Las intensas negociaciones de la derecha para sumar a Amarillos y Demócratas por el “A favor”
Para la oposición es clave darle un carácter transversal a la campaña y revivir el eje del 62%del Rechazo del referéndum pasado. Por lo mismo, han intensificado las conversaciones para convencer a los partidos de centro.
Durante esta jornada se continuará debatiendo en la comisión política de Amarillos - liderado por el diputado Andrés Jouannet- una decisión clave para la tienda: la postura que adoptarán para el plebiscito del 17 de diciembre.
En Demócratas, tienda encabezada por la senadora Ximena Rincón, también harán algo similar: comenzarán jornadas de reflexión para abordar formalmente si se inclinarán por el “A favor” o por el “En contra”.
Ambas colectividades, en todo caso, han dado señales más proclives hacia el “A favor”.
Por lo mismo, la derecha -agrupada en Chile Vamos y el Partido Republicano- no ha estado ajena al proceso interno de esos partidos, pues, para ese sector, resulta clave que tanto Amarillos como Demócratas se manifiesten por el “A favor”, al igual como lo está haciendo la derecha. Y, según cuentan en el sector, hasta ahora las conversaciones están bien encaminadas.
Para la oposición es relevante contar con el apoyo que tomen esos dos partidos, pues la estrategia de la derecha apunta a congregar al 62% del rechazo del plebiscito pasado. En esos comicios, la presencia de Amarillos y Demócratas le dio un carácter transversal a la postura del sector, lo que resultó esencial para ganar en ese referéndum
De ahí que la derecha hizo una serie de gestiones para reunir a ambos partidos. Reuniones formales, concesiones en el contenido constitucional y la inminente discusión de las elecciones municipales han sido algunas materias que han estado sobre la mesa en las tratativas.
Las reuniones políticas
Uno de los hitos más importantes, hasta ahora, fue una reunión que se produjo en la casa de Isidro Solís el pasado 21 de septiembre. Ahí, participaron diferentes personeros, como los presidentes de Chile Vamos, Javier Macaya (UDI), Rodrigo Galilea (RN) y Gloria Hutt (Evópoli), además de integrantes del Consejo Constitucional.
El encuentro fue considerado como una especie de “catarsis” por Chile Vamos, debido a que Amarillos les transmitió que así como estaba la propuesta hasta ese minuto, no la aprobarían. Eso provocó que en las directivas de la UDI, RN y Evópoli se activaran para lograr incorporar las ideas de los partidos de centro.
De ahí que se formaron dos grupos de negociación para consensuar un contenido en común. Primero, uno integrado por el experto Máximo Pavez (UDI), el diputado Diego Schalper (RN) y los representantes de Amarillos, Zarko Luksic y Gonzalo García, entre otros.
Y luego un segundo grupo, en que además participó el senador Matías Walker (Demócratas), el experto Juan José Ossa (RN) y el comisionado republicano Carlos Frontaura.
En la derecha sabían que si acaso se cedía en parte del contenido se podría sumar después a Amarillos y Demócratas a la campaña. De ahí que uno de los puntos que se concedieron, y que más fue valorado por las colectividades de centro, fue poner en el artículo 1 la definición de que Chile es un Estado social y democrático de derecho.
Fuentes de Chile Vamos también recalcan que fue clave para Amarillos el que se enviaran a la Comisión Experta dos observaciones a la norma que protege la vida del quien está por nacer. En esa oportunidad, una de ellas cambiaba el concepto de “quien” por el “que” y la otra incorporaba que “la ley protege la vida del ser humano”. Sin embargo, ambas observaciones fueron rechazadas por la izquierda, lo que gustó a Amarillos, pues daba el argumento de decir que se pretendió que el texto fuera más liberal.
Lo mismo ocurrió con otras correcciones que fueron rechazadas por la Comisión Experta.
Las mismas fuentes recalcan que otro aspecto importante fue el sistema político y la incorporación del concepto “remoción de obstáculos” incluido en la redacción de la norma que establece que “el Estado promoverá las condiciones de justicia y solidaridad para que la libertad, derechos e igualdad de las personas se realicen, removiendo los obstáculos que lo impidan”.
El presidente de Amarillos, Andrés Jouannet, dice que “tratamos de conversar con todos los sectores. Para ser honesto, los sectores de centroderecha y también el Partido Republicano estuvieron mucho más abiertos a discutir con nosotros el tema constitucional. Lamentablemente, sectores cercanos a nosotros, como el PPD y el PS, no tuvieron la misma apertura”.
Las discusiones que vienen
Si bien en la derecha afirman que tienen confianza de que se sumen tanto Amarillos como Demócratas, lo cierto es que esperan que esto suceda dentro de la próxima semana, a partir del próximo lunes, después de la última votación del Consejo. En Chile Vamos , en todo caso, creen que fue un traspié que ese apoyo no se produjera esta semana.
Algunos consideran que de concretarse un apoyo, esto también se debería resaltar en lo que será la campaña del “A favor”. En ese sentido, la oposición hasta ahora está más desplegada que el oficialismo, y la idea de incluir a las tiendas de centro es darle un carácter “transversal” a la postura.
En esa línea es que sería visto como un fracaso que solamente aparezca la derecha inclinada por una opción. La idea también es vincular la campaña a lo ciudadano.
Negociación municipal
Una incipiente discusión que se empezó a tantear son las elecciones municipales de 2024. Si bien los dirigentes dicen que ese tema no se puso sobre la mesa en la discusión constitucional, lo cierto es que en la derecha visualizan que si Amarillos y Demócratas se suben a la campaña, ello se podría traducir en acercamientos para esos comicios.
El diagnóstico es que si se fracasa, no podría haber una especie de coordinación que culmine en un pacto municipal.
Hasta ahora, la idea es formar pactos de omisión dentro de toda la derecha para enfrentar a la izquierda en las comunas que lidera, como Santiago, Viña del Mar, Ñuñoa, Valparaíso y Maipú.
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