Este 21 de noviembre, Franco Parisi pasó al anecdotario electoral como el único candidato a la Presidencia de la República que compitió sin haber estado nunca en suelo nacional ni haber recorrido el país de manera presencial.
Aun así, el candidato inscrito por el Partido de la Gente ayer consiguió 869.796 de los votos, lo que corresponde al 12,9 % de las preferencias, casi tres puntos más de lo que logró en la presidencial de 2013.
El sorpresivo resultado de Parisi fue acompañada de la irrupción de su partido como una nueva fuerza en el Congreso que al cierre de esta edición estaba eligiendo seis diputados.
A las 19 horas, cuando el conteo del Servel mostraba un tímido 4,39% de los votos escrutados, la votación del economista advertía un duro golpe para la centroizquierda aglutinada en Nuevo Pacto Social y también para Chile Podemos Más que ayer competía con Sebastián Sichel.
Avanzado el escrutinio de las mesas Parisi se consolidó en toda la zona norte del país, preferentemente más ligada a la centroizquierda. Mientras que la expresidenta del Senado se ubicaba al cierre de esta edición en el quinto lugar de las opciones con un 11, 66% y el exministro de Desarrollo Social con un 12,69%.
En Arica y Parinacota, Parisi logró con un 28,7% de los votos, solo superado por el líder de Republicano, José Antonio Kast (29.6%). En Tarapacá, en tanto, quedó en segundo lugar de las preferencias con un 27,5%.
Su mayor votación fue en Antofagasta donde se impuso en el primer lugar con un 33, 7% de los votos.
También resultó sorprendente su votación en Atacama, donde Provoste lanzó y cerró su candidatura. Allí Parisi se ubicó en segundo lugar detrás de la senadora con un 24%.
El caso de Parisi solo es comparable con la elección de Eduardo Cruz Coke Lassabe en la senatorial de 1941, donde fue electo estando de viaje fuera de Chile. La diferencia, sin embargo, es que la situación del economista no fue circunstancial, pues su diseño no consideró nunca estar en país para enfrentar su candidatura a La Moneda y hasta ayer permanecía en su residencia en Alabama, Estados Unidos.
“Hay planificación de ir a Chile, pero no puedo decir cuándo”, dijo ayer a través de un contacto de prensa. Durante la tarde también deslizó que -de cara a la segunda vuelta- su conglomerado definiría sus apoyos a través de una consulta digital.
Pasada la medianoche, el economista se refirió a los resultados a través de sus redes sociales. “Chile habló. Gracias a los casi 900 mil chilenos que creyeron en una forma distinta a la izquierda y derecha para gobernar Chile”, dijo.
La irrupción
El candidato presidencial -que debía votar en la mesa 28M de la Escuela Palestina de la comuna de La Reina- levantó su opción una vez que el Partido de la Gente se inscribió formalmente en julio, con 43 mil afiliados a nivel nacional.
A través de una campaña digital fuerte, Parisi apostó a superar el 10,1% de votos que obtuvo en la presidencial de 2013.
En su campaña nuevamente apostó a la crítica en contra del establishment político. Esta semana incluso cuestionó el reciente allanamiento de las oficinas del Partido Comunes por la indagatoria por irregularidades en el pago de cuantiosas remuneraciones en la candidatura senatorial de Karina Oliva, el que calificó como “una operación política”. Por lo mismo, prometió que -de resultar electo- llevaría a cabo una profunda reforma al sistema del Poder Judicial en Chile.
Las querellas
Parisi enfrentó la campaña con una serie de acusaciones en su contra, como el no pago de una pensión alimenticia por parte de su expareja en Chile y una querella por estafa y lavado de activos por parte de Inmobiliaria Cerro Colorado, filial de MBI Inversiones, que lo sindica de urdir un plan para quedarse con un edificio en La Cisterna sin pagar por la operación.
Ante los cuestionamientos habló de una confabulación en su contra. Dijo que la acusación provenía de los grandes grupos económicos a quienes no les gustaba su candidatura. También sostuvo que él dejó de formar parte de Royal Estate meses después de que surgieran las denuncias de vecinos del denominado “Edificio sin Ley”, inmueble cuyos arrendatarios denuncian que en su interior ocurren actos de narcotráfico, prostitución y violencia.
¿Por qué no llegó?
Hasta este domingo había dudas sobre cuál sería el destino de Parisi si llega al país (una opción que por ahora está descartada). Contrario a lo que se especuló, el ingeniero y académico no habría quedado detenido en el aeropuerto por sus procesos judiciales, pero sí se le habría prohibido la salida del país, pues mantiene vigente una orden de arraigo nacional debido al no pago de pensión alimenticia a sus gemelos de 14 años.
Primero dijo que no llegaría en la segunda quincena de octubre por motivos laborales y que había solicitado asilo político en Estados Unidos. Posteriormente cambió de planes, aduciendo que sería padre y llegaría al país el 7 de noviembre, para participar del último debate Anatel previo a las elecciones y, posteriormente, cerrar su campaña. Sin embargo, después acusó, justo antes de la fecha estipulada, que debía someterse a un PCR por ciertos síntomas de Covid-19. El primero que se hizo resultó “inconcluso”, pero el segundo arrojó “positivo”.
Por otro lado, por el lío con la inmobiliaria Royal, el exvicedecano de la Facultad de Negocios de la Universidad de Chile si hubiera llegado al país tendría que declarar por la querella que se tramita en su contra en el 4º Juzgado de Garantía de Santiago.
El despliegue de Parisi no sólo se sustentó en llamados a sus adherentes a crearse cuentas en dichas plataformas, sino que también en una estructura política que permitió en poco tiempo al PDG llevar un total de 380 candidatos a diputados, senadores y consejeros regionales (cores).
Sus estrechos colaboradores en todo momento impulsaron su candidatura. Se trata de los publicistas Giancarlo Barbagelata (Viña del Mar) y Juan Marcelo Valenzuela, candidato a diputado del PDG por Valparaíso, y Daniel Manríquez, autodenominado “halcón” (Arica). Estos dos últimos exempleados de Felices y Forrados, la firma de gestión financiera que fundó Gino Lorenzini y que luego de que cerrara la empresa, decidieron plegarse a la campaña de Parisi. Hoy Lorenzini y Parisi están distanciados.