Les prometí a mis mujeres que nunca más viajaríamos un 4 de julio: fue toda culpa mía, por no imaginar el caos del desfile y sus odiosas consecuencias entre quienes, desde siempre, históricamente, hemos deplorado los desfiles, todos los desfiles, sean estos patrióticos, religiosos, políticos, militares, deportivos, sexuales, carnavalescos o de cualquier índole.
6 jul 2024 08:46 PM