Mientras los rebeldes aseguran que Faruk al Sharaa desertó y huyó a Jordania, el régimen a través de un comunicado dijo que el funcionario "nunca ha pensado en abandonar su país".
La Tercera y Agencias
18 ago 2012 05:45 AM
Mientras los rebeldes aseguran que Faruk al Sharaa desertó y huyó a Jordania, el régimen a través de un comunicado dijo que el funcionario "nunca ha pensado en abandonar su país".
El último observador internacional dejará el país árabe el próximo 24 de agosto. La labor mediadora y humanitaria pasará ahora a manos de una oficina política, de unas 20 a 30 personas de Naciones Unidas.
Los movimientos de Bashar Assad ocurren tras las implicancias internas que gatilló la deserción del premier Riad Hijab a principios de mes.
Las sanciones complementarán las penas ya existentes, dirigidas contra los colaboradores más cercanos de Bashar Assad, entre ellos todo su gabinete, junto con individuos y entidades iraníes que proporcionaron respaldo al régimen sirio.
"La intensidad de los combates en Alepo y las deserciones en verdad muestran cuán imperativo es que nos unamos y trabajemos con miras a un buen plan de transición", dijo la secretaria de Estado estadounidense de visita en Pretoria.
Teherán asegura que no permitirá que el enemigo rompa el "eje de la resistencia" con Damasco. Presidente sirio reapeció públicamente, junto a un alto representante iraní, luego de dos semanas.
Junto al alejamiento, que supone el mayor golpe político contra el gobierno, del premier Riad Hijab, se suman generales de Ejército, diplomáticos y diputados.
Un vocero del departamento de Estado, dijo que es "despreciable", la arenga de Bashar Assad a sus tropas para continuar luchando contra los opositores. A su vez, Obama y Hollande hablaron telefónicamente por situación de país árabe.
"Nuestro enemigo asume diversas caras, pero sus objetivos son claros", dijo el presidente sirio en ocasión del 67 aniversario del Ejército.
El Ejército sirio acumulaba hoy enormes recursos logísticos para una batalla crucial en los alrededores de la segunda ciudad más importante del país.
Por primera vez, los países árabes pidieron de forma explícita la renuncia del presidente sirio, Bashar Assad, "a cambio de garantizarle una salida segura" del país junto a su familia.
Se trata de grupos sunitas que pretenden sacar del poder a los alauitas, vertiente del islam a la que pertenece el presidente sirio, a los que consideran apóstatas. Algunos rebeldes locales miran con recelo esta irrupción.
"Cuanto más tiempo permanezca Assad en el poder, más mortal será la situación en Siria", subrayó el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney.
El principal centro industrial del país registra por cuarto día combates intensos. Los rebledes hablan de uso de armas pesadas, como artillería y helicópteros militares por parte del régimen, lo que costado la vida a 70 personas a lo largo del país árabe.