La presentación de Reinaldo Rueda no se veía. A eso de las 10.10, el entrenador de la selección chilena inició su exposición ante el Consejo de Presidentes de la ANFP, pero con algunos problemas técnicos propios de las teleconferencias que no podía solucionar. “Perdón, la tecnología no es mi especialidad”, se disculpó el colombiano. Luego de recibir las instrucciones de Matías Rivadeneira, secretario ejecutivo de Quilín, por fin pudo mostrarles a los clubes lo que ha hecho y piensa hacer al mando de la Roja.
Vestido con camisa blanca y lentes, el seleccionador comenzó con el proyecto que le presentó a Arturo Salah, en 2018, cuando fichó por el bicampeón de América. “Hicimos convocatorias inicialmente de la liga nacional. Tuvimos reuniones con todos los cuerpos técnicos en Juan Pinto Durán o en las sedes de los clubes, presentando nuestro proyecto, e intentando sincronizar con la gerencia de competiciones los espacios para poder trabajar”, señaló al principio de su alocución, según la reconstrucción de uno de los presentes.
Se trataba de un hito. Que un seleccionador nacional explicara su trabajo ante el Consejo de la asociación era algo pocas veces visto. Nadie interrumpía a Rei. Los presidentes escuchaban en absoluto silencio. Era el invitado estelar de la primera cita oficial del gobierno de Pablo Milad, el nuevo presidente de la ANFP, quien venció a Lorenzo Antillo en las polémicas elecciones de la semana pasada.
Rueda resumió en números lo que ha sido, hasta ahora, su paso por Chile. “Hemos realizado 14 convocatorias para la selección adulta y 11 nóminas de la Sub 23, pensando en el futuro inmediato. En total, 90 convocados en la selección adulta, dándole oportunidad a jugadores jóvenes, buscando estimular a esos talentos. Y en la selección Sub 23 se convocaron 53 jugadores”, apuntó.
Ya consumidos los primeros minutos de su presentación, y sin nuevos problemas técnicos, el adiestrador se centró en uno de los objetivos de su macroproyecto. “Una de las tareas que me pidió don Arturo Salah era la integración de las selecciones menores con la adulta. De forma muy respetuosa, con Luis Ahumada hicimos ese acercamiento, invitando a las sub 15, 17 y 20 a entrenar un día con la adulta. Lo hicimos con el profesor Hernán Caputto, también con Cristian Leiva. Así hemos ido haciendo ese acercaminto, para que las selecciones menores tengan este estímulo y tengan de cerca a sus ídolos, para que se sientan importantes; y nosotros asesorar a esos cuerpos técnicos en la medida que se pueda. La receptividad ha sido muy buena”, sostuvo.
Agregó que con el combinado mayor ya suma 23 partidos: 17 fechas FIFA y seis de la Copa América de Brasil 2019. También que, según sus registros, en 2018, su primer año, nominó a 75 jugadores, concretó 54 sesiones de entrenamiento, durante 78 días, en 14 semanas. “En 2019, ya el filtro se hizo más estricto. Teníamos mejor conocimiento y vinieron 56 jugadores, en seis nóminas. En total, son 23 semanas de trabajo, 155 días acumulativos y 113 sesiones de entrenamiento, sin incluir las unidades teóricas”, especificó.
El DT también nombró a César Pinares y Benjamín Kuscevic como los jugadores seleccionables que menos han jugado este año, y a Jimmy Martínez como el que menos jugó el año pasado.
Tras finalizar el repaso numérico a su gestión, Rueda aprovechó la ocasión para entregarle un mensaje al Consejo. “Estamos todos bajo una misma bandera, una sola camiseta, y la construyen todos los clubes chilenos día a día. Tenemos la responsabilidad y la distinción de trabajar el posicionamiento a nivel mediático y competitivo del producto que ustedes trabajan todos los días del año. Solicitarles todo su apoyo, la clasificatoria sudamericana es muy pero muy difícil, por todo el potencial que hay y lo que hemos vivido. De nosotros depende lograr nuestra anhelada meta grande, que es estar en Qatar. La gratitud para el presidente de estar en este consejo tan importante. Les deseo éxito y esperar que podamos corresponder a esa confianza. Muchas gracias por su atención”, expresó.
