Es parte del virtuoso ciclo de la economía circular y se puede comenzar en casa. Un ejemplo fácil: botellas plásticas convertidas en ecoladrillos, solo hay que lavarlas y rellenarlas con desechos plásticos limpios como cintas de regalo, lápices, envoltorios, tapas, etc. Si no tenemos dónde ocupar estos ecoladrillos, se pueden donar o pedir que los retiren, como lo hace Ecoladrillos Región Metropolitana, que recibe solicitudes en su Facebook.
Hoy Chile genera cerca del 20% de su energía desde energías renovables no convencionales, que según el Climatescope 2018, lo convierten en el líder mundial en el uso de este tipo de energía.
Cuando compramos según las cantidades que necesitamos, los productos se llevan en bolsas de papel o género, también en envases propios. Si los almacenamos en frascos de vidrio, además de estar usando un artículo reutilizable que permite ver lo que va quedando y protege de insectos, se preservan mejor el color, sabor, la textura y aroma de lo que guardamos.
Totalmente vigentes: cursos de caligrafía, dibujar letras, letreros de textos a mano alzada… La escritura manual cautiva por muchas razones.
Es todo un símbolo local, hay en la Plaza de Armas de Santiago y su imagen está en el billete de cinco mil pesos y en la libreta de Acuerdo de Unión Civil. Sin embargo, no la cuidamos bien: desde 2004 Conaf la ubica en categoría de conservación vulnerable, consecuencia de la tala para obtener su savia, aquella que permite hacer miel.
Hay buenas razones para elegir este sistema. Apoyan a emprendedores locales, facilitan la compra de vegetales para que no falten en la mesa y varias de estas iniciativas suman otros productos de granja.
Conocer antiguas técnicas y nobles oficios no es mero romanticismo, es proteger el patrimonio y, en este caso, revelar todo un mundo de nuevas posibilidades para disfrutar la fotografía.
Los jardines dejaron de ser espacio exclusivo para el pasto y algunas flores. Es que hoy las plantas no solo tienen una función decorativa, sino también se las destaca y usa como aislantes acústicos y como fuente alimentaria. De ahí la oferta de talleres especializados, como los que ahora incluimos.
Deporte es salud, dice el refrán, y hay formas de practicar esta filosofía beneficiando al planeta. Por ejemplo, el plogging. ¿Qué significa? Es trotar y recoger los desperdicios que se encuentran en el camino. Se practica solo o en grupo y únicamente se requieren un par de guantes y una bolsa de basura.
Escapar de la rutina, descansar, disfrutar y conocer, pero también valorar en cada destino el patrimonio social, cultural, histórico o natural que lo completa, respetándolo, comprendiéndolo y conservándolo para futuras generaciones.
