El Ministerio de Salud ha confirmado en el país 14 casos de la denominada cepa P1 o “de Manaos”, una variante del coronavirus detectada originalmente en Brasil y que se ha revelado como más contagiosa, resistente y agresiva.

Así se consigna en su último Informe Epidemiológico. “El 29 de enero de 2021 se detectó el primer caso con esta variante en Chile, secuenciada por el Instituto de Salud Pública. Hasta el 25 de febrero de 2021 se han reportado 14 casos con esta variante, de los cuales 11 son de nacionalidad chilena”, señala el escrito.

El reporte detalla que 12 de ellos son viajeros procedentes de Brasil y Perú, y que los dos casos restantes corresponden a casos secundarios de uno de esos viajeros. También se consignó que siete de ellos presentaron síntomas, mientras que el resto eran asintomáticos.

Asimismo, el informe revela que para la variante P.2, también originada en Brasil -aunque menos contagiante y evasiva de anticuerpos que la P.1-, se han detectado 25 casos.

Ayer -y sin aludir a la detección de estos casos en el territorio nacional- las autoridades de Salud chilenas informaron que los viajeros que provengan de Brasil o hayan estado ahí en los 14 días previos a su ingreso a Chile, deberán obligatoriamente trasladarse a una residencia sanitaria.

“A partir del jueves, todos los viajeros provenientes de Brasil van a ser trasladados a una residencia sanitaria a hacerse un examen PCR y esperar ahí. Si sale positivo, esas personas deben hacer su aislamiento en la residencia, independientemente de la variante. Si sale negativa, terminan su cuarentena en el lugar de destino”, dijo la subsecretaria de Salud, Paula Daza, quien agregó que se trata de una “medida preventiva que estamos fortaleciendo en la medida que tenemos más conocimiento”.

Por eso, expuso Daza, los testeos para personas provenientes de Brasil han aumentado en los últimos días.

A la vez, el director del Instituto de Salud Pública, Heriberto García, explicó que se están recopilando los datos de las personas a las que se confirmó la variante P1 para hacerles seguimiento a sus casos y la evolución clínica que han tenido. “Estamos investigando para saber cuántos tuvieron síntomas, cuántos no, cuántos se hospitalizan o complican y poder tener una mirada completa sobre esto”, dijo la autoridad, quien agregó que “necesitamos información para poder sacar conclusiones, porque una cosa es que sea más contagiosa y otra es que cause más hospitalizaciones y todo esto está dentro de la investigación”.

García explicó que los casos se detectaron en las muestras que Salud recopila en el aeropuerto y envía al ISP para ser procesadas y secuenciadas. Asimismo, agregó que se está en proceso de aislar la variante y determinar la efectividad que tengan sobre esta las vacunas que se están utilizando en el país.

El académico en salud pública de la Usach, Claudio Castillo, sostuvo que “este informe de seguimiento epidemiológico de las variantes extranjeras se publicó sin hacer una comunicación masiva ni levantar los riesgos de viajar hacia y desde Brasil. Debió ocurrir hace semanas. Ahora llegan tardes las medidas y dada la potencial gravedad, parecen insuficientes”.

El experto de la Usach acota: “La situación de las distintas variantes que han sido identificadas y que tienen presencia en el país son de alta preocupación. Es de los casos en que la trazabilidad tiene que cumplirse a cabalidad. Más preocupante es el caso de la variante brasileña, que aunque haya 14 casos, hay una alta circulación de personas entre Chile y Brasil”.

Al respecto, desde el Minsal señalan a La Tercera: “Cuando comenzaron a aparecer nuevas variantes a nivel internacional, se intensificó la vigilancia y se redirigió la Búsqueda Activa de Casos para viajeros que provenían de países con alto riesgo de circulación de nuevas variantes de SARSCoV-2″.

Frente a la confirmación de casos positivos, Salud explica que gestiona la investigación epidemiológica y las acciones se articulan con el sistema de vigilancia genómica que realiza habitualmente el ISP, que permite evaluar las secuencias genéticas de las muestras pesquisadas en el aeropuerto y la de sus contactos estrechos para identificar o descartar nuevas variantes de coronavirus.

“Cabe señalar que las medidas anunciadas hoy para personas que provienen de Brasil se determinaron debido a que evidenciamos un aumento de viajeros que vienen de ese país y existe mayor evidencia científica disponible de las nuevas variantes, lo que induce a tomar estas nuevas medidas más restrictivas”, argumentan desde la cartera.

Los estudios preliminares de la cepa surgida en Brasil y que ya ha sido reportada en más de diez países, indican que esta podría ser hasta dos veces más transmisible que el virus original (entre 25 y 60%) y que puede llegar a evadir la inmunidad proporcionada por infecciones anteriores.

De todas formas, según publicó hoy la agencia de noticias Reuters, un estudio preliminar hecho en Manaos aseguraría que la vacuna Sinovac, misma que se utiliza en Chile, funciona contra la variante P.1. El estudio en cuestión señala que se testeó la sangre de personas ya vacunadas y que se enfrentaron a dicha cepa. Pero las informaciones, sobre esta afirmación, han sido contradictorias.

Con todo, otro estudio de un grupo de investigadores del Imperial College de Londres y de la Universidad de Leicester lanzó una advertencia: la vacunación sin confinamiento, como es el caso de Brasil, puede convertir a ese país en una fábrica de variantes que podrían escapar por completo a la eficacia de las vacunas.