Fue en una exposición de arte en Bellavista, cuando Harry Nach fue por primera vez Harry Nach. “Fui con dos amigos que éramos la Draco Gang en esos tiempos -recuerda en charla con Culto-. Uno se llama John Kief, otro se llama Luca. Y me acuerdo que fuimos a cantar nuestras primeras canciones que habíamos hecho en conjunto. Ellos también me ayudaron mucho a seguir por la rienda de cantar más que de producir”.
Desde entonces Harry Nach (nacido como Harold Ignacio González en el 2000), comenzó una carrera que lo tiene instalado como uno de los nombres ineludibles de la música urbana chilena. A sus 24 años, con cuatro discos, varios hits, una gira española (por Madrid y Barcelona), y más de 30 tatuajes en la piel, se consolidó en la escena nacional e Internacional. Pero en esos primeros años, todo era mucho más solitario. De hecho, no le contó a sus padres de esta incursión en Bellavista. “Era bien piola para hacer todo este tipo de cosas. Pero tampoco me pusieron traba en ningún momento”, recuerda.
Aunque Harry sí estaba consciente que para sus padres no fue fácil asimilar que se quería dedicar a la música. “Era un poco loca la decisión, era un poco irracional, por así decirlo. Puede ser que un padre piense eso cuando no hay industria musical en esos tiempos, porque no había cabida para vivir de eso, al menos lo que se podía ver de afuera. No había ningún artista de 18-20 años viviendo de la música. Entonces, sí, era una decisión un poco loca”.
Pero Harry sí ha logrado vivir de lo que desea. De hecho, viene llegando de una breve gira por España, donde se presentó en Madrid y Barcelona. “Estuvo buenísimo. La gente allá, un cariño tremendo, una energía tremenda en los conciertos que hice. Me sorprendió que hubiera tanta gente que me conociera y que siguiera mi música desde allá”.
Harry Nach es un hijo de su tiempo. Nacido en La Pintana, cuenta que desde chico se interesó en la música. “Siempre tuve como un interés más hacia la música que a cualquier otra cosa. Por ejemplo, el mismo deporte, que también lo intentaba. Aprendí a a tocar guitarra. Luego, me empezó a gustar la música electrónica y decía: ¿cómo la hacen?. Y ahí me interesé en aprender producción musical”, cuenta.
Con los beats de la electrónica rebotando en sus oídos, decidió tomar clases en el DJ School. “Ahí conocí a un un profesor que se llama Daniel, que fue mi profe de producción y me enseñó a ocupar el Ableton, que es el programa que ocupo para hacer mi música. Y de ahí en adelante, era yo solo en la pieza grabando mis temas. La soledad me ayudó mucho con esto también”.
Su gusto musical tuvo un tránsito muy particular. “Yo escuchaba reguetón, pero después hubo un tiempo en que me volví medio metalero y no me gustaba el reguetón. Y luego, no sé cómo pasé a escuchar música electrónica. Estuve bien pegado con lo que era el dubstep, sonido bien fuerte en realidad. Como venía del metal, quizá yo quería la electrónica más pesada. Y de ahí ya pasé al trap, que era como lo que estaba sonando más pesado también”.
Fue así que en 2018 vivió su año clave. Publicó un mixtape titulado El Dizzy Boy, y lanzó la canción Tak Tiki Tak, que le dio una inesperada visibilidad al volverse viral en las redes sociales. Hasta ahora acumula 290 millones de reproducciones y se ha utilizado en más de 700.000 videos de la plataforma Tik Tok; con certificación platino en 11 Países.
El tema nació, precisamente, en su pieza. “Yo vivía en un departamento. Estaba con un amigo, estábamos como fristaleando (improvisando) un poco, porque siempre lo hacíamos de ocio. Pusimos una pista, que era de YouTube, y por ahí tiré la parte que más se pegó. Lo grabamos con mi amigo en mi pieza. Luego, con el tiempo, dos meses, tres meses, yo lo estaba regrabando en un estudio y la pista ya la había hecho el Magicenelbeat. Así ya se volvió realmente el tema que hoy en día”.
Según Harry, cuando salió el Tak Tiki Tak, fue el momento en que supo que la música era su norte. En ese momento alternaba sus shows con sus estudios de Ingeniería en comercio exterior en el Duoc. “La lancé en 2018 y en 2020 empieza a pegarse mundialmente, de la nada. Justo había un Festival de trap, y yo en ese tiempo estaba estudiando y sacando música, pero sentía el cariño de la gente, que me estaban escuchando. Aunque lo veía que se diera lo mejor en mi vida, la música la iba a seguir haciendo. Y se me dio”.
Aunque, aclara que no fue algo de la noche a la mañana. “Yo estaba trabajando ya un poco más profesional, porque ahí estaba trabajando con gente que graba videos, estaba trabajando ya un manager. Ya tenía un pequeño equipo de trabajo, teníamos todo un sueño en conjunto, estábamos apuntando hacia el mismo lado. Pero, sí me estaba dando cuenta que la música también me estaba gastando mucho tiempo y no podía hacer las dos cosas a la vez”.
Esa noche en La Cúpula del Parque O’Higgins, Harry Nach llevó a sus padres por primera vez a verlo en un show. Ahí tomó la decisión. “Para todos era la primera vez en algo así, era mi primer venue grande. Entonces llevé a mis papás y vieron cómo la gente reaccionaba a mi música en vivo, así que les cambié la percepción un poco. Y ahí dije: a esto me tengo que dedicar”.
¿Cómo se tomaron sus padres lo de su carrera, posteriormente?
