El general Javier Iturriaga reconoció que la información inicial que fue difundida por el Ejército “adoleció de falta de precisión y ello llevó a las diferentes contradicciones". Por lo mismo, informó que decidió remover y proponer el retiro del comandante en jefe de la VI División de Ejército y del comandante de la Brigada Motorizada n.º 24 “Huamachuco”.
“Hubo falta de diligencia y omisiones para pesquisar adecuadamente y en un tiempo prudente, falsedades y tergiversaciones que conducen a la responsabilidad de mando de las máximas autoridades de la zona”, afirmó el mandamás de la institución castrense.
Mientras la Corte Suprema designó a Jenny Book como ministra en visita para investigar lo ocurrido, en el gobierno ha crecido la disconformidad respecto a las gestiones del comandante en jefe del Ejército. Por ahora se descarta su remoción, pero se le pidió mayor presencia. De hecho, el Presidente Boric citó tanto a la ministra Fernández como al general a La Moneda.
Desde su gira a la Región de O'Higgins, el Mandatario anunció que este viernes se reunirá en Palacio con Javier Iturriaga y con la ministra de Defensa, Maya Fernández. Y adelantó que el lunes recibirá a la madre del joven soldado que perdió la vida en una instrucción.
La titular de Interior aseguró que el foco no está en ese tema, sino que en "esclarecer lo que pasó, en buscar responsabilidades y en cuidar la salud de los conscriptos que están delicados”.
La titular de Defensa tomó contacto con el comandante en jefe del Ejército la tarde del lunes y ahí le planteó que era necesario que emitiera declaraciones públicas.
La citación se extendió para que ambas autoridades aborden la situación que quedó al descubierto, donde estarían involucrados cuatro miembros del Ejército.
Antes de iniciarse la Parada Militar, el comandante en jefe de la institución castrense entregó una reflexión respecto de la fecha. Allí advirtió que si bien ya se había entregado información a los tribunales y no había nada en el tintero, se comprometió a seguir aportando, en la medida que se le requiera. En el Ejecutivo tomaron estas declaraciones como un "guiño" y en el mando buscan "sacar la política de los cuarteles".
El general Javier Iturriaga llegó hasta la ceremonia en que se despidió a Héctor Chacón, condenado por el crimen de Víctor Jara. El alto oficial, antes de ir, avisó de su concurrencia gobierno.
Dadas las nuevas tareas que ha asumido el Ejército en la cobertura de los estados de excepción y de protección a la infraestructura crítica, la institución busca subir en un 60% las matrículas a su escuela de suboficiales.
El comandante en jefe del Ejército declaró ante la persecutora que indaga eventuales delitos de lesa humanidad y responsabilidad de mando. El alto oficial fue jefe de la Defensa Nacional en esa época, por lo que su interrogatorio se centró en las facultades que tenía en ese entonces, aunque también fue consultado sobre si fue "reconvenido" por "desmentir" al Presidente Piñera en su declaración de estar en "guerra", a lo que contestó que "no", pero "hubo una conversación del porqué había respondido de esa manera".
La ministra adelantó que se ha acordado una "agenda de temas" con senadores y diputados de Renovación Nacional. Además, respondió a los dichos del comandante en jefe del Ejército, quien indicó que las labores que se le asignan al Ejército "desvirtúan" sus labores propias
El comandante en jefe del Ejército cumplió seis meses a cargo de la institución, donde ha recorrido gran parte de las unidades militares del país y ha tomado decisiones sobre la dotación militar. Ha preferido tener un bajo perfil y un estilo únicamente operativo.
En vez, el general decidió fijar su residencia al interior de un condominio de propiedad de la institución castrense, en la comuna de Las Condes. El "gesto" marca la primera diferencia con sus antecesores, pues la amplia casa ubicada en el sector de Lo Curro, en Vitacura, había sido utilizada desde el mandato de Juan Emilio Cheyre (2002) en adelante, incluso hasta hoy, donde aún permanece el retirado oficial Ricardo Martínez y su familia, a la espera de ser interrogado por la jueza Romy Rutherford.
El próximo comandante en jefe es “irónico”, de “humor negro” y, a diferencia de otros altos mandos, no quiere tener un batallón de asesores. Su desafío será afrontar el caso por fraude en el Ejército y buscar la legitimidad de la institución castrense ante la sociedad.
