Arzobispado en alerta: Abogado monitorea caso de abusos sexuales del excanciller y preparan escenario judicial de los obispos
La Iglesia ha mantenido un control constante sobre cómo se desarrolla la causa y, en particular, de las repercusiones que podría tener para la jerarquía eclesiástica. Por ello se envió en sigilo al abogado del arzobispado, Gonzalo Pérez Herrera, a la audiencia de formalización de Óscar Muñoz Toledo.
En la tribuna de la sala donde se realizó la audiencia de formalización del excanciller de la Iglesia de Santiago, Óscar Muñoz Toledo -quien enfrenta cargos de abuso sexual, abuso sexual impropio y estupro reiterado en contra de menores de edad-, figuraba el pasado viernes el abogado Gonzalo Pérez Herrera, quien desde mayo de 2017 trabaja en el equipo jurídico del arzobispado capitalino. A su lado, se encontraba uno de los hermanos de Muñoz Toledo, quien sigue respaldando al religioso en medio del quiebre familiar que produjo conocer los delitos cometidos por el sacerdote en contra de adolescentes, algunos de los cuales son parientes cercanos.
La presencia de Pérez Herrera en la instancia no fue casual: la Iglesia ha mantenido un monitoreo constante sobre cómo se desarrolla la causa y, en particular, de las repercusiones que podría tener para la jerarquía eclesiástica. Por eso el profesional de la Universidad Católica, que previamente se desempeñó en la Fundación Jaime Guzmán y en los estudios Guzmán y Cía, y Bambach y Campos, acudió con la misión de conocer de primera fuente de qué se acusa al religioso y vislumbrar el escenario judicial para quienes serán citados a declarar en la causa, entre ellos, el cardenal Ricardo Ezzati.
Al respecto, frente a la consulta formal de este medio, desde la Iglesia explicaron a través de un comunicado que "la presencia del abogado del Arzobispado de Santiago respondió a la necesidad de conocer los hechos de todos los cargos que se le imputan al sacerdote Óscar Muñoz".
Fuentes eclesiásticas recalcan que existe "gran preocupación" por la línea de la indagatoria que sigue el fiscal de O'Higgins, Emiliano Arias, y que busca probar encubrimiento de los superiores jerárquicos de Muñoz Toledo por no denunciar la vulneración sexual a menores por parte del excanciller. En esta línea, destacan que el fiscal Arias "ha declarado que está investigando una eventual responsabilidad del arzobispado en este caso" y que por ello el departamento jurídico del clero ya se prepara para enfrentar un proceso inédito en tribunales.
"Se está trabajando en revisar posibles escenarios y en una eventual defensa", resumen.
En la Iglesia hay preocupación por las repercusiones que este caso puede traer. En particular por la cantidad de información de la que dispondrá el Ministerio Público a través los archivos secretos incautados, y por el grado jerárquico de las figuras que están en la mira por eventual encubrimiento, partiendo por el cardenal Ezzati y su antecesor, Francisco Javier Errázuriz.
"Se pasó del asombro a la preocupación, pero poco a poco la mayoría de los obispos ha ido entendiendo que no hay forma de que la verdad no salga a la luz. Y es lo mejor", acota una autoridad.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.