Tensión en la frontera: Los desconocidos incidentes entre militares peruanos, bolivianos y policías chilenos en pleno Covid-19
El fin de semana, una patrulla de Carabineros fue objeto de disparos por parte de miembros del Ejército peruano en la Pampa, en el Hito 14. La semana pasada, en tanto, en Colchane, 400 personas se enfrentaron con personal militar de Bolivia, a quienes le sustrajeron un fusil.
La emergencia sanitaria, debido a las personas contagiadas por coronavirus en el país, tiene a las autoridades en estado de alerta. En este sentido, la zona centro y sur es la que concentra la mayor preocupación, debido al elevado número de personas infectadas. Sin embargo, en el extremo norte también hay tensión, y no precisamente por el virus.
La alerta de las autoridades se debe a dos hechos de violencia que han marcado las jornadas en el norte, específicamente en los pasos fronterizos, y que involucra en un caso a personal militar del Ejército peruanos y a Carabineros.
El fin de semana, entre sábado y domingo, personal de Carabineros fue objeto de disparos por parte de personal militar peruano, en la Pampa, frente al Hito 14, justo en el límite de la frontera de Chile y Perú.
El reporte policial, titulado “USO ARMA DE FUEGO CONTRA PERSONAL POLICIAL POR PARTE DE EJÉRCITO REPÚBLICA DEL PERÚ”, lo relata así: “Carabineros de la 4ª Com. Chacalluta (F) mientras efectuaban un patrullaje por el sector indicado, les sindican el desplazamiento de un individuo por un paso no habilitado, el cual era expulsado del límite político internacional por personal del Ejército Peruano".
Posteriormente, la constancia policial consigna que "personal policial escucha un primer disparo que impacta a escasos metros de uno de ellos, detectando que el origen de los disparos correspondía a vehículos militares que se encontraban en territorio Político Peruano, instante en que sienten un segundo disparo proveniente del mismo sitio”.
Las motivaciones de los disparos, por ahora, son desconocidas, y aunque no hubo personal policial lesionado, la Fiscalía de Arica abrió una investigación para determinar realmente cómo ocurrieron los hechos.
El fusil en manos de bolivianos varados
El otro caso que tiene al norte como escenario, ocurrió la semana pasada, el 7 de abril en Colchane, en la Región de Tarapacá, y que involucró a personal militar de Bolivia a y algunos de sus compatriotas varados en nuestro país.
Son 800 los bolivianos que están en el norte y no pueden ingresar a su país, dado el cierre de fronteras por el coronavirus. La situación ha ido escalando en tensión, dado que la gran mayoría lleva dos semanas en el paso fronterizo sin poder entrar, por lo que debieron improvisar un campamento para dormir. Ayer, incluso, un grupo de 450 personas viajó a Iquique para ser albergadas por el municipio.
El clima fue escalando, hasta que un grupo de 400 personas se enfrentaron con personal militar de Bolivia. Según el reporte de Carabineros, “este grupo de personas se acercó a una zanja existente en el lugar, la cual delimita el LPI y un grupo de ellos efectuó el cruce por aproximadamente 15 metros, encontrándose con cerca de 200 efectivos militares bolivianos que les impidieron el paso, generándose un enfrentamiento entre ellos, en donde uno de los efectivos militares golpeó a una de las personas, ocasionado una reacción violenta del resto de los manifestantes, quienes lograron arrebatar el fusil a uno de los militares presentes, siendo dispersados con el lanzamiento de gases lacrimógenos por parte de los efectivos bolivianos”.
Posteriormente, durante su huida y regreso al campamento base en lado chileno, este grupo de personas abandonó el armamento de guerra sustraído, enterrándolo en una zanja. El arma, sin embargo, fue encontrada horas después por personal de la Subcomisaria Colchane de Carabineros.
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