¿Y qué piensa La Moneda de Allamand?: "La novedad es que no fuera candidato"

"La novedad sería que no fuera candidato".

La frase ha comenzado a escucharse en los últimos días en los pasillos de La Moneda para ponderar la nueva arremetida presidencial del senador RN Andrés Allamand, quien hoy en la mañana, consultado por sus intenciones en Radio Duna, señaló que "uno tiene que contestar con franqueza, yo estoy disponible a pensarlo".

En Palacio advierten que la aspiración del parlamentario no es novedad. Pese a que tanto desde el gobierno como del oficialismo han remarcado que no es momento de candidaturas, asumen que Allamand tiene un gen político que lo va a llevar a intentarlo nuevamente, pese a su duro fracaso en la primaria presidencial de 2013, donde fue derrotado por el coronel UDI Pablo Longueira, quien había levantado una candidatura express en dos meses luego que Laurence Golborne diera un paso al costado.

En el gobierno recuerdan que Allamand está marcando plazos similares a su anterior aventura presidencial. Porque fue en el segundo año del primer gobierno de Sebastián Piñera que Allamand comenzó a desplegarse, aunque esa vez fue desde el gabinete de ministros, al que ingresó como titular de Defensa en enero de 2011, en reemplazo de Jaime Ravinet.

A diferencia de hoy, aquella vez la contienda se dio dentro del gabinete. Golborne había comenzado a perfilarse a fines de 2010, tras su salto a la fama en el rescate a los mineros. Allamand, en tanto, fue acumulando presencia mediática en Defensa aunque su ruta también tuvo un punto de inflexión: la tragedia aérea de Juan Fernández –donde, entre otros, fallecieron su cuñado Felipe Cubillos y el animador de TV Felipe Camiroaga- donde el actual senador RN tuvo un rol protagónico en las gestiones posteriores al accidente, ocurrido en septiembre de 2011.

Esta vez, la contienda presidencial asoma lejos del gabinete. En La Moneda perciben que Allamand está teniendo un perfilamiento similar al del también senador RN Manuel José Ossandón. Aunque ambos han mantenido en general una línea de respaldo al gobierno, cada cierto tiempo irrumpen en el debate público marcando contrapuntos, que en el caso de Allamand generalmente están vinculados a la gestión política y comunicacional del gobierno.

En esa línea, en las últimas semanas en el gobierno han resentido que Allamand haya vuelto a instalar el debate sobre el "relato" del gobierno. En particular, molestó una reunión que sostuvo con cerca de 30 funcionarios públicos en un restaurante en el centro de Santiago, donde ya advirtieron sus intenciones presidenciales.

Con todo, en Palacio desdramatizan la nueva irrupción del exministro. "Es el eterno candidato", dicen, dejando entrever además que los números de las encuestas hoy no están con él. Pese a ello, creen que es muy probable que llegue hasta el final, porque hoy no existe ninguna carta indiscutida, como lo fue el propio Piñera en el periodo pasado. Y aunque subrayan que aún falta mucho tiempo para que esta discusión se convierta en un tema real en La Moneda, no son pocos los que ya se frotan las manos ante un eventual enfrentamiento entre Allamand y Joaquín Lavín, justamente quien fuera generalísimo de la campaña express de Longueira en 2013, y quien protagonizara un duro encuentro con el propio Allamand la noche en que éste fue a reconocer su derrota en las primarias ante la carta UDI en la sede de calle Suecia, que concluyó con el recordado "hasta cuando me vas a humillar" que le espetó el senador RN al actual alcalde de Las Condes.