Las oficinas que vienen
No se trata de prácticas desconocidas, es más bien la sistematización de condiciones óptimas para trabajar bajo una certificación semejante a la LEED. Puesto de esta manera, se convertirá en un atributo deseable de las empresas para mejorar su imagen, competitividad y, mejor aun, la calidad de vida de sus colaboradores.
"A ver. Aquí la gente viene a trabajar, no a pasarlo bien", era la respuesta que los clientes solían darle a Carolina Pérez –actual gerente general de Contract Chile–, hace no tantos años, cuando ella entró al negocio del diseño de espacios de trabajo y les hablaba de áreas colaborativas, de sociabilización y distracción.
"La idea de que la productividad tiene que ver con el bienestar ha ido penetrando en los últimos años. Hay una gran influencia de la masa que va entrando al mundo laboral. Es un cambio cultural fuerte. Los profesionales jóvenes valoran cada vez más el cuánto les aporta el espacio de trabajo, no solamente en términos de funcionalidad para realizar sus tareas, sino cómo aporta a su integración a un equipo. Generan más vínculos que generaciones anteriores y eso incide en su permanencia en las compañías", explica Carolina.
Pero en realidad ¿qué significa bienestar en este contexto? ¿Cómo medirlo?
Ahora los esfuerzos se pueden alinear con una certificación. En los términos más sencillos posibles, tal como hace LEED en relación a cuánto cuida el medioambiente un edificio, WELL se preocupa de cuánto cuida un edificio a las personas que lo ocupan. Ambas certificaciones son dependientes del Green Building Council.
Cuando la mayoría de los seres humanos en zonas urbanas pasa más del 90% del tiempo en interiores se hace necesario establecer parámetros, y WELL aparece como "un modo interdisciplinario de diseño, construcción y operación, enfocado en el bienestar y la salud de las personas. Con objetivos como salud, productividad, desempeño cognitivo, creatividad e innovación, compromiso de colaboración y retención, reclutamiento e identidad". Hace mucho tiempo un couch argentino le dijo a Carolina Pérez algo que la marcó: una persona puede conservar perfectamente su trabajo en una empresa dando el 50% de su potencial. El otro 50% lo da si quiere. Ahora Carolina cree que se trata de variables blandas como las que considera WELL lo que puede hacer esa diferencia.
Los conceptos que engloba WELL son ocho: aire, luz, mente, agua, fitness, innovación, alimentación y confort. Los requerimientos son muy específicos y se pueden revisar en el sitio web, pero hay cosas que decir en cada concepto, especialmente cuando empresas como Contract y otras se han estado acercando a ellos antes de que fueran reunidos y estandarizados.
"Cuando hablamos de aire hablamos de edificios libres de humo, con protocolos de aseo eficientes que aseguren la calidad del aire al interior", explica Tamara Goldvarg, uruguaya, gerente de recursos humanos y encargada de liderar el equipo para conseguir las primeras certificaciones WELL en Sudamérica para Contract, junto a una consultora avalada por el Green Building Council.
Afortunadamente en Chile hemos entendido la influencia de la luz natural en nuestros ciclos y son cada vez más raras las oficinas, al menos nuevas, que concentren gente trabajando sin algún tipo de fuente. Pero ¿cómo se alcanzan objetivos como mente o innovación?
"Hay estrategias como la que aplicamos en las oficinas de Bayer, donde se hizo un único espacio de café en toda la planta, un gran work coffee que ellos quieren que sea el corazón del lugar. No puedes tomar café en ningún otro lado. La idea detrás de eso es que la gente se mueva. Que se levante de su puesto, camine y además se encuentre con otros, que se genere interacción, lo que llamamos un interior activo que tiene beneficios en varios niveles", dice Carolina Pérez. Contract ha implementado gimnasios en oficinas como las de Sodexo y cuentan que para muchas empresas la cercanía con gimnasios es importante al momento de escoger ubicación. "Nosotros tenemos duchas en la oficina para la gente que viene en bicicleta. Hacemos concursos de quién sube más las escaleras en 20 días. Tenemos caminadoras que puedes usar para hablar por teléfono o revisar tu correo caminando despacio. No hemos logrado que el uso sea muy intenso", cuenta Carolina.
Al hablar de confort nos referimos a ergonomía, a mobiliario de calidad: "Nosotros insistimos con los clientes en que si en algo tienen que invertir es en las sillas. Hace tiempo los escuchábamos decir '¿para qué voy a comprar una silla de 200 lucas si puedo conseguir una por 40?'. La verdad es que no hay comparación entre una y otra. Mientras más operativo el cargo, mejor debería ser la silla porque probablemente es la persona que estará más horas del día sentada. Los gerentes, de hecho, pasan menos horas sentados en sus sillas".
Aún son pocas las empresas que optan por certificarse LEED, aunque Carolina les escucha repetir que la sustentabilidad les preocupa, y mucho: "Hay un tremendo trecho donde hacer una oficina más sustentable no te cuesta ni un peso más. Tiene que ver con una selección de estrategias y materiales. Con WELL pasa lo mismo. Hay mucha preocupación de los clientes. Entienden que un equipo feliz será más productivo en el término más amplio de la palabra. Abarca el captar y retener a la gente que me interesa. Un cliente nos decía 'mira esta oficina, la estoy haciendo para gente que hoy está en el colegio. La gente que me llega hoy y la que seguirá llegando valorará cada vez más estos temas. Les impactan más en su desempeño'".
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Obtener la certificación WELL significó para la empresa francesa SCENEO una prueba irrefutable de su compromiso con un ambiente saludable para sus empleados bajo los estándares más altos de diseño; también es un diferenciador que les dio una gran ventaja en el competitivo mercado francés. Pero sobre todo les dio la satisfacción de trabajar en un lugar inmejorable.
No es ciencia ficción
Antes de lograr el Gold level de la Certificación WELL, las oficinas de SCENEO, en Benzons, Francia, ya habían recibido tres premios de la industria inmobiliaria por consideraciones medioambientales, tales como el edificio de más bajo consumo, alta calidad ambiental e investigación en métodos ambientales. El de SCENEO es el primer edificio en Europa continental en recibir la certificación WELL, y la líder del proyecto, Virginie Scaglia, le dijo a la entidad que su objetivo era estar al frente de los últimos avances en ciencia y tecnología aplicada a la construcción de edificios. "En resumen nuestros objetivos al perseguir la certificación WELL eran ganar una ventaja competitiva en el mercado inmobiliario de París, subrayar nuestro liderazgo dentro del movimiento de la sustentabilidad y, más importante que todo, mejorar la salud y bienestar de nuestros inquilinos y empleados", dijo ella.
SCENEO enfrentó la categoría 'mente' con belleza en el diseño interior de sus espacios que busca reflejar las vistas de los alrededores. "Nuestros ocupantes se benefician de un ambiente de trabajo ideal con niveles de iluminación brillantes pero controlados, atenuaciones acústicas, calidad del aire mejorada y layouts que propician prácticas de trabajo saludables y menos sedentarias. Queremos asegurarnos de que nuestros inquilinos tienen los espacios más saludables posibles para moverse a lo largo de sus días laborales", dijo Scaglia a WELL. La certificación también los ayudó a reconocer el valor agregado en incorporar la naturaleza en espacios interiores. Uno de los principales objetivos era aumentar la conexión con los exteriores, así es que pusieron instalaciones para comer en las terrazas del edificio. Lo que era un lugar para comer corriente se transformó en un escape que ofrece vistas asombrosas de París. wellcertified.com / contractworkplaces.com
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