Cali: el epicentro de las protestas eleva la tensión en la antesala de la mesa de diálogo en Colombia

Han pasado dos semanas de masivas movilizaciones que iniciaron contra la reforma tributaria del Presidente Iván Duque y la presión en las calles de Cali no da tregua. La tercera ciudad más grande del país vivió un fin de semana de tensión después de un enfrentamiento entre civiles armados, comunidades indígenas, que mantienen un bloqueo carretero, y la policía, lo que desencadenó el temor a una nueva escalada de violencia. El gobierno desplegó más de 10 mil agentes y dos mil militares en la zona, que hoy amaneció nuevamente paralizada, previo al inicio de la mesa de diálogo entre el Comité del Paro Nacional y el Ejecutivo.

Durante la madrugada, el jefe de Estado colombiano se trasladó a la capital del Valle de Cauca, donde estuvo alrededor de cuatro horas para encabezar un consejo de seguridad acompañado del alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina; la gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, y las cúpulas de seguridad para responder ante la emergencia registrada ayer, cuando la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN) denunció que en medio de un bloqueo o minga indígena, “ciudadanos armados, con el acompañamiento cómplice del Ejército, la policía y el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), dejaron a nueve heridos de bala” en la carretera que une Cali con Jamundí.

Cali, con más de 2,2 millones de habitantes, fue una de las primeras urbes del país en sumarse al paro nacional el pasado 28 de abril y desde ahí han mantenido las protestas. Inicialmente, el reclamo de la ciudadanía era para exigir deponer la reforma tributaria impulsada por el gobierno para recaudar dinero con un alza de impuestos y del IVA a productos básicos, que fue retirado el pasado domingo por Duque, pero que no logró calmar los ánimos.

Según la Defensoría del Pueblo, al menos 27 personas han fallecido y más de 800 personas han resultado heridas durante las protestas en Colombia. En tanto, la ONG Temblores eleva la cifra a 47 decesos. Tras 12 días de intensas protestas, los colombianos se han plegado a nuevas exigencias, como una nueva reforma al sistema de salud, el cumplimiento de los acuerdos de paz y la desvinculación de acusados de abuso policial.

El Presidente Duque hizo un llamado hoy a los jóvenes caleños y aseguró que están dispuestos a llevar adelante mesas de diálogo que incluyan la participación en política, matrícula cero en establecimientos educaciones y oportunidades laborales.

“Colombia entera, y particularmente la ciudadanía de Cali, rechaza los bloqueos que afectan el abastecimiento y la distribución de medicamentos”, señaló el Presidente Duque en su cuenta de Twitter tras ordenar el reforzamiento de agentes policiales para desbloquear las carreteras.

Ante esto, las autoridades locales decretaron el cierre de todos los accesos al departamento del Valle de Cauca, lo que restringe la movilidad en todo el territorio y que solo permitirá ingresar a camiones de abastecimiento, con combustible, medicamentos y vacunas contra el Covid-19, que inició hoy y que se extenderá hasta la medianoche del sábado.

Según el diario colombiano El Tiempo, ante la escasez y desabastecimiento de ciertos productos básicos, la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la minga indígena confirmaron que pactaron un corredor humano desde hoy hasta mañana a la 1 de la madrugada.

Aunque ayer estuvieron en vilo las conversaciones tras los choques en Cali, durante el mediodía de hoy, el Ejecutivo de Duque tendrá el primer acercamiento con el Comité de Paro Nacional, que contará con veedores como una delegación de la ONU y de la Conferencia Episcopal, en la Casa Nariño. Los gremios apuntaron que se trata solo de una “reunión exploratoria” en el que reclamarán el derecho a la libertad de protesta, el rechazo a la militarización y abordarán las peticiones del pliego nacional de emergencia.

Según la revista colombiana Semana, entre los líderes que han confirmado su asistencia a la mesa de diálogo aparecen los representantes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Confederación Nacional del Trabajo (CGT), la Confederación de Trabajadores de Colombia (CTC), la Confederación de Pensionados de Colombia (CPC), la Confederación Democrática de los Pensionados (CDP), la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode), Dignidad Agropecuaria y Cruzada Camionera.

Mientras se lleven a cabo las reuniones en Bogotá, la Comisión de Paz del Senado se trasladó hoy a Cali junto a delegados de Alemania, Reino Unido y Estados Unidos para recorrer los puntos de bloqueos y reunirse con estudiantes y autoridades locales.

“Esta es una crisis nacional, pero nuestra ciudad de Cali sin duda es la más afectada. Es la que más muertos ha puesto, es donde están ocurriendo episodios de justicia por mano propia, disparos de civiles contra jóvenes, indígenas y una sensación generalizada de ciudad sitiada, la gente está angustiada en Cali, ha reclamado la presencia del Presidente Duque para resolver la crisis, el propio alcalde de Cali ha pedido que la mesa de diálogo se instale en la ciudad de Cali”, señaló el senador Roy Barreras.

En el día 13, los sectores han convocado nuevas marchas que se extienden en Bogotá, Medellín y Barranquilla en respaldo a la situación en Cali, y que incluirá “plantones artísticos”, corte de calles y distintos tipos de participación ciudadana.