Llega bestseller de Martín Sivak sobre la muerte del padre

Sus primeras lecturas fueron las páginas deportivas de los diarios; creó la primera revista de su colegio y a los 15 años ingresó a un taller de periodismo en el diario Página/12.

"Entonces siempre tuve la idea que iba a trabajar de periodista", dice el autor argentino Martín Sivak (1975), quien estudió periodismo y sociología, en su país, y más tarde historia en Inglaterra.

Luego hizo un doctorado en la U. de Nueva York, en EEUU. Por esos años, en 2001, comenzó a escribir una historia donde el protagonista es su padre, Jorge, quien se lanzó desde el piso 16 del departamento familiar, el 5 de diciembre de 1990. Jorge Sivak fue un banquero comunista, que había sido dirigente estudiantil, guerrillero, abogado de presos políticos, hincha de Independiente y fumador de 60 cigarrillos diarios.

"No dejó una carta, ni un borrador o notas sueltas. Nada, ni una sola palabra (...). Papá se mató el día en que el Banco Central formalizó la quiebra de su banco, último sobreviviente de un conjunto de empresas de la familia", se lee en El salto de Papá, libro que Martín Sivak publicó hace un año por Seix Barral. El ejemplar va en su octava edición, con más de 25 mil copias vendidas en Argentina. El diario español El País eligió el título entre los 20 mejores libros publicados en Latinoamérica en 2017.

"No me esperaba esto. Créeme que fui el primer sorprendido. Los periodistas estamos acostumbrados a escribir sobre los otros. Es el libro más difícil de escribir, porque implica no solo contar la historia, sino exponerla y decirla en público", dice Martín Sivak al teléfono desde Buenos Aires, quien estará la próxima semana en Santiago.

El autor de investigaciones como Jefazo, retrato íntimo de Evo Morales (2008) y Clarín, una historia (2013), es el invitado especial a la ceremonia de entrega del Premio Periodismo de Excelencia organizado por el Departamento de Periodismo de la U. Alberto Hurtado, el próximo martes, a las 20.00 h.

"Yo creo que es un libro de reescritura más que de escritura. Cuando realmente lo terminé, sentí alivio", cuenta Sivak, quien en la primera parte de El salto de Papá se refiere a sus recuerdos de infancia, como también a las consecuencias del secuestro, durante 28 meses, de su tío Osvaldo. Un bullado caso donde a pesar de que la familia pagó más de US$ 1 millón, igualmente el hermano de su padre, también empresario, apareció asesinado, en 1987.

"Tras esa primera parte me di cuenta de que no estaba la voz de mi papá. Entonces necesitaba entrevistar a su psicoanalista, al peluquero, a sus amigos guerrilleros, banqueros, a los empleados del banco. Me entregué a ese absurdo que es hacer un reportaje sobre mi papá", señala Sivak, quien adelanta que ya fueron vendidos los derechos del volumen, mediante su agente Andrew Wylie, para ser adaptado al cine.

Sivak expone en el libro una serie de teorías sobre el suicidio del padre. "Hay una cosa con el honor muy fuerte. Mi padre fue preso político en los 70, y le resultaba intolerable la idea de volver a la cárcel por un delito económico producto de la quiebra del banco", dice el autor al otro lado del teléfono.