La ronda de preguntas fue breve. Hubo apenas dos interesados. El primero fue Aníbal Mosa, de tempestuosa coyuntura en Colo Colo. El titular de Blanco y Negro le manifestó que contaba con el apoyo del Cacique. “El éxito suyo será el del fútbol chileno. Nos esperan momentos muy complicados para los clubes por la pandemia y la estrechez de fechas, pero nos colocamos a disposición del profesor. Espero que nos visite cuando podamos regresar a nuestros estadios”, invitó el puertomontino. “Muy amable, presidente, muchas gracias”, respondió Rueda.
El otro fue Juan Tagle. El mandamás de Cruzados le consultó al colombiano sobre la fecha de inicio y la sede de las Eliminatorias, asegurando que la idea de que se jugara fuera del continente ya estaba descartada. Sin embargo, antes de que Rueda respondiera, fue Milad el que tomó la palabra. “El inicio de la competencia internacional será a través de la Libertadores, con subvención para los chárter y una operación burbuja de no más de 72 horas de permanencia. Esto va a ser una coordinación entre todos los ministerios de salud de los países en juego. Hay una coordinación estrecha entre los equipos médicos de Conmebol y los ministerios correspondientes, donde se hará una evaluación de la Copa, lo que se va a proyectar a las Eliminatorias. Será una prueba de fuego, un ensayo que tendrá el sistema de burbuja de lo que serán las Eliminatorias, con planificación con los países y las autoridades, para que no entre ningún contagiado. Esto significa que las Eliminatorias se juegan sí o sí en Sudamérica”, aseguró categóricamente el timonel de la ANFP, según el relato de un asistente.
Nadie le preguntó sobre una nueva reducción de sueldo. Tampoco él mencionó el asunto. No hubo críticas a su gestión o diferencias de opinión, como algunos directivos esperaban en la previa. Todo se desarrolló en completa calma y diplomacia.
El técnico volvió a tomar la palabra y confirmó que quiere reunirse con sus jugadores en septiembre. “Respecto a la planificación de lo que será septiembre y octubre, tenemos proyectado reunirnos. Hay tres alternativas, la única viable por autonomía es Suiza. Quiero reunir a 16 jugadores de Europa, entre proyección y consolidados. Reunirnos en Sudamérica es difícil, por temas de salubridad. Podemos incluir a jóvenes de la MLS y de México. Austria y Alemania son las otras opciones que estamos analizando. Tenemos todo adelantado en cuanto a reservas de hoteles y canchas”, indicó.
Rueda insistió en el apoyo de los clubes, pese al estrecho calendario que se avecina. Advirtió que, en ese sentido, Chile está en desventaja con Uruguay y Colombia, sus primeros rivales en las Eliminatorias, ya que ambas selecciones “tienen a todos sus jugadores en Europa, incluidos cuerpos técnicos y médicos”.
A eso de las 10.40, y sin más preguntas que atender, Rueda se despidió del Consejo, no sin antes recibir la gratitud de Milad, quien destacó su presencia: “Le agradezco al profesor por su exposición ante los clubes. Hace 22 años que no había un técnico de la Selección en nuestro Consejo. Cuente con todo nuestro apoyo. Hay que pensar en grande para lograr los objetivos. Si pensamos de forma mediocre no vamos a llegar a ningún lado. Todos unidos podemos darle una alegría al país, especialmente a la gente que tanto ha sufrido. Muchas gracias, Reinaldo”.
Media hora de exposición que tuvo al técnico de la Roja como el centro de atención de los clubes. Un hecho pocas veces visto y que puede marcar un precedente para futuros seleccionadores, al igual que para futuras administraciones de la ANFP.