El militar enfrentaba un expediente disciplinario.
18 jul 2023 04:07 PM
El militar enfrentaba un expediente disciplinario.
La persona ahora está bajo custodia norcoreana y el Comando de Naciones Unidas que supervisa la zona indicó que están trabajando con sus homólogos de la nación del norte para resolver el incidente. Por el momento no se han ofrecido más detalles acerca de quién es la persona o los motivos por los que cruzó.
El representante norcoreano ante Naciones Unidas dijo que el disparo de proyectil balístico intercontinental el pasado miércoles fue un ejercicio de su derecho a la autodefensa, "para disuadir movimientos militares peligrosos de fuerzas hostiles y salvaguardar la seguridad de nuestro Estado”.
En su ciudad natal, a una norcoreana la asustaron con que los surcoreanos la recibirían, pero luego la torturarían y matarían. Esto no pudo estar más alejado de la realidad, pues se encontró con un centro que la ayudó a rehabilitarse y empezar una nueva vida lejos de la pobreza.
Las declaraciones del caudillo norcoreano insinuaron que su país podría acelerar sus pruebas de armas para ampliar sus arsenales, en respuesta a las recientes acciones estadounidenses para reforzar su compromiso de seguridad con su aliado Corea del Sur.
La misión de Reino Unido en Naciones Unidas informó de la convocatoria, al tiempo que ha denunciado que se trata del “cuarto ensayo de misil balístico intercontinental de la República Popular Democrática de Corea en lo que va de año”.
Los norcoreanos señalaron que el proyectil, cuyo lanzamiento fue repudiado por EE.UU., Corea del Sur y Japón, voló 1.001 km a una altitud de 6.648 km. El misil cayó en el mar, al este de la península coreana y a unos 250 km al oeste de la isla de Okushiri, al norte del territorio japonés.
El Estado Mayor Conjunto surcoreano informó del lanzamiento, sin que por el momento haya proporcionado detalles sobre el mismo. El incidente se produce luego que las autoridades norcoreanas denunciaron la presencia de avión de reconocimiento militar de Estados Unidos en la zona de aguas económicas y la decisión de Washington de desplegar submarinos nucleares estadounidenses en la península.
Kim Yo Jong, una de las principales funcionarias del líder de Corea del Norte en política exterior, alegó que ela aeronave estadounidense realizó ocho incursiones el lunes a la zona económica exclusiva en el este del país comunista. Washington y Seúl rechazaron las acusaciones e hicieron un llamado a abstenerse de cualquier acción o retórica que intensifique la animosidad en la región.
Analistas internacionales norcoreanos comentaron que la inusual visita del secretario de Estado estadounidense, Anthony Blinken, tenía como objetivo suplicar por la relajación de las tensiones, ya que el “intento de presionar y contener a China puede convertirse en un boomerang que llevaría a un impacto fatal a la economía de Estados Unidos”.
Kim Yo Jong, la poderosa hermana del gobernante norcoreano Kim Jong Un, dijo que esfuerzos de su país para tener capacidad de vigilancia desde el espacio era un ejercicio legítimo de su derecho soberano y reiteró el rechazo a las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU que prohíben a Pyongyang efectuar lanzamientos relacionados con tecnología de misiles balísticos.
Las autoridades norcoreanas señalaron en un comunicado, publicado en la prensa estatal, que el cohete que portaba al satélite de reconocimiento militar se estrelló en aguas frente a la costa occidental de la península de Corea, luego de perder potencia tras la separación de la primera y segunda etapas.
Además, las sirenas se activaron en Seúl a las 06.32 hora local y las autoridades de la capital advirtieron a sus ciudadanos que estuvieran preparados para una potencial evacuación.
Las autoridades de ambos países han indicado que este lanzamiento es “una grave violación” de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que prohíben los lanzamientos que utilicen tecnología de misiles balísticos
Las autoridades norcoreanas al justificar la decisión señalaron que ante los ejercicios militares conjuntos de Estados Unidos y Corea del Sur, que muestran abiertamente su “imprudente ambición de agresión”, Pyongyang requería de los “medios capaces de recopilar información sobre las acciones militares del enemigo en tiempo real”.