Fiesta de San Lorenzo de Tarapacá convocará a 70 mil personas

Cerca de 70 mil fieles del norte de Chile y de los países limítrofes arribarán a la Quebrada de Tarapacá para participar en la fiesta de San Lorenzo, patrono de los mineros, transportistas y agricultores, cuya celebración tiene más de 470 años.

Al poblado, ubicado 102 kilómetros al noreste de Iquique, llegará una treintena de agrupaciones de bailes religiosos y numerosas bandas de bronce, las que rendirán un homenaje al santo católico a través de diversas ceremonias religiosas, que se inician este fin de semana y que se proyectan en el poblado con una masiva concurrencia de peregrinos, hasta el 10 de agosto.

El alcalde de Huara, Carlos Silva, asegura que el poblado cuenta con todos los servicios necesarios para recibir a los feligreses, ya que, normalmente, vive en el lugar apenas un centenar de agricultores. "Esta es la primera vez que la fiesta se realiza con tanta organización. Se ha dispuesto un contingente para trabajar en ella, con un grupo de profesionales que estarán una semana en el poblado. El objetivo es garantizar un normal desarrollo de las actividades, ya que cada año se ha ido incrementando el número de feligreses".

La autoridad afirma que San Lorenzo de Tarapacá es la segunda más importante de la región, después de la celebración de la Virgen del Carmen de La Tirana. En ese sentido, Silva destaca que para tener un mejor funcionamiento se dispondrá la atención médica gratuita a quienes integran los bailes religiosos. También, Carabineros enviará casi un centenar de efectivos para resguardar la seguridad en el poblado, el que fue declarado zona seca. Además, se ejecutarán exhaustivos controles sanitarios para garantizar el bienestar de los habitantes y de los fieles.

El diácono del poblado, Ibar Escobar, quien es administrador parroquial de Tarapacá, indica que esta es una de las fiestas religiosas con más arraigo y tradición en el norte. "Según los antecedentes históricos, los primeros españoles, que llegaron a la zona cerca de 1540, ya veneraban a San Lorenzo, por lo tanto, podríamos deducir que esta fiesta tiene más de 470 años de historia. Los antecedentes más oficiales sí dan cuenta de que en 1720, cuando se construyó el templo, este religioso español comenzó a ser adorado. Esta celebración se caracteriza por su cercanía con el pueblo y con los sectores más vulnerables de la comunidad. Desde el punto de vista sociológico y religioso, San Lorenzo tiene aceptación y despierta mucha devoción en la comunidad".

El religioso espera una alta afluencia de visitantes durante estos días.