Reconocido futbolero, cuando a Noel Gallagher le preguntaron en rueda de prensa por el gol anotado por el crack Marcelo Salas a Inglaterra, en el recordado triunfo chileno en el estadio de Wembley ocurrido en febrero de 1998, el inglés se limitó a responder en su estilo: “fue offside”.

Era la calurosa tarde del viernes 13 de marzo. Gallagher, acababa de arribar al país para presentarse por primera vez en Chile junto a su banda, Oasis. Uno de los shows esperados de esa temporada, puesto que el grupo estaba en el punto de mayor fama de su carrera; el éxito de sus dos primeros discos Definitely Maybe (1994) y (What’s the story) Morning Glory? (1995), los había posicionado como una de las bandas más famosas del mundo, y más con las disputas entre los hermanos Liam y Noel Gallagher, que alimentaban el comidillo de la prensa sensacionalista.

Para ese año, los de Manchester estaban en plena promoción de su tercer álbum, Be Here Now (1997), el que había generado mucho interés y buenas ventas, pese a alguna que otra crítica menos halagüeña. Como sea, el tour mundial incluyó por primera vez un tramo por Sudamérica, que arrancaba en Santiago y seguía hacia Buenos Aires, Río de Janeiro y São Paulo.

Oasis en Chile Archivo Histórico/Cedoc Copesa

Allí fue clave la gestión del productor argentino Carlos Geniso, gerente general de DG Medios, productora que ha concretado algunos de los mayores megaconciertos de la historia local, como las visitas de Paul McCartney, The Rolling Stones, Roger Waters, o las recientes (y masivas) presentaciones de Coldplay en el Estadio Nacional. “En ese 1998, Oasis tenía una vigencia importante. La presentación de ellos fue posterior al haber presentado por primera vez en Chile a U2, en la gira Popmart. La gente que era seguidora de ellos tenía un gran deseo de verlos”, dice al teléfono con Culto.

La primera visita del grupo de Manchester había generado una expectativa. “En las radios sonaban los hits de Oasis, estaban en pleno apogeo. Si bien, venían con críticas al disco Be Here Now, en las radios la aceptación de la gente era buena. Las canciones se rotaban en la programación, entonces había una expectativa por verlos”, recuerda Julio Stark por entonces uno de los conductores de Radio Carolina.

Los primeros integrantes de Oasis que pisaron suelo chileno fueron Noel Gallagher y Paul “Guigsy” McGuigan, quienes arribaron a eso de las 13.00 horas del viernes 13 de marzo. Como informó La Tercera en ese momento, ambos se adelantaron al resto del grupo para hacer promoción y coordinar el trabajo del equipo de producción de 50 personas que ya estaba en el país. Para ese momento, detalló la prensa, se habían vendido 10.000 entradas y todavía quedaban unas 6.000 disponibles.

A eso de las tres de la tarde de ese mismo día, tras apenas un par de horas para sacarse el viaje y comer algo, los dos músicos ofrecieron una conferencia de prensa en el Hotel Hyatt, instancia en la que se refirieron a su gira y alguna que otra cosa sobre Chile.

Conferencia de prensa en Chile, 1998 Archivo Histórico/Cedoc Copesa

Ante los reporteros y gráficos que se agolparon en el salón, Noel respondió preguntas muy generales, según recogió este medio. “Nuestras influencias en general son toda la música que hace felices a la gente, y para nosotros es imposible alejarnos de Los Beatles”. También adelantó algo de sus planes. “Vamos hacer un álbum el próximo año, y ahora queremos ver el Mundial sentados en nuestras casas. No es que estemos cansados de Oasis, sino de lo que sucede alrededor de Oasis”.

Y por supuesto, los ágiles de la prensa le preguntaron a Noel por su hermano Liam (quien arribó con el resto del grupo al día siguiente, el sábado 14). “No sé donde esta. Debe estar preso. Y si no, les aseguro que en seis meses sí que lo estará”. Luego remató en su estilo: “Liam es un pollo loco”.

