¿Cuál es su pronóstico para el 4 de septiembre?
54-46, gana el Rechazo.
¿Repetiría la experiencia?
No me arrepiento para nada de haber estado ahí.
¿Cuál es el artículo que más valora?
El de la vivienda. De todas manera, pero faltó que fuera propia.
¿Quién lo decepcionó?
Muchos, pero no diré los nombres.
¿Cuál era el convencional más aburrido en los plenos?
Varios, sobre todo los que se quedan dormidos. Y es que las sesiones duraban hasta tarde.
¿Quién, de un sector político distinto al suyo, le sorprendió para bien?
Dos: Fuad Chain y Felipe Harboe.
¿A quién no le gustaría ver más?
Había un ratón en el ex Congreso que se paseaba de vez en cuando. A ese no me gustaría verlo más. Un guarén incluso, era grande.
¿Cuál era la mejor picada gastronómica del sector?
Hay un boliche muy bueno en el Pasaje Edwards. El Dueto, buenas ensaladas.
¿Cuál fue el momento más freak?
La ducha superó todo.
Defina en un concepto a La lista del Pueblo.
Experimento fallido.
¿Qué artículo eliminaría sí o sí?
No me gustó para nada que el aborto esté consagrado en la Constitución.
El sistema político y el sistema de justicia, ¿son los grandes temas que debieron haberse hecho distintos?
De todas maneras, el sistema político tiene muchas falencias. Por de pronto, las facultades del Presidente y del Congreso. Si esto no funciona bien, el resto es humo. Y en el sistema Justicia, los sistemas Justicia Paralelo y el Consejo de Justicia para nombrar a los jueces pone en riesgo y politiza nuestra democracia.
¿Fue una convención partisana?
No solamente partisana, sino que también revanchista e identitaria.
¿En qué aportó la derecha al proceso?
Desde el día uno quisimos aportar. Lo que pasa es que no nos escucharon mucho.
¿Hubiera preferido que la Convención Constitucional funcionara más tiempo o un año fue suficiente?
Más que suficiente, por favor. El resto habría sido un karma.
¿Qué le pareció el acuerdo al que llegaron los partidos del oficialismo para hacer cambios a la nueva Constitución propuesta?
¿Acuerdo? No, no hay mucho acuerdo. Solamente fue por conveniencia y no les duró mucho. El Partido Comunista se bajó rapidito. Sentido de realismo.
¿Algún día tuvo ganas de no ir a la convención?
Siempre a uno le dan ganas de ir. Pero había veces que uno le busca la 5.ª pata al gato, como cuando jugaba la católica. Yo soy muy futbolero y me gusta ir a ver a la Católica, pero íbamos igual.
¿Quedó conforme con su desempeño?
Sí, pusimos todo el power, toda la energía, la posibilidad de dialogar y llegar a acuerdos. Podría haber sido mejor, sí, pero creo que lo dimos todo en la cancha.
¿Quién estima que aportó menos y más al debate?
Yo creo que, menos, los que se atrincheraron, los que no quisieron cruzar la frontera, los que no quisieron dialogar. Y los que más, el sentido contrario, los que estuvieron dispuestos, los que quisieron dialogar y llegar a acuerdo. Lamentablemente primó lo primero.
Diga un secreto sobre la convención.
Lo dije anteriormente. El guaren. Se paseaba habitualmente, pero más que dentro, en los jardines. Era una visita ilustre.
Si gana el Rechazo: ¿otra convención, reformas constitucionales o comisión de expertos?
De todas maneras una nueva Constitución. Ahora, todas las fórmulas son válidas. Pero tenemos que llegar a tener una nueva Constitución y pronto, no demorarse mucho.
Si partiera de nuevo la Convención Constitucional, ¿qué haría distinto?
Hay varias cosas. Pero la más importante, el error del primer día: que fuimos en auto varios y terminaron todos apedreados, vidrios rotos. Hay que hacerlo como lo hice los días siguiente, metro, micro y no tanto auto.
Después de la tarea realizada, ¿cree que la ciudadanía quiere a los convencionales?
Siempre hay algo de cariño por ahí que va quedando. Si le pusimos empeño, a lo mejor el resultado no fue el óptimo, pero se le puso empeño.
¿De qué se arrepiente de su labor?
De varias cosas, pero de no haber sacado más convencionales de nuestro sector, para haber provocado acuerdos distintos, que ese era el objetivo.
¿Cuál fue el momento más bochornoso de la convención?
O sea, muchos, pero el himno. Además que lo iban a cantar los niños y niñas de Orquestas Juveniles. Si no me equivoco, eso fue lo más bochornoso
¿Cuál fue el momento más honorable de la convención?
Lo contrario: cuando terminan todos, a coro, cantando el Himno nacional al final del proceso constituyente. Costó que entendieran, pero era importante. Era una señal importante.