Lecciones ibéricas: Sánchez, el nuevo modelo del PS chileno y la luz amarilla para el Frente Amplio
Después de haber sufrido la masacre del PT en Brasil, los históricos del PS y el PPD amanecieron festejando el triunfo del PSOE en las elecciones generales españolas. Unos leen a Pedro Sánchez como ejemplo de un liderazgo joven, con discurso y narrativa. Otros, que la baja de Unidas Podemos es una luz amarilla para el Frente Amplio acá en Chile. Madrid no es Santiago, pero hay lecciones.
Como aires de desquite y alivio -después de tantas malas noticias electorales en Brasil y otros países- han recibido los partidos chilenos del ala izquierda de la ex Concertación el triunfo del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en las elecciones generales ibéricas. Después de todo lo que se ha dicho y escrito sobre paralelos entre ambos mapas políticos, y guardando las atlánticas proporciones entre los dos países, ¿qué lecciones deja para el sector? Al decir de prohombres de la extinta coalición, muchas, partiendo por nuevos y más fuertes liderazgos, una apuesta con discurso y narrativa, una conexión con su electorado y otras, que impidieron -creen- que Unidas Podemos terminara desplazando al colectivo.
Lo anterior es un recado directo al Frente Amplio, donde esta mañana tomaron nota del revés sufrido por ese partido, su símil, en escaños.
Son buenas noticias para el PS y PPD acá, pero también no tan buenas porque destacan las falencias del bloque, con un socialismo que enfrenta elecciones internas en medio de críticas cruzadas. Pero por lo pronto, el triunfante Pedro Sánchez parece perfilarse como modelo, además de una reivindicación a la socialdemocracia.
"El socialismo democrático sigue plenamente vigente, y es la opción que hay. Sobre todo ante este surgimiento de los extremos, como el nacionalpopulismo y el extremismo de izquierda. Y lo seguirá siendo por bastante tiempo", asevera tajante el senador y ex ministro PS José Miguel Insulza, quien dice que lo acaecido "reivindica, al menos, una izquierda democrática. Me siento muy representado por lo que está pasando".
"La segunda lección", dice, "es que se valora la experiencia en el gobierno. Sánchez ha hecho un buen gobierno, responsable, y eso lo ha valorado la gente".
Para el también ex ministro Sergio Bitar (PPD) la primera lección es que "cuando se gobierna mal -sea de derecha o izquierda- y se dividen las fuerzas democráticas, se polariza el cuadro". Recuerda que se dijo antes, cuando aparecieron Podemos y VOX, "que se liquidarían los partidos que se ubican en opciones de cambio en la centroizquierda, pero de forma responsable".
Como eso no ocurrió, dice el ex ministro de Educación, "la lección española es muy clara: no hay tal giro a la derecha, si al frente hay capacidad de proyectar fuerza e ideas, como ha hecho Sánchez".
"Se valora la experiencia en el gobierno. Sánchez ha hecho un buen gobierno, responsable, y eso lo ha valorado la gente", añade Insulza.
También rescata Bitar "un liderazgo nuevo y joven. Eso demuestra, en el caso de Podemos, que una intención de sustituir a las fuerzas tradicionales de centro izquierda no resultan, si es que éstas tienen voluntad y enfrenta a la gente que tiene una posición radical y poco viable".
"Comparto ese diagnóstico. Podemos pasó de una opción alternativa a ser un buen aliado del socialismo democrático, y eso es bueno", celebra el Pánzer.
Bitar, el ex ministro que se paraba de cabeza haciendo yoga, insiste en el punto: "Podemos es más radical que el Frente Amplio chileno. Allá se pusieron como meta destruir al PSOE y le salió el tiro por la culata. Esas lecciones las han tomado a tiempo algunos dirigentes jóvenes del Frente Amplio".
Ricardo Solari, ex PS y también ex ministro, tercia: "Fue una combinación de dos fenómenos. Uno, el surgimiento de liderazgos fuertes; Sánchez tiene carisma, ha profundizado el desarrollo institucional del PSOE. Dos, capacidad de construir identidad política en tiempos y circunstancias muy difíciles; logró ocupar un espacio importante en la centroizquierda y quitarle capacidad de crecimiento a Podemos".
