Editorial

Tuvimos un breve flashback al invierno en esta semana, pero eso no nos distrae que estamos en pleno verano y quizás en las semanas más estresantes del año. Lo que debería ser un fin de año relajado y feliz, lamentablemente se ha ido transformando en una maratón de resistencia donde la meta es llegar entero a fin de mes. Comidas, amigos medios olvidados que aparecen, celebraciones varias de fin de año, el regalo que faltó, y un largo etcétera transforman estos días en una carrera de obstáculos a veces difíciles de sortear. Por ello y para ayudarlos decidimos armar una guía de regalos distinta, y transformar las listas en algo entretenido y con más aires de panorama, porque todos algún regalo vamos a comprar. Elegimos hacer las compras en la calle, es verdad que el aire acondicionado del mall es tentador, pero la calle siempre trae sorpresas y algo inesperado; por eso les proponemos tres barrios que en pocas cuadras resumen un mundo variado de tiendas y boliches con regalos distintos y a buenos precio (siempre hay que saber buscar), y lo mezclamos con momentos de relajo para que el día destinado a las compras sea lo más agradable posible ¿les dio calor? Un jugo de verdad siempre ayuda, ¿se están demorando más de la cuenta y el hambre ataca? Hagan un stop y se comen un sánguche rico. Y así, de a poco y con paradas varias, van completando las listas y tachando pendientes.