Las denuncias que complican a Fernando Villegas
Mónica Rincón sostiene que no le tocó vivir una situación de ese tipo, pero no por eso duda de las denuncias.
Una serie de comportamientos lascivos y malos tratos por parte de Fernando Villegas -quien es columnista de Reportajes de La Tercera- a lo largo de su carrera profesional describe hoy un reportaje en The Clinic.
Este revela episodios de comentarios y actitudes desagradables de parte del sociólogo conocido ampliamente por su rol en Tolerancia Cero, de CHV. En el artículo, algunas mujeres que han trabajado con él cuentan sus experiencias bajo el anonimato, y otras dan su nombre, como el caso de la maquilladora Pilar Piri, quien confiesa que apenas le tocó maquillarlo se sintió "hastiada hasta por su forma de hablar, y por su mirada tan libidinosa que llegaba a incomodar, sin siquiera decir una palabra".
"Quería terminar muy rápido de maquillarlo. Me dijo que parecía geisha por mis ojos rasgados, y preguntó si acaso yo sabía a lo que se dedicaban las geishas. Al final terminé y al pararse me quedó mirando, y me dijo: 'Mmm, tenís buen culo, ah', y se fue. En la semana pensaba que venía el turno del domingo y era terrible, porque tenía que estar sola con Fernando Villegas. En los restantes programas siempre lo escuché referirse a mujeres por el poto o las tetas. Fue horrible. Era como un hombre obsesionado con eso", relata la mujer, quien cuenta que fue a expresar su malestar ante Jaime de Aguirre y Pablo Morales, entonces directivos de CHV.
"Junto a otras maquilladoras, se les dijo personalmente que nos incomodaba que Fernando se refiriera a compañeras de la forma en que lo hacía, o que hablara de cosas sexuales mientras lo maquillábamos. Ellos le bajaron el perfil a la situación, lo interpretaron como que Villegas era un hombre fresco no más", señala. El artículo sostiene que Jaime de Aguirre dijo a The Clinic que no recordaba la reunión, pero que sí tiene en la memoria haber tenido que llamarle la atención. "Se le pidió que tratara a sus compañeras de trabajo con más respeto", dijo.
Fernando Paulsen, en tanto, dijo que el comentario que le hizo a la maquilladora era algo habitual en él y que no se refería a alguien en particular. "Es cierto que Fernando hacía comentarios subidos de tono, pero siempre me pareció que era inofensivo, que ladraba, pero no mordía".
Dos maquilladoras antiguas del programa, Julia Peñaloza y Tita Contreras, dijeron a The Clinic, por separado, que nunca presenciaron conductas impropias del conductor.
Mónica Rincón: "A mi no me pasó, pero me parece gravísimo"
A quien también le tocó trabajar con él fue a la periodista y conductora de CNN Mónica Rincón, quien compartió la mesa de Tolerancia Cero con Villegas el año pasado. Frente al reportaje del The Clinic, la periodista dijo que "más allá de que discrepara con él en sus ideas y de que discutiéramos en pantalla, debo decir que él se comportó correctamente conmigo". Sin embargo, añadió, "pero no quiero para nada al señalar que a mí no me pasó, bajarle el perfil a las denuncias que me parecen gravísimas o que no les crea. Para nada, yo valoro y admiro a toda mujer que se atreva a denunciar y le creo porque no se gana nada". Rincón añadió que "me parece que es muy importante que se establezcan protocolos de denuncia y canales para ello en todos los lugares de trabajo que en Turner Chile se crearon para tener un lugar más seguro donde trabajar".
Desde otro canal, eso sí, Monserrat Alvarez salió a contar su experiencia con el periodista. "No sólo con Villegas, muchos hombres con lo que uno se ha encontrado en la vida que hay que hacerle el quite. Y de alguna manera uno estaba acostumbrada a que habían ciertos personajes, en la pega, entre ellos, era Fernando Villegas. Yo lo conté una vez sin nombre, que uno decía no me vaya a encontrar con él en el ascensor porque siempre te provocaba una situación incómoda", dijo en canal 13.
Consultada si se trataba de exceso de cercanía o abrazos, dijo "todo eso e intimidándote más de la cuenta. Y a mí lo que me pasó con todo esto que ha ocurrido los últimos meses, y yo cuando lo conté acá, lo vuelvo a decir, porque yo me sentía como una mujer empoderada, súper clara, y de repente dije 'estoy súper acostumbrada a que eso es parte de lo que a uno le toca como mujer, que estamos fuera del abuso, estamos como que siempre te encontrai con un viejo verde en la pega, siempre te encontrai con alguien que te dice algo inadecuado".
"Yo nunca me atreví a decirle 'sabí qué, hazte a un lado', como que tratai de correrlo un poco por la indirecta. Lo hablábamos entre las mujeres: me encontré con Villegas en el estacionamiento, entonces me di una vuelta para no subirme con él en el ascensor. Todo esto también en uno tono como de amigote, que a uno no le permite de repente decir 'oye, sabes que, córtala", relató.
Sobre por qué no lo paró, Alvarez dijo que porque "no me atreví. Sabí lo que te da miedo que te digan, 'que erí cartucha, Monse, relajate', y como yo soy una mujer que debo tener personalidad y todo no me atreví a exponerme a que me dijeran ' que le poní'".
"Lo que es real es que yo y muchas de las compañeras nos sentíamos supér incómodas", subrayó.
La columnista de Paula, Carolina Pulido, cuenta una experiencia similar. "Alguna vez fui a entrevistar a Villegas a su casa. Contestó la mitad de mis preguntas con su cara de sopor de siempre, y con una mezcla de desprecio y calentura, puso su mano sobre la mía y preguntó si era casada", dijo en Twitter.
La Tercera PM intentó conocer la versión de Villegas, pero no fue posible ubicarlo hasta el cierre de esta nota.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.