El ambicioso proyecto que diseña el arquitecto Alejandro Aravena en Renca

Fue en marzo de este año cuando la comuna de Renca, ubicada en la zona norponiente de Santiago, lanzó “Crecer en Renca”, un programa de acompañamiento para la trayectoria de niños, niñas y adolescentes -que va desde la gestación hasta el proceso de ingreso a la educación superior- con el fin de alejarlos de conductas de riesgo a través de diversos hitos.

Y pese a que el proyecto ya contaba con resultados derivados del modelo islandés aplicado por el municipio -que busca disminuir el consumo de drogas y alcohol en NNA- aún era latente la necesidad de contar con un espacio físico para la comunidad.

Así, el municipio tomó contacto por primera vez en junio de 2022 con el premio Pritzker de Arquitectura Alejandro Aravena y su equipo de arquitectos de Elemental para diseñar el primer Centro de Cultura, Niñez, Recreación y Experimentación de la comuna de Renca y la Región Metropolitana (RM).

Aunque por distintas razones la conversación en su momento se paralizó, volvió a retomarse el 18 de julio de este año.

En concreto, se trata de un espacio que se edificará en un terreno de 13.000 metros cuadrados emplazado en una de las puertas de entrada a Santiago desde el aeropuerto internacional y que dentro de su infraestructura contará con un teatro para 600 personas, otro teatro para la niñez, biblioteca y librería.

El proyecto considera espacios interactivos sensoriales para la primera infancia, espacios inclusivos para niños, cuidadores, personas mayores y personas con discapacidad; áreas verdes y antiestrés que disminuyan la contaminación del aire, lumínica y acústica, y otros que inviten al movimiento y deporte.

Este también tendrá dentro de sus instalaciones laboratorios STEM, impresión 3D y cowork, laboratorio de ciencia, laboratorio de informática y espacios para taller de música, sala de ensayo, estudio de grabación y sala audiovisual, entre otras propuestas que surjan.

Pero el espacio no solo contará con las ideas del municipio y el estudio Elemental, sino que se trata de un proceso participativo en que se encuentran la comunidad de Renca, expertos de organismos como el Banco Interamericano del Desarrollo (BID), Fundación Colunga, y otros a través de visitas inspectivas al terreno donde se levantará dicha infraestructura.

Es más, a la fecha ya se han realizado dos talleres colaborativos para informar sobre el proyecto y tener un feedback de los vecinos sobre qué mejorar e implementar. Estas se desarrollaron el pasado miércoles 21 y jueves 22 de agosto.

“Es buena instancia para los niños, jóvenes y los mismos adultos para generar menor carga emocional para ellos que a largo plazo afecta a los niños. Y un foco en la salud mental, donde haya profesionales que puedan atender a personas con capacidades diferentes”, comentó Alondra González, parte del Concejo Consultivo de la Niñez de Renca.

Otro de los focos de la construcción del centro es que este permita la ampliación del circuito cultural de Santiago hacia el sector norponiente de la ciudad (Quinta Normal, Cerro Navia, Conchalí, Quilicura, Pudahuel, Lo Prado, Independencia), además de querer convertirse en un ícono que dé la bienvenida a la ciudad, pues su ubicación estará emplazada a un costado de la Autopista Costanera Norte.

“Renca es de las pocas comunas de la ciudad de Santiago que no cuentan con un gran centro cultural, entonces este proyecto responde a esa necesidad que además esperamos que sea muy visible”, recalca el alcalde Claudio Castro (ind.).

El proyecto será financiado por entidades público-privadas con una inversión de entre $25.000 millones y $30.000 millones. La entrega de su diseño estratégico con su carácter y operaciones principales se iniciará en octubre, mientras que la versión final del diseño con planos, esquemas y diagramas definitivos se espera que esté en diciembre. Posterior a eso se verá el proceso formal que buscará a los constructores.

Según el alcalde, de seguir la planificación deseada la obra podría estar habilitada en 2028.

Aravena, en tanto, asegura que tiene un vínculo emocional con Renca debido a que en esa comuna Elemental desarrolló sus primeras viviendas sociales.

“El desafío tiene que ver con que hay que poder generar una oferta alternativa a la amenaza del narcotráfico a la ausencia de proyectos, no solo personal para los niños, jóvenes, adolescentes que ven en el mundo narco una única vía de salida (...) La única manera de hacerle frente es generar un proyecto colectivo, una ética colectiva, otro propósito para la comunidad”, dice.