Tras el fallido intento de arresto, la seguridad presidencial ha reforzado la residencia oficial instalando alambres de púas y utilizando autobuses para bloquear el acceso al edificio.
10 ene 2025 06:43 AM
Tras el fallido intento de arresto, la seguridad presidencial ha reforzado la residencia oficial instalando alambres de púas y utilizando autobuses para bloquear el acceso al edificio.
El exmandatario surcoreano cuenta con una orden de arresto para interrogarlo por haber decretado la ley marcial en el mes de diciembre.
De acuerdo a la información dada a conocer, unos 200 agentes de seguridad estaban creando un muro, haciendo imposible la entrada.
El gobernante surcoreano está siendo protegido en su residencia en Seúl por personal de seguridad presidencial, tropas militares y partidarios, los que impiden la acción de la policía para lograr la captura, tras ser imputado por insurrección por su intento de aplicar ley marcial el pasado 3 de diciembre.
La decisión judicial se tomó luego que el mandatario surcoreano ignorara tres citaciones para ser interrogado sobre su declaración de ley marcial, el pasado 3 de diciembre. El gobernante depuesto enfrenta cargos penales por insurrección que podrían acarrearle una sentencia de cadena perpetua o incluso la pena de muerte.
Un tribunal de Seúl decidirá si emite una orden de detención tras la solicitud.
Manifestantes han pedido la intervención del Tribunal Constitucional, para que actúe contra Yoon, y pidiendo la disolución de su partido político, el Partido del Poder Popular (PPP)
El entramado político que dejó la salida de Yoon Suk-yeol del poder, tras un fallido intento por imponer una ley marcial, sigue cobrando víctimas. Esta vez, la oposición logró destituir al mandatario interino, Han Duck-soo, dando paso a un tercer presidente en un mes: el ministro de Economía, Choi Sang-mok.
El primer ministro Han ha tomado el relevo tras la suspensión de Yoon Suk-yeol el 14 de diciembre.
Los manifestantes en contra de Yoon son en su mayoría jóvenes de entre 20 y 30 años que lo critican por declarar Ley marcial, mientras que quienes protestan a favor del presidente corresponden a adultos mayores y conservadores que se oponen a su destitución.
Yoon Suk Yeol ha pedido perdón por lo ocurrido, pero sigue defendiendo su decisión,
La policía sospecha que el general Moon Sang Ho sabía de antemano sobre el plan de declarar la ley marcial o había sido parte de la preparación para su imposición.
La medida fue aceptada con 204 votos favorables. Con ello, el mandatario quedó inhabilitado hasta que el Tribunal Constitucional valide la decisión del poder legislativo.
La intempestiva declaración del Presidente Yoon Suk-yeol tomó a todos por sorpresa. La fallida implantación de la ley marcial, y su relación con los estamentos de defensa del país, prendieron las alarmas más allá de la nación asiática.