La agenda de Noel siguió durante la tarde del sábado, es decir, el mismo día del show. Sorprendiendo a los fans, el músico asistió como invitado al programa Fiebre de Sábado por la tarde, de la radio Rock&Pop, la emisora oficial del evento. Ahí lo recibió el entonces director de la radio, Marcelo Aldunate. “Para ese show, R&P era la radio oficial, fue una gestión entre la productora y el sello, Sony Music. En esa época solía pasar que los artistas visitaran los estudios, no era algo raro. Además la radio era de la más tocaba a Oasis en esa época, había una identificación”, recuerda al teléfono con Culto. “Cuando llegó, habían periodistas y fans afuera, él llegó con sus propios CD’s, me acuerdo que programó Small Faces, Led Zeppelin”, agrega.

Ahí ocurrió el famoso episodio en que le mostraron la canción Bolsa de Mareo, de Los Tres, la que le gustó porque le recordaba a Tomorrow never knows de The Beatles y aseguró que podía enseñarle “unos cuantos trucos” al guitarrista Ángel Parra. “Después se sacó fotos con el equipo, la verdad es que para la fama que tenía, fue muy buena onda”, recuerda Aldunate. Gallagher, según detalla la prensa de la época, se fue poco antes de las 14.00 horas, almorzó y desde ahí se dirigió a la prueba de sonido en San Carlos de Apoquindo.

Noel, tocando durante la presentación de Oasis en Chile de 1998 Archivo Histórico/Cedoc Copesa

El Estadio de Universidad Católica ya tenía historia como recinto para espectáculos. “En esos años, 94, 95, 96, ya se habían realizado muchos conciertos en ese estadio -apunta Carlos Geniso-. Ahí tocó INXS, con Michael Hutchence la primera vez en Chile, tocó UB40, Whitney Houston, se presentó Sting con James Taylor. Hay muchos artistas que iban a ese lugar porque era un lugar con una capacidad posible de 30 a 35.000 personas. Era el sustituto de no convocar a tanta gente en el Nacional”.

Horas antes del show, Julio Stark tuvo la oportunidad de conversar con Noel en la zona de camarines del estadio San Carlos de Apoquindo. “Curiosamente, había una disposición a conversar con los medios, y aunque no éramos radio oficial, tuvimos la oportunidad de hacer una pequeña entrevista con Noel en el mismo estadio. Fue breve, muy correcta, hablamos sobre su expectativa sobre el show, qué le parecía Chile, no fue mala onda para nada, estaba haciendo su pega”, recuerda.

Oasis en Chile, 1998 Archivo Histórico/Cedoc Copesa

Esa noche en San Carlos de Apoquindo, ante algo más de 12 mil personas, Oasis interpretó un set de 16 canciones en poco más de una hora, el que incluyó un breve segmento acústico a cargo de Noel. Una sorpresa fue la inclusión de una versión de Setting Sun, un tema que Gallagher coescribió junto al dúo electrónico The Chemical Brothers.

Una noche en el Hyatt

Oasis regresó a Chile en 2006 durante la gira promocional del disco Don’t Believe the Truth con una nueva formación que incluía a los músicos Gem Archer, Andy Bell y Zak Starkey. Esta vez, en el Velódromo del Estadio Nacional y con los chilenos Los Bunkers como número de apertura. Al igual que la primera vez, Noel regresó a los estudios de radio Rock & Pop para una entrevista, en la que criticó a Coldplay y por supuesto a su hermano Liam. Para el goce de los fans, en el show del 12 de marzo, el grupo presentó un set más extenso que en San Carlos.

El guitarrista de Los Bunkers, Mauricio Durán, detalló al portal mexicano Sopitas la impresión que le dejó Noel tras conocerlo en esa experiencia de 2006. “Fue muy amable porque como que uno tiene, o sea, como que él públicamente tiene una imagen de cascarrabias, digamos, y era todo lo contrario: era como muy caballero, muy educado. Estaba todo el rato muy pendiente de ‘¿oye se quieren servir algo?’ y todo el rato fue puro hablar de música. En el camarín tenían puesto un disco de una banda que a nosotros nos gusta mucho que se llama The Kinks y era una sesión en la BBC”.

