Bochorno Ciudadano III: Empresa a cargo de elección electrónica se margina ante crisis y urna sigue cerrada... en la nube

Puede que tarde en conocerse semanas más, meses, tal vez nunca o que ya sea irrelevante cuando eso ocurra. El resultado oficial de la elección de directiva de Ciudadanos sigue siendo un misterio y depende de los archivos encriptados que se encuentran en el servidor o urna electrónica, que esta mañana seguía en bajo custodia de la empresa Evoting, sin que se pueda "abrir" para hacer el famoso escrutinio.

Y así seguía al momento de publicar esta nota debido a un nuevo y enésimo conflicto detonado hoy, que ahora involucra a dicha firma, a la directiva del colectivo, y al Tribunal Supremo (TS) del mismo, instancia que ya se dividió ayer entre las facciones de Andrés Velasco y Juan José Santa Cruz.

Delegados de todas estas partes estaban citados a primera hora para hacer cumplir el dictamen firmado ayer por el presidente del TS, Ricardo Escobar, y el ministro Eugenio Evans: abrir las urnas. Pero como ayer la otra mitad del tribunal emitió una resolución paralela que desconoció la anterior y pidió una investigación, resulta que Evoting optó por no inclinarse por ninguna de ambas, no asistir a la reunión y por lo tanto no acatar nada ni permitir el acceso a los votos.

"Ante esta situación, Evoting se atiene al protocolo de funcionamiento que habíamos acordado con el partido. En esa línea, vamos a esperar una comunicación de una resolución única del tribunal supremo que nos permita actuar", explicó a La Tercera PM Mario Novoa, gerente comercial.

La pugna suscitada hoy derivó en dimes y diretes de unos contra otros hasta por correo electrónico. Y ante ello, el prosecretario de la directiva de Ciudadanos y delegado de ésta, Samuel Errázuriz, tomó partido por el bando que presiona por no abrir la famosa urna, lo que agravó -si se puede- una crisis originada en una votación en la que apenas participaron unas 1.300 personas, que ha ridiculizado a más no poder a los dirigentes del partido y que va a quedar como caso de estudio.

Evoting, contratada por el partido para realizar la elección electrónica, tiene esos archivos almacenados no en una terminal física en sus oficinas, sino en un servidor en la nube, alojado en Estados Unidos. La única manera de desbloquearlo y acceder a los votos es a través de tres llaves, todas en poder del Tribunal Supremo del colectivo. Una la tiene su presidente, Ricardo Escobar; la segunda, el ministro del mismo, Eugenio Evans, y la tercera, el juez Esteban Ovalle.

Hay otras dos llaves. Una la tiene el también supremo Nicolás Shea (del bando de Andrés Velasco) y la última la conserva Evoting, ya que quien debiese tenerla, el cuestionado ministro Alí Samir Hamed Al -Hochi -que no es militante de Ciudadanos-, se encuentra en Arabia Saudí. Su caso motivó una larga pelea pseudo jurídica ayer en el TS: el bando de Santa Cruz dice que "no existe" como ministro y sus rivales se basan en lo contrario para defender sus puntos.

Hasta ahora, ni Ovalle ni Shea han aceptado facilitar las suyas. Es la misma postura de Andrés Velasco (a cuyo sector adhieren), impulsor de la candidatura de María Ignacia Gómez: que no se abra la urna sin antes averiguar qué pasó con los 206 votos que califican de irregulares o viciados. Esto, desde que Evoting informara durante los comicios de actividad inusual, como concentración de votos desde las mismas IPs o desde números de celulares casi correlativos.

Desde entonces, la facción de Juan José Santa Cruz (adversario del ex ministro de Hacienda y candidato a presidente) insiste en que la urna se abra ya. La de Velasco ha dado a entender que la elección está viciada y que para salvarla hay que eliminar esos 206 votos o bien dar un plazo muy corto para que dichos sufragantes acrediten que lo hicieron y que no fueron suplantados.

A medida que el conflicto ha escalado, ambos bandos se han acusado de intervencionismo, de fraude, en fin, de todo por correo y por redes sociales. Desde los adherentes a Santa Cruz, incluso, han dicho que la misma empresa Evoting es parcial en esta teleserie de bajo presupuesto, ya que sus directivos habrían tenido, o tienen, compromisos comerciales con Nicolás Shea, y que militan en "Todos", el colectivo con el que se fusionó "Ciudadanos" para no ser disuelto.

Novoa negó esto y declaró hoy a La Tercera PM que "no tenemos ninguna relación de negocios. Nicolás no es parte de la sociedad; la única relación que podría haber es que nuestra oficina estuvo un tiempo en un cowork del que Nicolás es socio, y que Nicolás y yo fuimos militantes de Todos. Yo lo conocí hace algunos años, pero de ahí a decir que hay alguna influencia o relación... ".

Así las cosas, la citación para esta mañana emitida por Escobar y Evans decía que "en caso que falte alguna de las llaves necesarias, ordena a Evoting que utilice una de las llaves que tiene en custodia por encargo del Partido Ciudadanos". Punto que el bando velasquista del TS desconoció, así como el voto dirimente que Escobar impuso, en su calidad de presidente del TS.

Con esta división, los delegados de Evoting no asistieron a la reunión que se celebró a las 8 de esta mañana. "Hay un montón de consideraciones de mérito de los fallos que no nos corresponde a nosotros hacer, así que será otra instancia que desconozco cuál sería: si el tribunal electoral u otra la que tenga que ordenar cuál es el fallo que se ejecuta. Las alternativas son: una comunicación única o que una instancia superior resuelva qué se debe hacer", agregó Novoa.

A eso de las 9.50 comenzaron a sucederse una serie de e-mails entre todas las partes. Luego que Tomás Barros, de Evoting, notificara que no harían nada mientras persistiera la división en el TS, el delegado de la directiva, Samuel Errázuriz, envió otro correo pasadas las 10 horas, contando que en nombre de la mesa ordenaba no abrir las urnas.

Escobar y Evans le contestaron a Errázuriz por la misma vía que "su función como prosecretario del Partido no es desconocer una resolución del Tribunal Supremo", que "ni mucho menos intervenir en el proceso de decisión y cumplimiento que debía efectuar el proveedor", y que "deberá usted asumir las graves consecuencias de su decisión". En el mismo mail reprendieron a Evoting, haciéndoles ver que no estaban cumpliendo con el contrato firmado con Ciudadanos.

Dicho trato incluía, según explicaron en Evoting, que el partido les pagara el 50% antes de la elección, y el 50% después.

Con la pelea ya propagada a la directiva y sin poderse conocer el resultado de la elección, el futuro de Ciudadanos está más en suspenso que nunca. Mientras el bando de Santa Cruz afina acciones judiciales, el de Velasco se mantuvo hoy en silencio: tanto él como la candidata Gómez optaron por no hacer declaraciones a La Tercera PM.

Varios mails de los intercambiados esta mañana entre la gente del TS, la mesa del partido y Evoting fueron copiados, además, a Alí Samir Hamed Al-Hochi.