Duki abre la noche urbana de Viña con intenso show ante un entusiasta y juvenil “Monstruo”
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Tras un inédito arranque de la noche con la final de las Competencias folclórica e internacional, vino el debut en la Quinta Vergara del trapero argentino, una de las estrellas del género allende los Andes. Un show seguido con fervor por su público que le dio las Gaviotas de Plata y Oro.
La penúltima noche del Festival de Viña, la del viernes 28 de febrero, llegó cargada de puntos de interés. El cartel anunciaba un día estructurado en torno a la música urbana, a su vez, en tres ejes: la bullente escena argentina, con Duki, la estrella trasandina (el más aplaudido cuando los animadores anunciaron el programa); un número chileno, como Kidd Voodoo y un representante del mundo latino con Eladio Carrión.
Por ello, el público era básicamente gente joven menor de 30 años. De hecho, esta noche fue la tercera que se vendió más rápido de todo el Festival. De modo que se les veía muy entusiasmados en la previa, cuando se suele programar música envasada para prender el ambiente.
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Pero la muerte de Miguel “Negro” Piñera, anunciada durante la tarde, le sumó un condicionante. Más porque tuvo una acotada historia con el Festival, donde se presentó en 1983. Por ello, como adelantó Culto, los animadores pronunciaron unas palabras y en las pantallas se proyectaron fotos y algunos clips de su participación en la gala, su última aparición pública.
El Festival también tuvo un cambio en su programación y arrancó, de manera inédita para los últimos años, con la final Folclórica en que se presentaron los representantes de Chile, Bolivia y Ecuador. Finalmente la Gaviota de Plata (mas US$35.000) fue para los chilenos Metalengua.
Siguió la final intencional, con las presentaciones de Chile, México y España. La Gaviota de Plata la ganó el representante mexicano, Kakalo, con su canción Tierra tragarme.
Vino entonces el primer número musical. El argentino Duki salió a escena bajo la ovación del juvenil “Monstruo”. Una puesta en escena que incluye baterista y un par de músicos de apoyo, en una tendencia a tocar trap con apoyo de banda en vivo. Algo así como un cruce de rock y música urbana que le suma potencia a las canciones (en algunos temas hasta incluye solos de guitarra eléctrica).
El resto lo hace el carisma del trasandino y su rápido flow para las rimas, que a tono con el estilo, despliega en su interpretación sin mayores aspavientos. No despliega pasos de baile, más bien sigue la música y maneja los tiempos. El show además aprovecha bien el despliegue de visuales en las pantallas distribuidas en la Quinta Vergara.
Duki es uno de los nombres claves en el ascenso del trap en Argentina. Ha colaborado con artistas como Bad Bunny, Wiz Khalifa, Arcángel, Bizarrap, Mike Towers y hasta con Eladio Carrión.
Y las credenciales se confirmaron. El “Monstruo” siguió con atención el show, coreando buena parte de los temas como Además de mi , Si te sentis sola, Buscarte lejos, entre otros. Un repertorio más bien ecléctico que pasa por varios momentos y beats, desde el trap más “duro”, a pulsos más bailables.
Vino entonces la primera entrada de los animadores, con la subsiguiente entrega de la Gaviota que se hizo rápido, a tono con el extenso programa de la noche. “Muchas gracias, loco”, agradeció el oriundo de Almagro antes de seguir con la BZRP Music Sessions #50, la que lanza una letra que mira hacia las raíces. “El primer rapero argentino en haberse pegado que sea de mi barrio/Y no teníamo' nada, nos faltaba tanto, pero le metí como un warrior”. Para luego seguir con la reguetonera Top 5.
Un momento sorpresivo de la noche fue cuando pasaron los temas de vocación más pop. Así ocurrió con el hit Marisola, de Cris MJ, en que el trasandino participó en la versión remix junto a Nicki Nicole y Standly. Algo similar cuando pasó En cámara lenta, un éxito en que se sumó a una pléyade de estrellas (Emilia, Tiago PZK, FMK, Rusherking, Maria Becerra y Big One).
Tras casi una hora, el mismo Duki marcó el cierre de la presentación, mostrándose además muy consciente del formato del Festival. Siguió con el hit Goteo, con su fraseo que se despliega en tempo rápido. Vino otra entrada de los animadores, para la entrega de la Gaviota de Oro, firmada con el aplauso del “Monstruo”. El chico se vio emocionado por lo sucedido. Al cierre, se despidió con Malbec, su otra de sus colaboraciones con Bizarrap.
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