Según medios argentinos, el músico fue internado tras presentar síntomas de fiebre y dolor corporal.
30 may 2020 02:06 PM
Según medios argentinos, el músico fue internado tras presentar síntomas de fiebre y dolor corporal.
Culto estuvo en Nueva York con Joe Blaney, histórico del cancionero anglo, aliado de The Clash y The Ramones, y el hombre tras el álbum Fome, el mismo que Los Tres revivirán este 1 de marzo en el Teatro Municipal.
Culto estuvo en Nueva York con Joe Blaney, histórico del cancionero anglo, aliado de The Clash y The Ramones, y el hombre tras el álbum Fome, el mismo que Los Tres revivirán este 1 de marzo en el Teatro Municipal.
Dos días antes del show que el argentino dio en 2019 en Chile, el cantante de la disuelta banda local Primavera de Praga, Leo Saavedra, llegó casi por casualidad al hotel donde se hospedaba y terminó tocando frente a él temas de Supertramp y The Beach Boys. Esta es la historia.
Qué importa si se trata de recién iniciados o diestros conocedores: Culto presenta un pantallazo general —por qué no una invitación— del que acaso es el legado más argentino de todos: su rock.
Compuesto en una expedición a Nueva York un año después de concluida la guerra de las Malvinas, Charly grabó en los estudios de Jimi Hendrix el primero de sus discos junto al productor Joe Blaney, acompañado de Pedro Aznar, una Roland TR-808 y el cotizado guitarrista Larry Carlton. ¿La fórmula del músico? "Minimalismo, polirritmia, neoclasicismo, discreción y donde se pueda una pátina de ambigüedad".
Mariano del Mazo acaba de publicar Entre lujurias y represión: un libro que panea la historia de la banda. "Cuatro discos hermosos, cáusticos, maravillosos, y en plena dictadura —dice—. Escucharlos es ir hacia el núcleo del mejor rock argentino".
El periodista y escritor Sergio Marchi parece ser el metro con el que se mide a los grandes nombres del rock argentino. Autor de la biografía definitiva de Charly García —No digas nada (1997)—, la de Pappo —El hombre suburbano (2011)— e incluso de dos tomos con la historia de los británicos The Beatles —Desde el comienzo (2017) y En el final (2019)— y otro sobre Roger Waters —Paredes y puentes (2012)—, ahora acaba de lanzar Spinetta: ruido de magia (Planeta, 2019) donde escarba —a modo de biografía oficial y en más de cuarenta capítulos y casi 700 páginas— en la vida y obra del Flaco.
Mientras la flota imperial británica viajaba hacia Malvinas con una declaración de guerra, en 1982 Charly García fantaseaba con la idea de registrar un disco de canciones en solitario. Los últimos estertores de la dictadura argentina no podían escapar a la observación del hombre con rayos x en los ojos.
El productor Joe Blaney tenía experiencia con Charly y su naturaleza excesiva. Había trabajado con The Clash, Prince y Keith Richards. Pero nunca se imaginó que, de la mano de Andrés Calamaro, tras el éxito de Alta suciedad y Los Rodríguez, embarcarse en Honestidad brutal sería una experiencia salvaje. "Teníamos como 30 canciones, comenzamos a hacer overdubs y agregarles cosas, y después me dice que quiere hacer el disco con 100. Le dije que era la idea más desquiciada que había escuchado en todo el mundo", cuenta al teléfono para Culto.
Luis Alberto Spinetta, mito del rock argentino, será el encargado de abrir la segunda temporada de Bios. Vidas que marcaron la tuya, de NatGeo. Hoy, a través de material inédito y las voces de su familia y de sus compañeros de viaje, la señal exhibirá un documental que pretende explicar qué es lo que hacía tan especial al Flaco. Acá Catarina Spinetta, presentadora del espacio, cuenta a Culto cómo fue abrir el archivo familiar y revisitar la figura de su padre.
Buenos Aires, ciudad frenética, cuna de grandes estrellas del rock latinoamericano. Sus exponentes han sabido leer sus calles y recovecos. La ciudad de noches que no se apagan, hábitat de generaciones combativas, de madres con brazos vacíos. Cerati la llamó Ciudad de la furia, pero Charly la absorbió: se convirtió en el eje entre el caos, la soledad y la ternura de una zona geográfica que le pertenece. Formuló un método para explicarlo, lo logró gracias a su oído absoluto. Quiso desafiar todos los límites: venció. Aprendió a ser revolucionario, controvertido, se convirtió en dinosaurio, en superhéroe, en superstar.
El debut de Serú Girán, el supergrupo que encabezaban Charly García y David Lebón, estuvo lejos de ser el esperado. Resistidos por un público que parecía no entender su propuesta y por la prensa de la época, que criticó duramente a cada uno de los integrantes, su revancha llegó de la mano de su segundo álbum: en 1979 La grasa de las capitales, desde su portada que parodiaba a las "revistas enemigas", comenzó a hacer justicia.
Una guía de programación sobre series documentales, investigaciones y adaptaciones escritas a partir de libros sobre bandas y solistas, algunos de ellos verdaderas leyendas de la música popular. Las mejores películas de músicos en una selección de Culto.
El actor y baladista argentino repasa su vínculo con Charly y la interna de su rehabilitación en Luján, donde tuvo al rockero en su casa mientras se recuperaba de sus adicciones. Ahora ambos se consideran hermanos.