En la cuerda floja: Evalúan destitución de todo el consejo del Instituto de Derechos Humanos

Ayer por la tarde el abogado y ex contralor Ramiro Mendoza se trasladó hasta la sede del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH). El motivo de la visita era concentrarse con la presidenta del Consejo, Consuelo Contreras,  para afinar los argumentos de la apelación que presentarán a la Corte Suprema para revertir el fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago que declaró ilegal la remoción del ex director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Branislav Marelic.

El recurso ante la Corte Suprema es un ingrediente más en la guerra civil que se desató al interior del organismo producto de las desavenencias entre Marelic y el consejo, lo que gatilló la destitución del director el 15 de enero. A Marelic se le acusa de mantener una agenda personalista e inconsulta. Y la contraparte apunta a un hostigamiento y un trato arbitrario.

El fuego cruzado está haciendo un grave daño institucional, dicen los diputados  Marcelo Díaz (PS), Carmen Hertz (PC), René Saffirio (independiente) y Tucapel Jiménez  (PPD). De ahí que está en riesgo la permanencia de los 11 miembros del Consejo, pues plantean acudir a la facultad que les da el Artículo 7  de la ley que crea el INDH y que habilita al Congreso a remover al consejo completo presentando una solicitud firmada por 10 parlamentarios.

"Los consejeros sólo podrán ser removidos por la Corte Suprema, a requerimiento del Presidente de la República o de la Cámara de Diputados, por incapacidad sobreviniente declarada judicialmente, por alguna de las causales contenidas en los números 1°, 5°, 6°, 7° u 8° del artículo 256 del Código Orgánico de Tribunales, o negligencia manifiesta e inexcusable en el ejercicio de sus funciones", dice la ley.

Entre los parlamentarios hay quienes consideran que el desprestigio al INDH es tal, que no hay otro camino que pedir la renuncia a todos. Otros, como Tucapel Jiménez, no descartan esta opción, aunque consideran que lo prudente es esperar a ver qué decidirá la Suprema sobre la situación de Marelic.

"No no conozco la interna de lo que pasa en el INDH, pero claramente hay un problema. Hay un desprestigio institucional preocupante", dice Jiménez.

"Un mínimo sentido de responsabilidad haría a todo dar un paso al costado", añade el socialista Marcelo Díaz.

Desde el INDH sostienen que,  por ahora, están abocados a la apelación y que no ha entrado una solicitud formal de renuncia para lo consejeros que pueda ver evaluada en las instancias oficiales.

Por su parte, el abogado Ramiro Mendoza, dice que confía en que "la Suprema revise la apelación. Creemos que no está bien fundada". El texto, puntualizó, será presentado entre hoy y el lunes.