Hoy en día sí, estamos superunidos como familia. Hubo un tiempo que yo igual andaba más solo, pero era porque estaba creciendo, era más inmaduro. Era un joven con éxito y también que le estaba yendo bien, pero también no estaba tan preparado.
Algunos chicos cantantes urbanos han contado que se han visto en peligro en algún evento, que escucharon disparos o algún intento de robo. ¿Le pasó algo así alguna vez?
Que yo recuerde... no. A lo mejor una pelea que otra. Menos mal, yo no estuve metido en esas peleas, pero no pasé peligro tampoco. Aparte que luego del 2018-2019 ya pasó al 2020 y empezó la pandemia. Y ahí mi música empezó a sonar, ahí ya estaba el Tak Tik Tak, y ahí yo pude haber pasado por todos esos procesos de giras y esas cosas, pero en pandemia decía ¿qué me queda más por hacer? más música.
¿Tuvo que volverse más profesional para consolidar tu carrera?
Sí, de a poco. Uno de a poco va haciendo su equipo, va equivocándose en algunas cosas, aprendiendo en otras cosas. Es todo parte de una evolución y de un crecimiento. Yo creo que como en todos los negocios, en todos los trabajos, en todo lo que tú te enfocas, terminas buscando una madurez y armándote realmente como profesional.
Hace un tiempo falleció Galee Galee, con quien colaboraste y fuiste muy cercano. ¿Cómo vivió ese momento y cómo lo recuerda?
Yo siempre lo recuerdo con mucha alegría al Galee. Obviamente, el momento no fue grato, pero a él lo recuerdo con una alegría y una paz tremenda, una amistad que yo voy a tener de aquí por siempre. Y también hace poco estuvimos en la conmemoración, que fue en el Caupolicán, y ahí estuvimos todos los que lo queremos. Ahí estuvimos todos conmemorando a mi rey ¿cómo nos conocimos? lo invité un día para el estudio, llegó e hicimos That’s lit, nuestra primera colaboración.
Harry Nach al Caupolicán
Tras lanzar cuatro discos, El Dizzy Boy (2018), Moods (2020), Frío (2022), y Flints (2024), además de firmar colaboraciones con artistas como Kaydy Cain, Bizarrap, Pablo Chill-E, Polimá Westcoast, entre otros, Harry Nach se alista para un nuevo hito en su carrera, su primer Caupolicán. Una prueba para cualquier artista chileno que quiera consolidar su posición. “Esto es algo que se esperaba hace mucho tiempo de parte mía y de parte de todos mis fanáticos -explica-. La idea es un show donde yo pueda cantar todas mis canciones, todos los hitos que generalmente en show cortos no se pueden hacer. Es una oportunidad que se dio y ahora lo estamos haciendo en conjunto a mi equipo de trabajo, llevamos un tiempo ya preparando el show”.
Para preparar el show, han ido trabajando ideas e incluso han mirado otros shows como referencia, de hecho menciona al estadounidense A$AP Rocky como uno de sus máximos ídolos. “Sí, yo siempre he sido bien fanático de los shows de muchos artistas, los veo ahí siempre por YouTube, los busco. De repente ahí salen sus referencias, pero en realidad somos bien creativos, igual. Nos gusta meterle de nuestra cosecha”.
Harry adelanta cómo será el espectáculo, a realizarse el próximo 8 de septiembre. “Hay muchos invitados que han estado en mi carrera musical. También yo creo que lo que más esperan mis fanáticos es que cante las a las canciones más antiguas, a las canciones que casi nunca canto en mi show. Y hacer un show totalmente completo de mi carrera”.
¿Cómo ha llevado la fama?
Eso de la que la gente me reconozca, lo he llevado de súperbuena manera. Hay veces que algunas situaciones llegan a ser molestas, pero uno también tiene que entender a la otra persona. Pero si te soy sincero, todo esto del éxito y la fama, en un principio no fue fácil. Hay personas que llevan muchos años preparándose para el éxito. Yo solté las primeras canciones y me llegó el éxito muy rápido, pero no estaba preparado. En la industria de Chile no había pasado algo como lo que pasó conmigo. Entonces, no tenía un ejemplo cercano. Más encima fue en etapas de pandemia donde la mayoría de la gente no estaba tan estable. Y a mí también me afectó todo esto, estaba en una locura.
Hay otros cantantes urbanos que han hablado del tema, es un asunto complejo...
Claro, es complejo sobrellevar algunas cosas o diferenciar algunas cosas, diferenciarte como persona y diferenciarte como artista también. Porque uno tiene que también darse cuenta que la gente en la calle no te va a ver como la persona que eres, te van a ver como el artista que muestras ser. Entonces, también ahí existe algo que nos juega en contra a nosotros que es como la falta de empatía personal de la otra gente. Quizás puedes estar súper mal, se te nota que estás mal y quizás estés triste, llorando en la calle, pero si una persona te reconoce, capaz que ni te pregunte cómo estás y te pida solamente la foto. Y esas son cosas que uno tiene que saber diferenciar: todo lo que es persona con ser artista, hay que ser capaz de diferenciar. Eso es muy bueno para la salud mental, últimamente lo estoy practicando y he estado súper bien.
¿Qué es lo más satisfactorio y lo más difícil de dedicarse a ser artista?
Lo más satisfactorio es poder vivir de esto, es poder darme la vida que siempre quise y también ahora incluir a mi familia en esto que es mi sueño. Y el tema más difícil de ser artista, yo creo que es lo mismo que te estoy contando, un poco esa adaptación que hay que tener y que te puede llegar a afectar en tu salud mental en lo que conlleva ser artista.
El show de Harry Nach en el Teatro Caupolicán, orientado para todas las edades, está agendado para el 8 de septiembre. Las entradas ya están a la venta vía Puntoticket.