Luis Toledo Cruces fue raptado el martes 29 de noviembre en el cantón de Daule, en Ecuador. El cabo primero de la Armada fue sometido a torturas, mientras sus captores enviaban imágenes y mensajes extorsivos a su familia en Chile y a su esposa en ese país, quien denunció el hecho. Tras casi cinco días de terror y cautiverio, el marino logró ser rescatado: sus captores le mutilaron dos dedos de su mano izquierda.
La secretaria de Estado confirmó que hay sujetos detenidos por el hecho y que estarán atentos al desarrollo de la investigación.
Mensajes extorsivos y videos con torturas son parte de los mensajes que la familia del cabo primero de la Armada, Luis Toledo, ha recibido de sus secuestradores en Ecuador. Yesennia Cruces, su madre, detalla los complejos días que han vivido desde que fueron informados de su secuestro y lo inalcanzable que resulta para la familia reunir los casi $ 90 millones que piden a cambio por su vida.
De acuerdo a familiares de Luis Toledo Cruces, cerca de la medianoche del martes fueron contactados por los presuntos secuestradores. La Armada informó que tomó conocimiento de la desaparición, mientras que la BIPE de la PDI recaba antecedentes e iniciaron coordinaciones con la Interpol.
La niña de 13 años salió con la excusa de comprar dulces el sábado 5 de noviembre, cuando se reunió con un hombre adulto, quien fue detenido por el delito de sustracción de menor.
Se trata de dos mujeres y un hombre, todos de nacionalidad venezolana y en situación migratoria irregular, quienes habrían retenido por casi 24 horas a otro ciudadano venezolano. Junto con la detención de los presuntos culpables, la policía civil logró la liberación de la víctima.
Los sujetos habrían mantenido a las víctimas en cautiverio por al rededor de 12 horas y posteriormente los trasladaron a un centro comercial, donde realizaron giros de dinero y compras con sus tarjetas.
Si antes la mayoría de los secuestros era de tipo "narco extorsivos" y realizados por bandas chilenas, actualmente la mayor cantidad de hechos en la región se debe a otros motivos y con una alta participación de inmigrantes.
El ingeniero estadounidense Mark Frerichs fue secuestrado a finales de enero de 2020 cuando trabajaba como contratista de construcción en Afganistán.
Tres desconocidos abordaron a una mujer y su hija durante la madrugada, en la Plaza de Armas. Las intimidaron con armas de fuego y las subieron a un vehículo. En Independencia, los desconocidos abandonaron a la mujer y se llevaron a la niña. GPS de teléfono celular permitió dar con el paradero de la niña.
El hecho se produjo en mayo en el sector de Pompeya Sur. Durante la audiencia se establecieron 70 días para la investigación.
Los acusados deberán cumplir penas que van entre los 15 y 17 años por el delito de secuestro calificado contra la víctima a la cual conocían por compartir en una casa okupa.
Tras el hecho, Carabineros confirmó que a la víctima la ingresaron a una caseta de un estacionamiento, donde le provocaron distintos golpes en su cuerpo. Por otra parte, los aprehendidos son tres ciudadanos chilenos con amplio prontuario policial por Ley de Drogas y un hombre de nacionalidad colombiana, quien se encuentra en situación irregular.
Tras obtener orden de entrada y registro para ingresar a 27 domicilios, efectivos de la PDI en coordinación con la Fiscalía Metropolitana Sur detuvieron a un total de 18 imputados.
Los individuos raptaron a la víctima desde su domicilio, donde irrumpieron portando armas. Los tres chilenos, mayores de edad y sin antecedentes penales, pasarán a control de detención este jueves por el delito de secuestro, amenazas y porte ilegal de arma de fuego.