Explica que el PSOE además "tenía un mensaje propositivo y político cultural, trabajó mucho los niveles narrativos de su campaña. Pero también tuvieron un campanazo, una luz amarilla, cuando perdieron en Andalucía (2018), donde habían gobernado por muchos años; eso fue señal de desgaste del poder, pero también una señal de modificar prácticas y rostros".
Acáen Chile, la izquierda y centroizquierda, dice, debería tomar nota del "fortalecimiento de los liderazgos y conectar su discurso con los ciudadanos de a pie, en la clase media". Solari cree que en Chile, tanto el PS como el PPD han de concentrar a sus líderes en desgranar nuevas propuestas, ideas y "tener una presencia permanente en la vida común de la gente, con mensajes con un horizonte de tiempo".
Además, mirando la alta participación electoral española, osberva "la importancia de la buena comunicación de un proyecto e ideas que saque a la gente de sus casas, a votar".
Arriagada: "El FA podría tener un retroceso"
Desde otra vereda, el ex ministro DC Genaro Arriagada tiene su propia lista de lecciones: "Como primera cosa, la derecha debe colocar las barbas en remojo, porque de acá a los próximos dos años se va a dividir a lo menos en dos coaliciones: una de centro derecha y una de derecha nacionalista, encabezada por José Antonio Kast y con algunos diputados de RN, apoyada por empresarios muy poderosos".
Según él, "la derecha se fragmentó allá, y acá en Chile inevitablemente se va a fragmentar. Es imposible que convivan bajo el mismo techo Piñera, José Antonio Kast y Evópoli".
Y, poniendo en la mira al Frente Amplio, sostiene que "el tiempo de la indignación política, es decir el de Podemos, está pasando, viene en decadencia, en todo el mundo. La gente comparte con ellos la indignación frente al sistema, pero al cabo de un par de años les piden propuestas y soluciones. En Chile el Frente Amplio, que es un poco el equivalente de Podemos, lo más probable es que tenga un retroceso electoral".
Ahí también hace ver que "Podemos es un solo partido; acá son entre 11 y 14 partidos que no se ponen de acuerdo".
Al contrario, destaca que el PSOE "ganó en base a dos méritos. Uno, la reivindicación de un ideario socialdemócrata, ajeno a la izquierda ortodoxa. Dos, miró y atendió a la clase media, con un lenguaje para nada radical y propuestas moderadas, de transformación gradual. Y tomó distancia de Podemos, lo que no quiere decir que no puedan ser gobierno".
Eso lo lleva a enviar el siguiente recado: "Si el PSOE y Unidas Podemos hubiesen hecho campaña juntos, el PSOE habría tenido un fracaso monumental. Y eso debieran aprenderlo los partidarios de la unidad acá".
En RD acusan recibo: "Tenemos que recoger esta experiencia"
¿Acusa recibo el Frente Amplio? Según el diputado Pablo Vidal, jefe de bancada de Revolución Democrática, sí.
"Son varias las reflexiones, es positivo el triunfo del PSOE, la alta participación afectó a las derechas, hay un fuerte castigo a la corrupción del Partido Popular, pero creo que una de las lecciones de las cuales tenemos que hacernos cargo como Frente Amplio es que a Podemos también le fue mal", dice.
Según él, "le fue mal porque si bien la crítica que hace Podemos es certera, la gente espera que esa crítica se tranforme en propuestas y soluciones. Creo que en el Frente Amplio tenemos que recoger esta experiencia y ser capaces de mostrarle al país que tenemos propuestas, que tenemos proyectos, que tenemos un programa (....). El día que podamos mostrar esas soluciones, esa claridad, nos van a dar la oportunidad de gobernar y si no, podemos sufrir el mismo castigo que sufrió Podemos en España".
Y el ex precandidato presidencial Alberto Mayol apunta que "el PSOE tiene una inercia histórica capaz de absorber las crisis. Segundo, la metodología de Podemos, del histrionismo, la denuncia y cierto predominio moralista tienen límites de crecimiento y de sostenibilidad".
Añade que "el malestar social horada el proceso político y supone cambios por distintos sectores, cuestionando el modelo; que lo que no resuelve del malestar social la izquierda le implica crecimiento a la ultraderecha, y que los liberales y la ultraderecha reciclan votos que finalmente están garantizados para la derecha". Mayol también repara en que "la crisis del PP no es menor y es una señal para la derecha chilena".
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