue un éxito. Fue certificada como número uno en mercados como Dinamarca, Suecia y Noruega, además de clasificar como finalista en los premios MTV Europe Music Awards de 1995 en la categoría de Mejor Canción. Pero además, destacó al estar incluida en el álbum Smash (1994), el tercero de la discografía del grupo que marcó un momento clave: los sacó del anonimato y les permitió, por fin, lograr reconocimiento y buenas ventas. Hoy, parte de su set en vivo está dedicado a recordar ese hito en su carrera e incluso lo volverán a interpretar de forma íntegra en un show en su condado natal, Orange, en junio de este año.

“Ese disco creó mi carrera -dice Noodles-. Antes yo era un conserje en una escuela primaria. Yo todavía estaba tratando de averiguar qué quería, pero yo sabía que no quería ser un conserje el resto de mi vida. Realmente no sabía lo que quería hacer. Entonces Smash explotó y tanto Dexter (Holland, cantante del grupo) como yo nos miramos el uno al otro y nos dijimos, tenemos que recoger esta pelota y correr con ella. Él estaba a un año de su doctorado, y dejó todo eso, finalmente lo terminó hace unos cinco años. Pensó que le llevaría unos dos años recuperarlo, pero finalmente lo consiguió. Estamos muy orgullosos del Dr. Dexter Holland”.

El álbum fue lanzado por la discográfica independiente Epitaph Records, fundada por Brett Gurewitz, guitarrista de Bad Religion. “Tuvimos que ensayar mucho antes de ir a grabar. Llamábamos al estudio por la mañana y preguntábamos si tenían sitio -recuerda Noodles-. Y si no lo habían vendido antes, nos lo daban a mitad de precio porque Epitaph no tenía mucho dinero. Era un sello independiente, así que teníamos que hacerlo todo barato. Nos llevó algo así como un mes y medio grabar todo el disco. Conducíamos hasta Hollywood después del trabajo y nos quedábamos trabajando hasta las dos de la mañana. Recuerdo llegar a casa una noche y de repente, vino un gran terremoto. Uno de los grandes terremotos que ocurrió durante ese tiempo. Pasaban muchas cosas en el 94′”.

¿Por qué pusieron un esqueleto en la portada de Smash?

¡Recuerdo haberlo discutido! A alguien se le ocurrió, pero era un esqueleto demasiado literal. Entonces Dexter dijo, no, quiero que parezca una radiografía. Dexter pasó mucho tiempo con los artistas, pero también quería un título de una sola palabra, Smash. Le gustaba una sola palabra, pensó que sería bueno y funcionó.

¿Leían las críticas de los medios?¿les importaban?

En primer lugar, nunca hemos sido un gran favorito de la prensa. Los críticos musicales nunca se han interesado por nosotros, siempre nos han descartado, y está bien. Creo que es probablemente porque tenemos un montón de éxitos pop y luego tenemos éxitos serios. Y a los críticos siempre les gustan más las cosas serias que otras como Pretty fly (for a white guy), odiaban esas cosas. Incluso Come out and play era un poco demasiado pop. Aunque la canción trata de tiroteos entre bandas, es sobre chicos de bandas que crecen en bloques diferentes. Pero es curioso, porque Maximum Rock and Roll, una revista que se dedicaba al punk rock y se inclinaba políticamente a la izquierda, nos hicieron una crítica muy buena cuando salió el disco. Luego empezamos a tener éxito, y de repente ya no les gustaba. Cuando empezamos a tener éxito, empezaron a odiarlo y esas cosas, pero le dieron una crítica decente.

¿Hay planes de un nuevo disco?

Sí, estamos trabajando en ello. De hecho, estamos en el estudio esta semana. Esperamos terminar de grabar a finales de abril, si no, seguramente a finales de mayo. Pero nos hemos puesto manos a la obra y hemos pasado momentos muy creativos en el estudio. Las cosas han funcionado. Muchas veces cambiamos de marcha en el estudio y se nos ocurre algo completamente inesperado. Si no, volveremos a trabajar en canciones en las que sabemos que hay algo. Sólo intentamos dejarlas listas.

The Offspring se presentarán en Lollapalooza Chile el próximo sábado 16 de marzo a las 18.30 horas en el Cenco Malls Stage. Aún quedan tickets disponibles en el sitio https://lollapaloozacl.com/

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