Oasis en Chile Archivo Histórico/Cedoc Copesa

La última vez de los británicos en Santiago, ocurrió en mayo del 2009, es decir, meses antes del quiebre final entre los Gallagher en Paris que provocó la ruptura del grupo por 15 años. Por entonces ya rondaban los rumores de tensiones, lo que pareció confirmarse cuando Liam arribó a Santiago la tarde del 4 de mayo desde Buenos Aires, junto a los otros músicos. Horas después, llegó Noel en otro vuelo.

La prensa detalló que en el aeropuerto se concentraron medio centenar de fans, pese a la presencia de un numeroso contingente de guardias privados que resguardaron con celo a los ingleses. Hasta allí llegó el ingeniero en alimentos, Gonzalo Salinas, un férreo admirador del grupo. “Llegaron en vuelos separados, lo que nos generó la duda, fue muy loco recibirlos así”, recuerda. Allí se encontró con otros amigos y, entusiasmados por ver a sus ídolos, decidieron seguir a la van que trasladó a la banda hasta el Hotel Hyatt. El día no terminaría ahí para ellos.

Mientras Oasis llegaba al país, la banda chilena Primavera de Praga ajustaba los detalles para su participación como número de apertura. Su cantante y guitarrista, Leo Saavedra era un reconocido fan del grupo. “Yo aprendí a tocar la guitarra con canciones de Oasis, la primera canción que saqué fue Live Forever. En el colegio mis compañeros me molestaban porque era demasiado fanático. Yo les decía, por lesear, ‘algún día voy a tocar con Oasis, ahí los quiero ver’”, dice al teléfono con Culto.

Por entonces, Primavera de Praga ya había publicado dos discos (finalmente lanzaron 4 antes de su disolución en 2017) y se proyectaban como un grupo promisorio. Fue entonces que les llegó la oportunidad. “Pasó porque nuestro manager de la época, Sebastián Arriagada, hizo un trabajo bastante fuerte para mostrarnos -recuerda Saavedra-. Logró hacer que estuviéramos entre los grupos de los que finalmente seleccionaron uno para el concierto. Yo supongo que también influyó que el segundo disco nos posicionó algo más, era un momento en que se juntaron hartas cosas”.

Liam Gallagher en el bar del Hotel Hyatt

Cuando la noche otoñal se cerraba sobre Santiago, Gonzalo Salinas y su grupo de amigos llegaron hasta el Hyatt. “Pensamos que ellos demás bajaban, así que nos quedamos en el bar del hotel. Esperamos menos de una hora, cuando vemos que bajó Andy (Bell), luego Gem (Archer), bajaron de a poco. Liam andaba con unos zapatos de animal print, vestía una chaqueta con una chapita del Manchester City que un amigo le había dado en el aeropuerto. Él se acercó a la barra para pedir un trago, y una amiga que estaba con nosotros, le pidió una foto. Él le tomó la cámara digital y se sacó una selfie con ella. Se dio el tiempo para conversar unos minutos con nosotros y tomarse fotos con todos. Fue muy buena onda. Después me fui”.

Al día siguiente, el 5 de mayo, la banda Primavera de Praga arribó hasta el Movistar Arena. “Llegamos temprano para la prueba de sonido, tocamos con nuestros equipos. Estuvimos bastante cómodos, en realidad. A ellos nos los conocimos porque poco antes (NdR: en septiembre de 2008) había ocurrido que un tipo empujó a Noel en un show y se quebró una costilla, entonces era imposible acercarse”.

Ese incidente ocurrido durante un show en Toronto, llevó al grupo a extremar la seguridad. La prensa de la época detalló que su única exigencia fue contar con una numerosa dotación de guardias que los siguió durante su visita, incluso hasta el recinto del show. El celo fue máximo y Primavera de Praga lo vivió. “Nosotros andábamos con Roberto Cisternas, que nos estaba filmando para tener un registro de ese teloneo -recuerda Leo Saavedra-. Ahí nos vio uno de los guardias, un tipo blanco, enorme, y nos querían quitar la grabación, quedó la embarrada. Al final no pasó nada, pero había que andar con cuidado”.

