“Con la UC es un clásico; con la U es el Superclásico”: Barticciotto calienta el debate sobre la importancia del duelo entre cruzados y Colo Colo

Universidad Católica y Colo Colo se vuelven a ver las caras. Lo harán este sábado en el estadio Santa Laura. El orden está dado por la localía cruzada, de emergencia en el recinto contiguo a la plaza Chacabuco, ante la remodelación de San Carlos de Apoquindo. Independientemente de ese factor, y como suele ser frecuente cada vez que chocan los estudiantiles y los albos, sobre todo en el último tiempo, la discusión se reinstala. Las preguntas surgen espontáneamente: ¿Es un clásico? ¿Cuándo empieza a serlo? ¿Por qué no lo sería?. Responderlas implica un análisis en el que surgen varios elementos.

Las respuestas son amplias. Incluyen una multiplicidad de factores. Hay una variable que, estrictamente, es ajena al enfrentamiento, aunque la explicación la terminará convirtiendo en no tan extraña. Como sea, los jugadores que dirigen Ariel Holan y Gustavo Quinteros tendrán que afrontar un encuentro que genera altas expectativas y que, tradicionalmente, ha marcado la suerte de los equipos de Las Condes y de Macul.

“Antes no era. Para mí, con el tiempo se transformó en clásico. Con la U es el Superclásico”, establece Marcelo Barticciotto, quien defendió ambas camisetas y anotó para ambas escuadras. En 1995, marcó un tanto icónico. Con la tricota de la UC, que le había permitido volver al fútbol chileno después de un paso por el mexicano, le marcó al Cacique y no lo celebró. La conversión pasó a la historia como El Gol Triste. El campeón de América se anima, incluso, a fijar la época en que la rivalidad adquirió el rótulo que se les da a los encuentros más tradicionales en todo el mundo. “Entre fines de los 80 y principios de los 90″, dice a El Deportivo.

Por esos días, era habitual que albos y cruzados llegaran a las últimas fechas definiendo el título del Campeonato Nacional. En la UC suelen recordar que en esos compromisos se producían situaciones polémicas que terminaban favoreciendo decisivamente al Cacique. En efecto, en ese período, en el que lo dirigieron Arturo Salah y Mirko Jozic, Colo Colo obtuvo un tricampeonato largo, igualando una proeza que solo había conseguido Magallanes en los albores del profesionalismo. La UC lo superó entre 2019 y 2022, logrando un inédito tetracampeonato en torneos de dos ruedas, como contraposición al que celebró el Cacique en certámenes de una rueda.

Hay otro motivo por el que los azules forman parte de la revisión. Por esos años, los laicos atravesaban sus peores momentos. Habían descendido en 1988 y terminaban la década muy lejos de su protagonismo histórico. “La U nunca desapareció. Siempre había un tema de hinchada, había presión por ganarle”, precisa Luis Pérez, quien también vistió las camisetas cruzada y alba.

Pérez, a quien la historia del fútbol chileno y sudamericano recuerda como el autor de dos de los goles en la final que le dio a Colo Colo su única Copa Libertadores, tiene otro hito a cuestas: jugó el encuentro con ambas camisetas. “Tengo la idea de que el concepto nace de la rivalidad futbolística, desde finales de los 80. Desde 1987, por ahí . La U estaba un poco relegada hasta que apareció Salas o la época de Sampaoli. En esa época, el clásico de Colo Colo era más con Católica que con la U. El otro era por lo de la hinchada, la popularidad. Como viví las dos instancias y enfrenté a la U, siento que va más por ahí. Es un poco la diferencia que sentía como jugador. En la UC lo sentía como el momento de pelear el torneo. Eran los dos partidos más decidores del campeonato. La U lamentablemente estaba más relegada en lo futbolístico, no tenía planteles competitivos”, explica.

“El gran clásico de Colo Colo es con la U, por lo que significa, por el impacto social, pero dentro de la cancha, y hoy más aún, es con la UC. Pelean los torneos hace años. Esas definiciones de los ochenta-noventa lo transformaron en un clásico deportivo. En lo popular, es distinto. Esa es la definición”, sostiene.

Curiosamente, Pérez no pudo defender a Colo Colo ante la UC. Una cláusula en su contrato, muy propia de esa época, se lo impedía, considerando que había sido cedido por los cruzados a los albos. Igualmente, pudo palpar cómo se vivía el duelo en ambos vestuarios. “En el camarín, ambos planteles se lo tomaban con mucha importancia. Nunca se miró de una manera diferente. Se peleaba el torneo. Era súper importante, eran dos muy buenos equipos. Sin dudas, había una supremacía de Colo Colo que todos los equipos lo sienten, por la popularidad. A veces se daba o no, pero la importancia en la interna era para los dos equipos igual. Cuando yo estaba en la UC, en Colo Colo seguramente sabían del poderío que teníamos”, afirma.

Naturalmente, las opiniones son variadas. Jorge Aravena, emblemática figura cruzada, es categórico. “El único clásico que conozco es el universitario. Después puede haber de colonias, regionales o de lo que sea. Lo que pasa es que se volvió bastante común hablar de clásicos. El de Universidad Católica con Colo Colo es un partido tremendamente importante, pero no más que cualquiera”, apunta el Mortero.

Incluso, refuta la teoría de que el duelo entre albos y cruzados adquirió relevancia por las definiciones de hace tres décadas. “Es un error decir que los campeonatos de los ochenta o noventa se definían en ese partido. Eran tan importantes como los otros 28 que jugaba cada equipo. Nosotros habíamos sido campeones en el 84 y el 87. Antes del primer año, llevábamos un buen tiempo sin ganar nada. Pero, insisto, para mí, el clásico es el universitario. Yo tuve la suerte de ir al último en que hubo ese espectáculo que lo hizo inolvidable”, sentencia.

Esa palabras encuentran, sin saberlo, la contraposición de Brayan Cortés. “Se vive diferente. Sabemos que son tres puntos, pero es distinto, un partido que queremos ganar siempre”, sentenció el arquero albo en una actividad pública este jueves.