Tras su gran -y sorpresivo- triunfo en la elección de consejeros el 7/M, el líder de republicanos se enfrentó a la paradoja de empujar un nuevo proceso constitucional, del cual nunca estuvo de acuerdo, poniendo a prueba su liderazgo al interior de su partido y el presidencial.
Desde el movimiento indicaron que buscan “agrupar a los ciudadanos que no se sienten representados por los liderazgos de la centroderecha tradicional, de Chile Vamos y Republicanos”.
En Chile Vamos no hubo un solo diagnóstico respecto a la salida del parlamentario. Algunos en el sector miran con inquietud el tema y creen que perjudica las opciones del "A favor", otros desestiman que "mueva la aguja".
"No estoy pensando en una candidatura presidencial", subrayó el senador por la Región Metropolitana.
Edwards se había distanciado de su colectividad en el proceso constitucional tras anunciar su voto "En contra", pero corría riesgo de perder su escaño en el Congreso si dejaba el Partido Republicano tras un eventual triunfo del "A favor".
Además, el senador afirmó que su sector “comete un grave error al definir como derrota el triunfo del en contra” ya que, tanto el logro del a favor como el contra “son victorias de nuestro sector”.
El senador republicano, que ha sido criticado por no alinearse por el "A favor", asistirá a un hito de un partido que busca captar electorado de la colectividad de José Antonio Kast.
El jefe de bancada del Partido Republicano respondió a los dichos del senador Edwards, quien defendió su posición de rechazo a la propuesta constitucional -al contrario de la mayoría de los militantes de esta tienda- y aseguró que “el gran problema del triunfo del ‘A favor’ es que implica probablemente hasta una década de incertidumbre asegurada”.
A contrapelo del Partido Republicano, que está mayoritariamente por el "A favor", el parlamentario defiende su posición de rechazar el texto elaborado por el Consejo. El legislador afirma que está dispuesto a asumir los costos políticos y que "existe una mayoría de republicanos que está "En contra" de la nueva propuesta de Carta Magna.
El ministro de Justicia, Luis Cordero, comentó que “las Fuerzas Armadas han manifestado su disposición a entregar información en el contexto de las investigaciones judiciales", mientras que el senador Coloma (UDI) afirmó que “es el momento de aprender las grandes lecciones de la historia".
La iniciativa propone cambiar los nombres de nueve calles de Santiago, con motivo de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado. De esta manera, si la medida se aprobara, un tramo de la calle general Bulnes pasaría a llamarse Jécar Antonio Nehgme Cristi, ejecutado político en 1989.
“Si tú tienes las mayorías parlamentarias, ¿cuál sería la noticia de eso?, enfatizó el senador, respaldando los dichos del presidente de Republicanos, Arturo Squella, quien afirmó que de tener mayoría en el Congreso, buscarían eliminar la actual ley.
El parlamentario sugirió que tal realidad, es añadir la propiedad de los recursos previsionales, elección del sistema de salud o "mayores provisiones en seguridad", aspectos que a su juicio "el acuerdo de los expertos deja afuera materias que nos parecen que han sido ampliamente refrendadas a nivel público”.
La presidenta de Evópoli, Gloria Hutt, en tanto, cuestionó "oportunidad" de las declaraciones del futuro jefe de bancada del Partido Republicano en el órgano redactor.
"El texto propuesto representa una realidad política que ya no existe", señala la declaración de la facción que representa la disidencia a la actual directiva encabezada por el exdiputado Arturo Squella.