Pese a todo, los músicos chilenos pudieron ver la prueba de sonido de Oasis. “Los vimos desde abajo. Estaban todos, menos Liam, aproveché de mirarles los equipos, los pedales que usaban. Estuvimos muy bien atendidos, buen camarín, buen catering, lo pasamos muy bien”, dice Saavedra.

Para el músico oriundo de Los Ángeles, quien hoy está abocado a su carrera como solista e integra la banda Miles de Aves (quienes abrieron a Red Hot Chili Peppers en sus shows de 2023) ese hito fue impulso en la carrera del grupo. “Claro que sí, en el fondo, para llegar a más gente. Los fans de Oasis en general ya sabían de nosotros, pero salir en los medios gracias a eso es lo que al final permite hacer ruido”.

Esa noche en el Movistar (organizada por la productora Time for fun, que no accedió a atender a Culto para esta nota), Oasis interpretó un set de 20 canciones, donde repasó los hits de carrera y algunos cortes del que sería su último disco hasta ahora, Dig out your soul (2008).

Entre el público estaba Pablo Salvo, un fan acérrimo del grupo, quien hasta ha participado en bandas tributo. “Los había visto en el 98′ y en el 2006. Para el 2009 ya estaba casado y con una hija. Mi señora me preguntó si los había conocido, le decía que no porque es difícil y todo eso. Entonces a ella se le ocurrió hacer una reservación en el Hyatt, que era donde se estaban quedando”, cuenta a Culto.

Tras terminar el show, Salvo y su mujer subieron a su auto, se trasladaron hasta el hotel y accedieron al bar. “Había gente esperando afuera. Pasó más menos como una hora, hasta que vemos que llegó la delegación de Oasis. Noel pasó rápido, subió directo. Luego pasó Liam por el pasillo, justo al lado de donde estaba, lo vi de frente, le dije you’re the man’, me miró y me dijo ‘you’re cool’”, recuerda.

Liam Gallagher en el bar del Hotel Hyatt

Rato después, el grupo, sin Noel, bajó hasta el bar del Hyatt. “En el bar había un pequeño escenario con un piano, una tipa cantando y una batería -recuerda Salvo-. Llegaron los músicos de Oasis y se acercó Gem Archer a preguntar si podían tocar. Ahí tomó una guitarra que había y se puso a tocar, lo acompañó el baterista Chris Sharrock. Vi que Andy (Bell) también quería tocar, pero no agarró instrumento. Todos esperamos a Liam, pero él se quedó tomando y un guardaespaldas de ellos se puso a cantar. Tocaron un rato, no más de unas cinco canciones, pero solo covers, no tocaron nada de Oasis”.

Tocata improvisada en el bar del Hyatt Foto: cortesía de Pablo Salvo

El productor Carlos Geniso ha podido ver a Noel Gallagher en sus visitas posteriores a Chile, como la de 2012, cuando tocó junto a su banda en el Teatro Caupolicán. “Recuerdo que fue el día que salió campeón el Manchester City y ellos querían ver el partido, tuvieron que ir a un bar. Pusieron la pantalla, fueron a tomar cerveza, lo pasaron bien, después se fueron al Caupolicán. También tuve la oportunidad de verlo en 2017, cuando U2 se presentó tocando el Joshua Tree, él fue el invitado especial de esa presentación e hizo un set con su banda. Él es muy normal, de saludar ¿cómo estás?, es gente humilde, nada de protagonismos, ni de exigencias exuberantes”.

Para su próxima visita al país del 19 de noviembre de 2025, en el marco de gira de reunión, ya hay una alta expectación. Por lo pronto, la venta de entradas comenzará el miércoles 13 de noviembre a las 11 de la mañana a través del sistema Ticketmaster.cl

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