“Autos embarazados”: ¿Por qué se hincha el capó de los autos en China?

Hace solo unos días te contamos sobre la “pintura fría” de Nissan, un revestimiento térmico diseñado específicamente para reflejar la energía solar y reducir la acumulación de calor en el interior del vehículo. Un desarrollo que ha mostrado resultados impresionantes y que se presenta como una excelente solución frente a los tiempos cada vez más calurosos que vivimos.

Y es que el calor extremo puede causar estragos a los autos, tanto a nivel mecánico como de componentes. Basta ver lo que está ocurriendo en China, por ejemplo, donde en plena ola de calor -con temperaturas máximas superiores a 40 ºC-, algunas carrocerías han comenzado a hincharse como una pelota.

No es una broma, así lo han constatado varios medios asiáticos, luego de hacerse viral por el video publicado por una periodista en la red social X. “No es una broma, los autos fabricados en China se “embarazan” cuando hace mucho calor”, señala Jennifer Zeng en el post.

Este fenómeno, sin embargo, no es exclusivo de los autos chinos, sino que, de acuerdo con varias publicaciones, el motivo se debería al vinilado que añaden algunos propietarios a su vehículo, que pueden ser películas protectoras de pintura o bien decorativas.

La firma norteamericana experta en vinilos Wrap Guys arroja un poco de luz al respecto. Explican que un calor muy elevado sumado a una exposición prolongada a la luz solar directa puede afectar a la apariencia de esta envoltura: “Con el tiempo, las altas temperaturas pueden hacer que las envolturas de vinilo se deformen, formen burbujas o incluso se desvanezcan”.

Esta hinchazón se produce, en teoría, por el adhesivo que pega el vinilo a la carrocería: el calor muy elevado libera gases que se expanden y quedan atrapados por la propia película. Esto genera esas enormes burbujas que pueden llegar a extenderse por todo el capó o las puertas como vemos en estas sorprendentes imágenes.

Así, estos expertos recomiendan evitar estacionar el auto al sol en periodos de calor excesivo y vigilar regularmente su estado para evitar llegar a esa situación tan extrema como surrealista.