La "Manada" chilena: Familia de víctima pide tranquilidad y fiscal revisa primeras diligencias

Sin entregar aún declaraciones, internada en la Clínica Indisa y todavía en shock, permanece la joven de 28 años que el pasado domingo fue violentada sexualmente por un grupo de hinchas de la Universidad de Chile quienes la interceptaron en los alrededores del metro Ñuble y la trasladaron a una plaza cercana donde habría sido violada. Fue su esposo quien acudió con la mujer hasta el recinto clínico y quien entregó las primeras referencias sobre la situación.

La conmoción generada por el hecho, que asemeja el crimen cometido en España en el año 2016 durante la fiesta de San Fermín, ha motivado una amplia cobertura en los medios, que en algunos casos ha sido especialmente molesta para la familia. En particular hay reparos por la exhibición en un canal de televisión de imágenes extraídas del Facebook de la víctima que aparecieron distorsionadas, pero que permitirían a sus cercanos identificar a la mujer.

Esta jornada, la fiscal Mizti Henríquez, quien se reunió con funcionarios del 35 Comisaria de Carabineros para revisar el resultado de las primeras diligencias sobre el delito destacó que "nuestra máxima preocupación en este momento es la protección de la víctima. Entendemos que el caso ha generado mucho impacto, pero la víctima y su familia se han visto afectado por innumerables llamados y lo que necesitan en este momento es la tranquilada necesaria para enfrentar esta difícil situación".

Según la información recabada por este medio, parte de los hechos habrían quedado registrados en cámaras de grabación del metro y de una estación de gasolina cercana a la plaza donde se concretaron los abusos por parte de tres de los cinco sujetos que intervinieron en el ilícito.

Los hospitales y clínicas cuentan con una serie de normas elaboradas por el ministerio de Salud en 2016 respecto de la atención a víctimas de delitos sexuales. Allí se establece un procedimiento único para todos los profesionales y técnicos que intervienen en el proceso, "cuya misión es brindar una atención integral a la víctima de violencia sexual, para disminuir la victimización secundaria y realizar pericias de calidad" y en el que se incorpora "el enfoque de derechos y de género en la atención de las víctimas de violencia sexual".

Así, por ejemplo, se detalla que se debe efectuar hospitalización inmediata, si se evalúa necesario para el tratamiento de las lesiones o compensación psicológica; efectuar denuncia respectiva y solicitar la protección legal de la víctima.

Cada recinto hospitalario ha procedido a capacitar a quienes deben prestar la atención requerida para facilitar, por ejemplo, la toma de muestras que deben ser analizadas por el Servicio Médico Legal.