Experto en alegría: Llegó, pero duró poco

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La unidad de la oposición ayudó a ganar el plebiscito y fue clave después durante la transición. Foto: Getty Images.

Wenceslao Unanue, director del Instituto de Bienestar, y experto en felicidad, evalúa si la alegría promovida como parte de la campaña del No, efectivamente arribó entre los chilenos.


Wenceslao Unanue es literalmente un experto en felicidad. Es el director del Instituto del Bienestar de la U. Adolfo Ibáñez, y en esa condición pondera si la alegría realmente llegó a Chile, en alusión al eslogan de la campaña del No, en el marco de los 30 años del plebiscito de 1988.

El experto establece que para esa fecha efectivamente hubo un aumento significativo en la alegría y en la felicidad de la mayoría de los chilenos, pero cree que ese aumento duró poco.

"Duró poco porque el modelo socioeconómico de la dictadura fue un modelo que se arraigó muy fuertemente en la sociedad. Ningún gobierno posterior tuvo ansias ni voluntad de cambiarlo".

Unanue, ingeniero comercial, académico de la Universidad Adolfo Ibáñez y magíster en Economía y psicólogo de la Universidad Católica, cree que en esa época "no había muchas mediciones cuantitativas. Es algo más nuevo, no conozco de esa época".

Las mediciones de alegría surgen, "principalmente a mediados de los 80 con el estudio de la felicidad y el bienestar subjetivo. Fundamentalmente en EE.UU. En Chile recién la Casen hace pocos años ha incluido una pregunta sobre satisfacción con la vida", añade Unanue.

Define la alegría como "una emoción positiva (que es parte de la felicidad) que, si no se refuerza, se acaba muy pronto. Tenemos varios estudios que muestran que los shocks de emociones positivas duran muy poco. Por ejemplo, ganar la Copa América duro solo tres días".

El especialista en felicidad en el trabajo agrega que "hoy hay muchos avances. La felicidad se mide con encuestas, con escáneres cerebrales, a nivel individual organizacional, social, de país, etc.".

El mencionado Instituto del Bienestar fue fundado en 2012, por lo que ya cumplió seis años de existencia. Se define como una organización interdisciplinaria que desde el trabajo en salud mental y la colaboración con diferentes ámbitos académicos, se dedica a promover las relaciones saludables y la felicidad en las personas y la comunidad.

Además de estar presente en Chile, trabaja en otros países de Latinoamérica como Argentina, Ecuador y Venezuela. En el país, sus directores son Daniel Martínez, Wenceslao Unanue, Lorena Zamora y Mónica López.

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