El largo período de aprendizaje a distancia ha frustrado a los padres en un reino donde no se tolera la disidencia.
Donna Abdulaziz y Summer Said/The Wall Street Journal
24 ene 2022 08:41 PM
El largo período de aprendizaje a distancia ha frustrado a los padres en un reino donde no se tolera la disidencia.
En pleno período de postulaciones y matrículas, las casas de estudios han confirmado la presencialidad para el próximo semestre. El protocolo no estipula límite de aforo, pues el 97% de los alumnos está vacunado, y el resto deberá testearse para ingresar a clases o participar de actividades específicas. Desde las ues, eso sí, admiten que ómicron ensombrece los pronósticos y que su evolución será clave para no echar mano, nuevamente, a las actividades telemáticas.
Si bien el actual gobierno ya emitió el oficio que pone fin a la voluntariedad presencial para alumnos y establecimientos, lo cierto es que su mandato se acaba el 11 de marzo y serán otros los encargados de liderar el año escolar y el hasta aquí retorno obligatorio. ¿Qué piensan al respecto los principales aspirantes a La Moneda?
Junto con el oficio que pone fin a la voluntariedad de las clases presenciales a contar de marzo de 2022, Educación también elaboró un plan para mitigar el impacto de estos dos años en que los contenidos se impartieron de manera irregular. Para ello, los estudiantes serán evaluados tres veces el próximo año y se requerirá a los colegios que en los primeros 15 días realicen un diagnóstico del avance de los niños, a objeto de readecuar los planes a las áreas más débiles.
Resolución del Mineduc pone término a la educación telemática y a las alternativas no presenciales que se dieron en los últimos dos años. El retorno, fundado en el estado de la pandemia y la cobertura de vacunación, será en jornada completa, sin restricción de aforo, a la vez que se normalizará la entrega de alimentación Junaeb. Los colegios, eso sí, deberán adoptar planes de evaluación y nivelación de los alumnos, para revertir los efectos de la educación remota. "Toda la evidencia pedagógica y sanitaria apunta a que no existe razón para impedir la apertura de establecimientos”, dice Raúl Figueroa, titular de la cartera.
Pese a que el gremio había condicionado el retorno a las aulas a que se alcanzara la Fase 4, el docente plantea que el regreso presencial solo puede darse una vez que se solucionen los problemas de infraestructura que tienen los colegios, se establezcan claramente los protocolos y se llegue a acuerdo con las comunidades educativas.
Ya iniciado el segundo semestre, las municipalidades han aumentado las clases en aula y hoy el 47% de los recintos recibe a sus alumnos, muy por sobre el 15% de marzo. Se mantiene, eso sí, una importante brecha con los privados, pues el 94% de ellos ya normalizó esta modalidad.
Tras el oficio de la entidad a todas las instituciones de educación superior y justo en momentos en que la Subsecretaría de Redes Asistenciales ofició a los directores de servicios de salud y hospitales para reiterarles la necesidad de retomar las actividades docentes presenciales, se detectó que las universidades son las que más actividades han postergado producto de la pandemia. Las organizaciones -además- han reportado que el 76,3% de sus estudiantes tuvo menos de un 20% de asistencia a actividades presenciales en el primer semestre de 2021 y el 94,7% de los establecimientos informó que para la segunda mitad de este año tendrá mecanismos que permitan la realización de actividades presenciales.
De los recintos que se encuentran operando, 6.105 corresponden a establecimientos de educación escolar y 4.292 a de enseñanza parvularia.
El último viernes, la división jurídica del Ministerio de Educación envió a la Corte de Apelaciones de Valparaíso un informe solicitado en el marco del recurso de protección que presentó el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, y un grupo de apoderados para evitar el retorno a clases presenciales. En el escrito frente a esta acción -que se suma a la acusación constitucional contra Raúl Figueroa que se vota el jueves-, se detalla la experiencia de los colegios en distintos países, la baja cifras de contagios vinculada a la apertura y la responsabilidad que le compete a la cartera en la custodia del bienestar de los menores, entre otras materias.
Los estudiantes de primer y segundo año prácticamente no saben lo que significa estar en un campus. Algunos, incluso, todavía no conocen a sus compañeros más allá de la pantalla. Tras un año y medio de pandemia, muchos universitarios apuestan por la presencialidad.
Tras meses sin clases presenciales y empujados por consultas comunales, el próximo lunes los municipios que comandan Tomás Vodanovic (RD), Gonzalo Durán (ind.) y José Manuel Palacios (UDI) abren las puertas de algunas de sus aulas. Desde Santiago, en tanto, dicen que aún "no corresponde decretar ni comprometer fechas" para la apertura, debido a las adaptaciones que deben hacer en sus 44 establecimientos.
Ante el avance de la vacunación, la caída de los contagios y el estado de las comunas en el nuevo Paso a Paso, los alcaldes que hasta hace poco declaraban inviable abrir los colegios han iniciado consultas públicas con la comunidad y diálogos con el profesorado para abrir los colegios desde el próximo mes.
De un total de 15.396 establecimientos educacionales que hay en Chile, 6.438 recibieron estudiantes en el arranque de la segunda mitad del año. Hay, eso sí, 2.231 que siguen de vacaciones hasta el próximo lunes, y el Mineduc proyecta que de aquí a dos semanas se superen las 10.000 instituciones con sus aulas dispuestas a la presencialidad.